Prólogo

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Sujeto N°1- Cogí el bote de lejía con manos temblorosas.
¿Era esto lo correcto?
Sujeto N°2- Cargué la pistola y me la coloqué entre lágrimas sobre la sien.
"Ojalá no duela."
Pensé en ese momento.
Sujeto N°3- Me balanceé lentamente sobre el borde del edificio. Adelanté un pie y lo hice vagar sobre el vacío.
Sujeto N°4- La sangre no cesaba de manar de mi profunda herida y yo a cada segundo que pasaba perdía fuerza.
Dejé caer la cuchilla ya que mis manos no podían soportar el peso y, en medio del dolor, sonreí.
Ya no había vuelta atrás...

***

Cuatro chicos de edad similar se encontraban en una estancia vacía, sin muebles, ni personas, ni nada.
Daba la impresión de que ni si quiera había paredes ni techo.
Ellos cuatros se miraron entre sí.
"¿Que está pasando?"
Se preguntaron a si mismos de forma simultánea.
Dos chicas y dos chicos se encontraban en la extraña estancia.
-¿También os habéis suicidado?- Preguntó una chica de aspecto débil y falta de autoestima.
Todos asintieron al unísono.
- ¿Alguien sabe qué es lo que tenemos que hacer aquí? Supuestamente estamos muertos, ¿no?- Dijo otra chica. Esta más bien parecía como si... Le hubieran arrebatado la voz. Como si fuera una sonámbula, un zombi. No tenía brillo en los ojos, ni nada que se le parezca. Simplemente no tenía... Nada.
Los otros chicos se miraron entre sí y uno de ellos abrió la boca, para cerrarla al instante después.
- Quizás la muerte es de una manera que nunca nos imaginamos- empezó a decir uno de los dos chicos, con ojos caídos y rojos, probablemente por la droga y el alcohol-. Quiero decir, cabe la posibilidad de que la muerte sea de una manera que nunca consideramos y por eso ahora... No la reconocemos, por decirlo así.
Todos lo miraron sorprendidos. ¿Era tal vez un bicho raro?
- Hablas de ello como si te hubieras pasado horas reflexionando sobre la muerte. - Dijo el otro chico, quien le dio un eje despectivo a sus palabras.
El chico de aspecto drogadicto bajó la cabeza avergonzado.
-¿Y bien...?- Empezó a decir la chica de la baja autoestima. Número 1.
- Y bien... ¿Qué?- Dijo el arrogante, número 4.
- Se refiere a quién empezará contando la... - tragó saliva, antes de continuar, pero al chico de ojos rojizos, número 2, se le había formado un nudo en la garganta, por lo que alguien terminó por él la frase.
-... La razón de su respectivo suicidio- Completó la chica vacía, sujeto número 3.
Entonces todos los presentes se miraron entre sí y lo decidieron.
Compartirían la historia de su suicidio.
※※※
Esta historia quería dedicársela a GingkoWillow por ser tan especial ^^.
Es una persona que me cayó muy bien y que conozco aquí de Wattpad. Espero que les gusten sus historias tanto como me gustaron a mi c:
¡Nos leemos pronto!

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