Marfan.

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"Porque el mundo te queda chico" Era la respuesta de ella a casi todo. Mientras la oía, puramente invadida por el nerviosismo a falta de respuestas claras, me restregaba los ojos, presa de los impulsos de mis largos dedos, como patas de araña, "Que impresión" soportaba oír. A veces, hasta me lo creía.

A fin de no angustiarme, sonreía, deformando mi expresión, soportando unos ojos en blanco, intolerantes a mi curiosidad. Todo seguía, risas, preguntas por lo bajo, miradas adultas despreciables, miradas infantiles asombradas "Quiero ser tan alto como ella, así podría..." todos continuaban la oración de diferentes maneras, todas me hacían sonreír. Obviamente esa inocencia era conservada por no más de diez... Once años, luego, se deformaban, a la par de mis huesos, atrofiándose, adoptando una forma de pensar repulsiva.

Esa inocencia de diez... Once años, también acababa en mi, pero para abrirme los ojos, para revelarme abruptamente que el mundo no me quedaba chico. Si las estructuras materiales son perfectas para la gran mayoría, los que restan... Los que sobramos, en los que se gasta dinero con fines obsoletos, nosotros somos defectuosos, yo soy defectuosa. Estos pensamientos me llevaron a tomar decisiones, para algunos cruelmente favorables, para otros... Ya ni se que piensan. Pero, con mi pensamiento adolescente creo estar segura, "Porque le quedas grande al mundo"

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