Luna de colores

6-Tardes sin fin

Los siguientes días pasaron sin anormalidad alguna; Tonks, algunas noches se quedaba a dormir lo que permitía que hablará hasta el amanecer con Remus. Otras veces sólo iba a comer, y esos días Remus se comportaba como un extraño ante ella, Tonks no tenía ni idea del porque se comportaba así, ella trataba de olvidarlo y tenerle paciencia pero ya empezaba a cansarse.
Cuando Tonks llegaba al cuartel, Remus algunas veces trataba de no hablarle, ya que un día se dio cuenta de que no soportaba si no veía a Tonks y ahora lo volvía a comprobar.
-Remus, ¿crees que este bien si tiró esta pared?- preguntaba Sirius mientras recorría la pared de su árbol genealógico-. Porque la verdad no me gusta.
-Sí- decía Remus parado en el umbral de la puerta mirando escaleras abajo. Eran las 4 menos 15 y no había señales de Dora.
-Sabes, quiero derribar toda la casa.
-Sí.
-Y después puedo hacer un club nudista lleno de motos.
-Sí.
-Y después me voy a volver mortífago-dijo Sirius a un lado de el con los brazos cruzados.
-Sí, excelente.
Sirius le dio un golpe en el hombro, que hizo que Remus cayera sentado en el pasillo.
-¿Qué te sucede?- dijo Remus levantándose.
-¿Yo?, tú no me estabas prestando atención, sólo estoy hablando sin parar y tú ni me ves siquiera.
-Perdón, pero es que ... olvídalo, ¿qué me estabas diciendo?
-Estas esperando a Nymphadora, ¿no es así?
-¿Qué?, no... yo sólo estoy aburrido.
Sirius sólo lo observó sin decir palabra.

¿Por qué Sirius lo tenía que conocer tan bien?

-Bien, es que ayer casi no hablamos y pues pensé que vendría hoy pero veo que no. A veces olvido que ella tiene una vida fuera de la orden.
-Tranquilo, tal vez venga más tarde.
-Ya, por cierto, Canuto ¿y los Weasley?
Sirius se rasco la cabeza nervios -ellos fueron a la madriguera- Sirius sabía porque no había ido Tonks a la casa y estaba apunto de decirlo.
-¿A la madriguera?, ¿acaso ocurrió algo?
-Este... es que llegó Charlie de Rumanía. El chico quería darles una sorpresa y cuando llegó y no encontró a nadie, pues les mandó un patronus y la familia entera se fue.
Remus sólo había escuchado el nombre de Charlie y había entendido porque Dora no había ido.
-Y no me aviso, claro... Bueno, ella por qué tendría que avisar, al fin no somos nada- dijo Remus sentándose en el suelo-.Y yo aquí esperando a que ella regrese, hoy es luna llena- se levantó y salió al pasillo-.Tengo otras cosas en que ocuparme, estaré en mi casa, Canuto.
-Oye, espera- Sirius ya lo había alcanzado-. Si te ausentas ella sospechara -eso era mentira, pero Sirius no quería que Remus se vaya, no así.
-No te preocupes, voy a regresar.
Remus salió de la casa y Sirius se quedo sólo.
En la madriguera, los Weasley y Tonks, pasaban un buen rato. Pronto llegó la hora de la cena y se sentaron a la mesa, entre bromas y largas pláticas terminaron de comer. La mayoría se fue a la sala, pero Charlie y Tonks decidieron salir a dar un paseo a la luz de la luna.
-¿Y cómo has estado Nym?- pregunto el mayor de los Weasley, mientras se sentaba en el pasto.
-Ya te he dicho que bien, ¿qué no me prestas atención? -bromeó Tonks mientras se sentaba junto a él-. Sé que mi belleza no te deja concentrarte en nada más, pero hombre, haz un esfuerzo.
-Vaya, se me olvidaba que tu segundo nombre era modestia -dijo Charlie mientras le pasaba un brazo por encima de los hombros.
Tonks se dejo abrazar por Charlie, no era un secreto que a él le gustaba, y en Hogwarts salieron unos meses antes se salir, pero como Charlie se fue a Rumanía sólo quedaron como amigos.
-¿Qué me ves? -dijo Tonks tocándose la cara-. ¿Tengo algo en los dientes?
-Es sólo que te ves muy bonita hoy -dijo Charlie mientras se acercaba peligrosamente a Tonks.
-Vamos, me apenas Charlie- Tonks no se movió.
Charlie tomó eso como un permiso. Toma la pequeña cara en forma de corazón y tiernamente beso los labios de Tonks. En un principio ella se sintió bien, pero pasados los segundos no aguanto más y se apartó.
-Esto... Charlie, no puedo, perdón.
-Lo sabía,¿quién es? -pregunto Charlie quien molesto se levantaba del suelo.
-No sé de qué hablas- Tonks si sabía de que hablaba, mientras besaba a Charlie pensó en Remus, en la manera en la que el sonreía cuando la veía cruzar la puerta, en la manera en la que el besaba su frente cuando era hora de irse, esto era el colmo, Tonks estaba enamorada-. Tú eres como un hermano para mi, Charlie.

-Demonios, Tonks. Yo no te veo así, además parece que olvidas que salimos durante cuatro largos meses antes de que yo me fuera -Charlie comenzó a caminar a la casa-. Mira, respeto tú decisión y aunque lo niegues, espero que seas feliz con él.
Tonks no lo siguió, pensó que sería mejor que estuviera sólo, se apareció en su casa y pensó que después se disculparía con Molly.
Tonks vio la hora y supo que sería demasiado tarde para ir al cuartel pero no le importó y se apareció en la puerta de la casa, con un hechizo entró a la casa.
-Hola, hola, ¿hay alguien en casa?
-Hola, Tonks.
-Sirius, ¿cómo estás?
-Más sólo que un perro.
-¿Qué? - Se escuchaba decepción en la voz de Tonks-. ¿Por qué estas solo?
-Porqué Lunático, se cansó de esperar a que regresaras, hizo su berrinche y se fue.
- ¿Cómo que se fue?,¿a dónde? -Tonks se sentó en el sillón mirando a su tío por respuestas.
-No lo sé -Sirius mintió, sabía que si le decía la verdad iba a ir a buscarlo -pero prometió que regresaría mañana.
-No sabía que Remus acostumbraba a hacer berrinches -Tonks pensó que el día podía terminar bien pero se equivoco-. Esto apesta, primero Charlie y ahora esto.
-No es algo que Remus haga a menudo, pero claro que a veces reacciona así, espera... ¿Charlie? -Sirius se sentó y puso toda su atención en ella- ¿Qué con él?
-Él... intento bueno, más bien... él me beso -el cabello de Tonks se tornaba amarillo y al ver la cara de Sirius no pudo evitar dar explicaciones-. El me besó, y al principio estuvo bien pero después yo... yo no podía sacar a Remus de mi cabeza y ... y -ella había empezado a sentir vergüenza-. Supongo que siento algo por Remus...
Sirius la abrazo paternalmente. -Remus dice que se siente raro por ti, pero él piensa que tú sólo lo ves como tu abuelo -Sirius sonrió y se alejo para verla mejor-.Yo sé que es difícil para los dos, pero hasta que no hablen con la verdad van a seguir con esta incertidumbre.
-Yo lo quiero, es solo que no se cómo hablar de esto con él -Tonks se paro del sofá- ¿Me puedo quedar a dormir?
-Hasta la pregunta ofende -y levantándose del sofá subió las escaleras -ahora, a dormir.

En una vieja casa en las afueras de Londres, un licántropo ya había comenzado su muy dolorosa transformación mensual, Remus no recordaba que fueran tan dolorosas, ese mes las cosas no habían parado en la orden y con las guardias se olvidó de tomar la poción mata-lobos, así que esta transformación dejaría muchas heridas, lo que traería muchas cicatrices nuevas. El ya quería que la noche terminará, quería volver a Grimmauld Place, quería ver a Tonks, quería besar su frente... de manera drástica los pensamientos cesaron. La transformación había comenzado, Remus sentía sus huesos estirarse y la manera en la que el cabello empezaba a brotar, los gritos de dolor pronto se convirtieron en aullidos... el lobo había ganado.