La noche en que me encontraron

Capítulo 3

-Entonces ¿Qué hiciste?- pregunta el agente frente a mí.

-No tenia opción, era morir con los que quería o morir fuera, donde nadie me conocía. Luego me tranquilicé y me senté en la sala con la cabeza gacha, Robert levantó mi cara suavemente y dijo:

- Sé que fue un error traerte pero te diré algo, disfrute estar contigo y estoy seguro de que tu también y lo mejor de esto es que los últimos minutos que viviré estaré con la persona que más quiero, eso hace que no tenga tanto miedo.

Me lo dijo de tal manera que me quede sin habla, después, sacó la caja de nuevo, la abrió y de ella extrajo un hermoso collar de flores plateadas con detalles de color violeta y mientras me lo ponía me decía con voz suave y dulce:

- Éste collar ha pertenecido a nuestra familia durante siglos, esconde también un secreto, y sé que al descubrir éste, lo cuidarás. – Luego me sonrió, se levantó y estiró su mano para levantarme también; me miró firmemente a los ojos y declaró:

- Quiero que te escondas y que nunca te quites el collar, pronto descubrirás el secreto.

Entonces se abrió la puerta del frente y ahí estaba... era la persona que vi cuando toque el hombro de Robert: el señor canoso. 

Robert me miro como si fuese el último día en que lo vería, su último día de vida, luego gritó que me escondiera y corrí hacia las escaleras, llegue a la planta alta y entré en la primera habitación que vi.

Dentro de ésta había una puerta, suponía que era una habitación dentro de otra y no me equivoque; abrí la puerta y dentro de la segunda habitación justamente en el centro se hallaba un piano negro, era precioso, no se mucho acerca de pianos pero éste tenía cola y sólo tres patas.

Después de haber estado en esa habitación por un largo tiempo, me di cuenta de que no podía escuchar nada estando ahí pero justamente cuando pensé esto, el piano comenzó a tocar solo como por arte de magia, la melodía que escuché era serena, radiante o simplemente magnífica, la recuerdo como si la hubiese escuchado ayer.

Me fui acercando al piano, solo por curiosidad y casi al momento de tocarlo Verónica apareció en la habitación; la mirada que tenía era temerosa, parecía como si quisiese decirme algo importante, pero solo pude percibir que se abría su boca, sin emitir ningún sonido, luego la cerro tomando una manta que estaba a un lado de la puerta y cerca del piano dejó caer unas cuantas lágrimas antes de cubrirme con ella; era más bien como una capa, recuerdo que era de color azul, un azul muy oscuro. Verónica me volvió a mirar pero esta vez dulcemente, mencionó que la capa me cuidaría, después de eso desapareció y no la volví a ver.

Me quede mucho tiempo en la habitación después de que Verónica estuvo ahí, pensé que no podría salir porque sería peligroso, aunque algo dentro de mi me insistía que tenía que averiguar qué estaba pasando afuera, sin embargo el recuerdo de Robert diciendo que sucedería algo muy malo, me lo impedía.

Finalmente el cansancio y la desesperación me vencieron y quede completamente dormida, no recuerdo más.

- Podrías decirme... ¿Cómo fue que sobreviviste? Me refiero a que lo único que quedaba de pie en esa casa era una parte de la puerta que mencionaste y no me explico ¡por que estabas entre los escombros y aun con vida!

- Supongo que la capa con la que me cubrió Verónica tuvo algo que ver, y el collar, el que me dio Robert, el dijo que el collar tenía un secreto y que lo descubriría, supongo entonces que me mantuvo viva o joven.

- Entonces, ¿ese es el secreto familiar?

- No, no lo es.

- ¡Oh! ... tú mencionaste que en la visión que tuviste el señor canoso se convirtió en lobo, ¿la familia tenía que ver con esto?