Amor, son solo 3647 kilómetros en linea recta.

End.

La mente le dijo: "NO"
El corazón, bien el corazón, él fue más drástico ató a la mente y le amenazo, después dijo: ¡Se feliz!

Abrió con tanto entusiasmo su correo esperando respuesta de aquella persona, la cual extrañamente hacia que sus mejillas se sonrojaran simplemente leyendo un mensaje, en cuanto lo abrió y vio al fin una respuesta su emoción fue tal que no pudo dejar de sonreír por ese "Hola"

Su madre ya simplemente le ignoraba "Un chico de algún libro o de algún anime que vio, o quizá una pareja gay que le gusta debió terminar junta" es lo que ella pensaba, ya que su hija se emocionaba y sonreía así siempre que veía algo que le gustaba.

Sus amigas se reían con ella (y en ocasiones de ella) por como hablaba con tanta ilusion de este muchacho que se encontraba tan lejos, aún así les parecía tierno cuando les mostraba uno que otro mensaje o una foto de él y les alegraba que se interesara por un chico de su edad (y no mayores como a ella le gustaban o imaginarios como era siempre su costumbre).

Su vida era normal sin mucho estrés, sin tantas emociones o algo más que las escuela, sus amigos y hobbies. Él le había dado color a esa parte tan opaca de su vida.

Llegó prácticamente corriendo a su casa, se metió a la ducha y después de ponerse la pijama (a las 3:00pm) comenzo la tarea y término lo que pudo (que a fin de cuentas no era mucho) para por fin seguir platicando con ese chico.

Ella siempre se sorprendía de haber encontrado a alguien tan perfecto para ella, compartía muchos de sus gustos, no se molestaba por las estupideces que decía e incluso jugaba con ella.

Su corazón se inquietaba, algunas veces regresaba a la realidad y pensaba que lo suyo nunca seria, después de todo eran muchos kilómetros de distancia, 3647 para ser exactos, pero después se decía:
"Al demonio, soñar no me dañara, no dañara a nadie y si lo hace será solo a mi, así que... por esta vez me dejaré ilusionarme"
Su único temor era que alguien más lo notara, que viera a aquel hombre tan maravilloso y a tan larga distancia ¿Como evitaría que no se lo "robaran"? ¿Como evitaría que se enamorará de alguien más? Tal vez le daba muchas vueltas al asunto, era improbable que ellos dos terminan juntos, tantos kilómetros de distancia los separaban.

Sus conversaciones eran tan simples, tan lindas, tan inocentes... Este era la clase de romance que ella esperaba simplemente la hacia sonreír todo el día.

Ahora, sólo no puedo dejar de citar como si fuese un mantra la frase: "Algún día la distancia se morirá de celos al vernos juntos"