-para mí, toda esta porquería de la navidad me tiene sin cuidado-pronuncio mientras se levantaba del sillón donde nos encontrábamos-esta época solo es donde las estúpidas personas quieren llenar a los demás con regalos para así poder remediar los errores que tuvieron en el pasado, es donde lo material vale mucho más que lo sentimental, vale más que el alma, vale más que el corazón... ¿a quien diablos se le ocurrió toda esta tontería? ¿Quién fue el estúpido que dio el primer regalo? ¿Que no se supone que deberíamos estar celebrando el nacimiento de nuestro salvador? ¡¿Porque entonces hacemos cosas muy diferentes?!-me levante con una pequeña sonrisa, abrazándolo por detrás, escondiendo mi rostro en su espalda, a lo que él se estremeció
-vamos maknae, no lo tomes de esa manera, la navidad no es tan mala como lo piensas, es cierto, muchos se enfocan en solo dar y recibir, pero muchas veces un pequeño obsequio puede hacer que un corazón se alegre al punto de querer salirse del pecho, además no son solo los regalos si lo vez de otra forma-acaricie mi rostro lentamente en la suave tela de su camisa moviendo mi cabeza de un lado a otro y continúe hablando-en estas épocas, las familias se reúnen, los familiares lejanos viajan millones de kilómetros para poder ver a esas personas que han extrañado durante tantos días
-tuvieron 364 días más para hacerlo, pero siempre usan la excusa de la navidad para poder levantar su trasero de sus camas eh ir a saludar y después volver a irse para que nadie vuelva a saber de ellos por todos los días que faltan para que de nuevo sea esa jodida fecha-exclamo el maknae malhumorado
-pero tal vez no pueden ir los 364 días que quedaron del año, ya sabes, escuela, trabajo, problemas. Así que hacen su mayor esfuerzo para poder ir en esa fecha tan especial, son las pequeñas cosas que hacen a las personas sonreír... imagínate una madre que no puede ver a su hijo, que solo contempla en su ventana el pasar del tiempo y no a su hijo aproximarse a la puerta para ver a su madre... entonces ella tiene un deseo, un solo deseo que pide con fuerzas, abrazar a su hijo. El regalo más grande que pudo recibir ese día que tú maldices tanto, fue el venir de aquel que quiso desde el día que supo que estaba creciendo dentro de ella
-¡tonterías!-grito, volteo a hacia mí y yo no solté su cintura, nuestras caras quedaron solo a centímetros. Vi como tragaba saliva pesadamente con nerviosismo, pero en un santiamén recupero esa compostura enojada que había tenido desde hace 15 minutos que empezó con sus quejas-eso no justifica a las demás personas, al egoísmo que tienen esos que se hacen llamar humanos, a su codicia y desenfreno por comprar, comprar y comprar. Malditos obsequios que después se van directito a la basura-reí un poco
-escúchate, pareces todo un Grinch-el bufo y sentí su aliento cálido en mi boca, haciendo que me estremeciera-¿me dirás que a ti no te gustan los regalos?
-¡por supuesto que me gustan! Pero no por eso soy tan egoísta como los demás
-deberías dejar ya ese odio a la navidad, estamos a solo 2 semanas de celebrarla
-¿y eso que? ¡Tengo años odiándola!
-Kyuhyun-solté su cintura y tome sus mejillas entre mis manos-eres un maldito payaso, amargado y vicioso jugador de video juegos, deja esos malditos pensamientos que no nos arruinaras la navidad de nuevo
-¿arruinárselas? ¡Me mantuve encerrado toda la noche en mi habitación sin hacer ruido!
-¿y crees que no nos dolió no tenerte con nosotros? ¿Crees que no nos sentimos mal porque tú estabas jugando Starcraft con una botella de vino encerrado en tu habitación, refunfuñando por tu odio al mundo? En verdad no disfrutamos, todo fue diferente en año nuevo cuando estuviste con nosotros... conmigo-Kyuhyun relajo solo un poco su expresión pero aún mantenía el ceño fruncido
-no odio al mundo-susurro mientras el quitaba suavemente mis manos de sus mejillas-solo odio que finjan tanto, que...-bufo-para que te lo vuelvo a decir, seguirás tratando de convencerme de lo contrario
-¿tú no tienes algún sueño de navidad, Kyu? ¿No tienes algún deseo? ¿Algún regalo que anheles tanto hasta el punto que has perdido la cuenta de cuantas veces lo has pedido?
-lo tengo, lo he tenido desde hace tiempo, eh pedido tanto en silencio porque se me conceda, porque lo reciba como regalo cualquier día del año, eh apretado mis ojos y mis puños repitiendo el deseo en mi mente hasta el punto de que me duelan los parpados y que las uñas se encajen en las palmas dolorosamente...-bajo la mirada-pero sé que no puede ser posible, sé que es un error si pasara, sé que se vendrían tantos problemas, que jamás habría un final feliz, que no sería bien visto y que soy tan egoísta por solo pensar en mi propio bienestar y no en el dolor que el deseo causaria...
-Kyu-puse mis dedos en su barbilla y lo obligue a que levantara de nuevo la cabeza, si no lo conociera bien, diría que estaba a punto de llorar, pero él no lo aria, era tan ególatra que jamás permitiría que alguien viera salir esas gotas saladas de sus ojos, pero el dolor que sus ojos reflejaban me perforaban el alma completamente-¿cuál es tu deseo? ¿Qué es lo que más quieres en este mundo? Dímelo... estoy aquí para apoyarte y tratar de hacer posible tu felicidad
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Nuestro Deseo.~KyuHae (REESCRIBIENDO)
Fanfiction~ Cuando uno es un pequeño niño le enseñan las cosas que se suponen son malas y buenas en este mundo. tratan de decirnos a que está destinada nuestra vida, nos dicen que es lo que podemos hacer y que no y mientras crecemos, uno se da cuenta que no t...