La mañana había estado fresca, sin embargo, la tarde era de lo peor.
El rubio odiaba eso. Prefería los climas sin cambios de Asgard, pero, Midgard tenía demasiados, aún no se acostumbraba a ellos. Además, desde que había decidido vivir en la Tierra cada día se le complicaba más y más debido a su "querido" hermano Loki.
Se tiró al mueble más cercano que encontró y se despojó de la camisa. Quería dormir, pero con ese calor infernal nada se podía.
-¡Padre! ¡Espero pronto sea invierno aquí! ¡O al menos se quite este maldito calor! -profirió enojado tirando la camisa.
Su hermano regresaría hasta la tarde. O al menos eso quería que pasara, no quería verlo y tener otra discusión airada con tanto calor.
El pelinegro fastidiado de siempre ver lo mismo todo el tiempo en Midgard sin diversión alguna, buscando algo y lo peor de todo con ese calor de los mil demonios, buscaba refrescarse, diversión y alguien nuevo al que molestar fastidiar y hacer de su nuevo juguete. Al pensar en el hecho de un nuevo juguete no pudo evitar pensar en su amado hermanito.
Soltó una pequeña risa mirando al suelo, ¿Quién mejor para molestar sino es a su amado hermano?
Intentando olvidar el calor mientras pensaba en que decirle o hacerle este se dirigió hasta donde yacía dormido.
El rubio sintió una presencia. De seguro era su hermano, pero era tanto el cansancio que tenía que decidió ignorarlo y seguir acostado. Si seguía así pronto estaría todo pegajoso. Empezó a recordar cosas de su infancia, cuando su pequeño hermano Loki no era tan molesto como lo es ahora.
Loki vio allí a su hermano con el pecho al descubierto, sin nada que lo protegiera o sin nada que lo tapara, estaba muy desprotegido, era su oportunidad, pero aun así lo dejo pasar. Camino alrededor de él, sin despegar un ojo, entonces fue bajando su mirada, su pecho y todo su cuerpo era musculoso y muy seductor, ya entendía porque las mujeres lo preferían.
Se posó al frente del rubio acercando una mano a su hombro, se detuvo.
-Hermanito, juguemos.
Una voz retumbó en sus sonidos. Instantáneamente, y aún dormido, tomó la mano del pelinegro y lo jaló hacia sí, haciendo que cayera sobre su pecho desnudo y soltara un bostezo.
-¿Quieres jugar? -contestó abriendo los ojos y sonriendo maliciosamente al ver la cara de Loki.
Devolvió la sonrisa al rubio asintiendo.
-¿Por qué no? En estos momentos jugar quita el calor. Hermanito, quiero jugar, a verdad o reto. -pensó que así podría llegar a ir un poco más lejos, y era más divertido. -Empiezo. ¿Verdad, o reto?
Le dedicó una sonrisa divertida al menor que yacía en su pecho aún.
-Elijo, verdad. Por el momento.
Lo hizo a un lado y lo acomodó de cuerpo completo sobre el suyo. El oscuro cabello del menor estaba creciendo, motivo por el cual le rosó la cara, haciendo que el mayor sonriera ampliamente.
-Muy bien, entonces. ¿Es verdad que te gusta que te la metan? -al acabar la frase sonrió mientras que lo veía fijamente al rostro cerca de todo el, tan cerca que podía sentir su aliento y no despegaba los ojos del rubio sonriendo.
-Jajajajajajaja -una carcajada por parte del mayor sonó en toda la habitación - ¿Y qué tal si lo intentas? ¿Eh?
El mayor empezó a tomar los glúteos del menor y a tocarlos suavemente sobre el pantalón. Sonrió levemente de lado. Sintió su mano tocarlo levemente.
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VERDAD O RETO (a Thorki Fanfic)
FanfictionEl calor en Midgard estaba mermando sus neuronas. No podían pensar con claridad. No querían hacerlo. El suave cuerpo de ambos sudado... un calor insoportable en Midgard... y un juego que los haría sentirse extasiados. Un tonto juego los llevó a hace...