Suicide Room

¿Y por qué no?

-Ohhhh...la vie...ohhh

Como todos los sábados iba con mis padres a la ópera, siempre pensé que el hombre que cantaba era infeliz.

Mi padre es consejero del ministro, siempre está de viaje no pasa mucho tiempo en casa, al igual que mi madre pero ella tiene un gran negocio de diseño y costura de ropa.

Por eso tengo mi chofer privado, a mis padres no les gusta que vaya en transporte público.

En el instituto, se celebra el baile de graduación y Karoline, una chica bastante linda me pidió que fuera con ella. La verdad no me gusta mucho las fiestas, pero por lo menos tengo con quien ir.

Mi madre ha hecho mi traje, pero tenía que ir a por el en su trabajo. Con la suerte que tengo ella está en su reunión y me tengo que esperar.

Enciendo el ordenador y había un vídeo de un hombre cortándose en los brazos, había un comentario en el que ponía ¨Mundo cerrado, heridas abiertas¨ y en ese momento repuse con ¨Mundo abierto, heridas cerradas¨ y terminé de ver el vídeo. Estaba muy cansado y me quedé durmiendo en la recepción, hasta que vino la secretaría de mi madre y me entregó el traje.

-Faltan 100 días para los finales...les deseo mucha suerte.

Decía el director del instituto.

Mis padres como siempre llegaban tarde, pero ahí estaban justo cuando estábamos haciendo el baile. Les presenté a Karoline y al director.

-Es tú día Dominik, te ves muy bien. Dijo mi madre.

¡Venga besaros, venga! Estaban coreando mis amigos a Karoline y su amiga.

-Si nosotras lo hacemos, Dominik y Alex también.

-Está bien. Dijo Alex

Empezaron a besarse y...era mi turno. Me levanté, bebí un trago de cerveza y me besé con él, no era un beso de amigos, era mucho más que eso.

Al día siguiente en clase Alex no paraba de mirarme y me guiñó un ojo.

Todos los compañeros en Facebook empezaron a comentar lo que pasó esa noche y a preguntarse si nos gustábamos.

Y llegó el día, en clase de karate me tocó luchar contra él. Nos sonreímos y empezamos la pelea, me derribó varias veces. Estaba encima de mí y no pude evitar besarle.

Desde ese momento cambió todo totalmente...