ME ENAMORE DE UN PATÁN ||Terminada||

Capítulo 31

CAPITULO 31

NARRA __(Tn)

-Que alguien me pellizque  que ya estoy alucinando.

Sentí un pellizco en el brazo.

-¡Auch!, ¿Por qué me pellizcas?.

-Tú dijiste que...

-Sé lo que dije, sólo era un decir. Pero, ¿Co... Cómo es que estas aquí?, ¿A qué hora llegaste?, ¿Cómo me encontraste?.

-¿Qué te respondo primero?- me miró burlón.

-Lo que quieras, igual tenemos mucho de que hablar.

-Sobre eso, ¿Te parece si lo hablamos después?, No creo que un avión lleno de gente sea el lugar adecuado para ello. Y sobre tus otras dudas, Minha y Sebastian me dieron tu paradero. Al principio pensé en buscarte en el aeropuerto pero pensé en la posibilidad de que no querrías escucharme, así que decidí comprar un boleto para tu mismo vuelo y le cambie el lugar al señor gordo de allá en frente, en fin, si quieres huir aquí no puedes hacerlo, no creo que vayas a saltar del avión, ya no te me puedes escapar.

-Eso suena a telenovela mexicana.

-Nunca he visto una.

-No lo hagas, enserio.

-Amor, ¿Por qué te comportas como sin nada?, Siendo sinceros esperaba gritos, llanto, cachetadas, pero no esto, no una __(Tn) tranquila.

-Porque me di cuenta de que estaba equivocada, después de que me fui, estaba decidida a sacarte de mi vida, pero Sebastian y Minha me hicieron dudar y cuando estaba dispuesta a escucharté, ya no volviste a llamar. Estoy dispuesta a escucharte, pero eso no significa que te vaya a perdonar y tampoco significa que te creeré todo ni  que te dejare entrar de nuevo en mi vida así como así. Traicionaste mi confianza Kai.
Te perdonaría por mi, no por ti, que quede claro. Me afecta más a mi que a ti el sólo hecho de intentar odiarte o de guardarte rencor, porque para mi desgracia o conveniencia, te amo demasiado, estúpido patán.

-Princesa, yo...

-Sólo no digas nada- lo interrumpí- Después de escuchar lo que me tengas que decir, tendré que tomar una decisión y no quiero tener que hacerlo en este momento, déjame disfrutar de tu compañía sólo un poco más.

-Eso suena a despedida ¿Sabes?.

-No lo sé Kai, no lo sé.

El resto del vuelo tonteamos, Kai me hacia sentir muy bien, amaba estar a su lado, ¿De qué me sirve negarlo?, Lo amo con toda mi alma y mi corazón, pero me da miedo que este sea un adiós.

Kai tomo mi mano y entrelazó nuestros dedos y colocó nuestras manos sobre su regazo y yo recargué mi cabeza en su hombro.

Aterrizamos en México, tomamos nuestras maletas Kai entrelazo nuevamente su mano con la mía mientras caminábamos hacia afuera donde otra vez había un auto esperándonos y subimos a él.

-Kai, no vayamos a mi casa por favor, no quiero tener que dar explicaciones de mi visita repentina en días laborales, primero debemos hablar.

- De acuerdo, pero ¿Te quieres quedar aquí o vamos a Morelia?.

-¿Podemos pasar la noche aquí?, Me siento un poco cansada.

-Claro amor.- Kai arrancó el motor y nos dirigimos a un hotel demasiado lujosos, me sentía fuera de lugar con tantos lujos a mi alrededor. Kai solo me observaba. La recepcionista le entrego  una llave y Kai vino hacia mi, me tomo de la mano y subimos al elevador. Llegamos al piso 210, al pent-house. ¡QUE TRAUMA!.