Es el día más especial de mi vida, el más esperado en toda mujer o en algunas, voy a dar ese gran paso con el hombre que elegí para compartir el resto de mi vida.
Me casó con Francisco, mi novio de la infancia y de toda mi adolescencia, el primero en todo, mejor dicho el único, pero cuando creó tener todo y ser feliz, siento que me falta algo o alguien, es una sensación rara de explicar, pero justo este día me di cuenta de que realmente no siento que él tiene que ser ese hombre que me haga feliz hasta el resto de mis días.
No sé como afrontar esta situación, pero tampoco puedo engañarme y casarme igual, así que decido cambiarme y prepararme para tomar esta gran decisión.
Ya es la hora pactada para partir hacia la estancia donde se realiza la ceremonia. Mi papá, Ová, me espera en la puerta de mi casa, ya cambiada y lista me dirijo hacia el auto.
Voy pensativa todo el viaje, no puedo dejar de pensar en la decisión, en como reaccionarán todos y lo que más me duele es la desilusión que provocará en Francisco, porque por más que sienta que no es el hombre de mi vida, no significa que no lo quiera hasta el punto de amarlo. Para mí eso no es suficiente, porque lo amo por todos los años compartidos juntos, pero no es el indicado para dar este gran paso.
Llegamos al lugar y está todo hermoso, es lo que siempre habíamos soñado con Francisco y lo cumplió, el me complace en todo, hasta en mis locuras, sé que me odiara por esto, pero no puedo casarme sin sentirme segura, porque de algún modo lo estaría traicionando a él y eso no me lo perdonaría jamás. Es así que decido ir a buscarlo y decírselo antes de que comience la ceremonia.
―Mi amor, ya vamos a empezar, la gracia era que no te viera hasta que entres con tu papá. ―Me dice Francisco cuando me ve.
―Ya se, pero tengo que decirte algo antes, no puedo esperar hasta que termine la ceremonia.
―¿Que es tan importante que me lo tenes que decir ahora? No me asustes Oriana. ―Francisco se está poniendo nervioso y eso hace que yo me ponga más nerviosa de lo que ya estoy.
―Bueno... Yo... No, no puedo casarme y hacerte esto. Perdóname.
―¿Que? ―Grita. ―¿Vos me estas cargando? Pero... ¿Por que?
―No me preguntes por que, pero lo sé, es lo que siento, no siento que seas el indicado, perdón.
―Perdón me decís. Yo te amo Oriana, compartimos juntos muchos años, momentos, no me podes decir semejante estupidez, que no soy el indicado. Por Dios Oriana.
―Perdóname pero es lo que siento, sé que me falta algo y no me preguntes como, pero se, aunque me duela, que no sos vos. No me puedo engañar y casarme igual. ¿Te pensás que no me duele tener que decirte todo esto?
―No se nota que te duela. No me podes estar diciendo esto el día de nuestro casamiento.
―Lo tengo que decir porque es lo que siento, y espero que algún día me perdones, porque te amo, pero no es suficiente.
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Casualidades De Amor [EDITANDO]
RomanceJulian Serrano, un chico guapo, dulce y decidido, que después de un mal momento con el amor en el pasado, se resigna , hasta ahora que quiere volver a intentarlo! Al conocer una chica muy especial su vida cambiara! ¿Le dará una nueva oportunidad al...