Or what?©[fanfic Justin Bieber]

Capítulo 11

Mis ojos se abrieron con asombro y un leve miedo recorrió por mi cuerpo. No tenía como era el drogado y no quería descubrirlo.

-Eli-Marcus rompió el silencio.-Sólo te pido que no te acerques a él.

-Ok. -Hablé helada pero antes de irme un gritó me interrumpió.

-¡Elizabeth! -Era Cold que acababa de salir de la carpa. Mis músculos de tensaron. Seguí caminando sin escucharlo, Marcus estaba a mi lado.

-No lo escuches, sólo sigue. -susurró Marcus a mi lado mirando hacia el camino mientras me jalaba de la mano.

Di unos pasos cuando un fuerte golpe dejo a Marcus en el suelo. El miedo se apoderó de mi. Cold comenzó a darle golpes, uno tras otro.

-¡PARA! ¡AYUDA!-gritaba tratando de separarlos. Pero sólo conseguí que Cold me lanzara lejos con uno de sus brazos. Caí al suelo y mi paño en el cuello salió volando.

-¡¡NO VUELVAS A ACERCARTE A ELLA!! -gritó Cold lanzándole otro golpe. Marcus ya se encontraba en el suelo cuando chicos de el campamento comenzaron a separarlos. Marcus sangraba. Cuando Cold se separó de Marcus, sus ojos dilatados y mirada vacía se clavo en mi, no era él. Su pecho subía y bajaba, se comenzó a acercar ami a pasos lentos, una sonrisa enfermiza se cruzó por su boca cuando se dio cuenta que me paré con dificultad comenzando a retroceder el paso.

-No escaparás fácilmente...-Habló negando con su cabeza. Mi espalda chocó en el tronco de un árbol lo que hizo que este se aproximara de inmediato ami. Se puso frente ami. -Así que...esto es lo que estabas haciendo ¿Eh? -Tocó mi cuello. Recordé la marca que me había dejado Thomas.

-N-no es lo que crees -hablé temerosa.

-¿No es lo que creo? -dijo irónicamente y luego rió. Tomó mis manos y apretó el agarre.

-Déjame...Por favor -Mis ojos comenzaban a cristalizarse.

Nadie nos notaba. Todos estaban demasiados pendientes de el herido Marcus.

-¡SUÉLTAME!- grité en su rostro.

-¡No me grites, perra! -Sus grandes manos tomaron mis brazos lanzándome al suelo con violencia. Tomó mi cabello jalándolo hacia arriba para mirarlo.

-¡Pídeme perdón! -Gritó en mi rostro.

-P-perdón. -Hablé asustada.

-¡MAS FUERTE!

Más lagrimas comenzaron a brotar de mis ojos. -Perdón. -Hablé mas fuerte esta vez.

-Bueno. -Sonrió satisfecho y me jaló de la mano para que me levantara. Yo sólo seguía en silencio, estaba en shock. Comenzó a llevarme a la carpa.

-C-Cold, por favor, déjame ir. -supliqué.

-Entra -habló tomándome del brazo apuntándome a la carpa.

-N-No quie

-¡QUE ENTRES, JODER! -Entré a la carpa aterrada deseando que alguien hubiese visto todo esto. Que alguien viniera a salvarme. Cuando estaba adentro, algo se activó dentro de mi. Debía parar esto. Antes de que él entrara, intenté salir rápido pero Cold fue mas fuerte que yo y no pude zafarme de su agarre. Hasta drogado tenía buenos reflejos. Me lanzó contra el colchón inflable y rápidamente cerró la carpa. Se lanzó sobre mi tomando mis manos poniéndolas a mis costados impidiendo que me mueva.

-N-no...¡Por favor! -Supliqué mientras el besaba salvajemente mi cuello húmedo con mis lágrimas interminables.

-Te deseaba tanto... -Habló ignorando mis suplicas.

-Cold...por favor, tu no quieres hacer esto, no lo quieres...-Traté de convencerlo.

Una sonrisa enferma se cruzó por su rostro. -Lo siento cariño.

Empezó a sacar mi chaqueta y comenzó a besar mi clavícula con deseo. Se quitó la camisa rápidamente, aún estaba arriba mio dejándome inmóvil.

-Estás tan buena...-Susurró contra mi piel.

Trataba de sacármelo de encima, pero su fuerza era mas que la mía. Era imposible.

-¡No! -Grité comenzando a mover mis piernas. -¡Para! ¡Ayúda! -Grité desesperada.
Su mano fue directamente a mi boca.

-¡Para de gritar perra! -Habló y con su otra mano comenzó a bajar mis pantalones.

Paré de pelear, era inútil. Sus ojos recorrieron por todo mi cuerpo hasta llegar a mis ojos. Ahí paro y levantó su rostro quedando frente al mio. Su mirada era desorientada. Sus pupilas aún dilatadas estaban fijas en mi, pero ahora parecía estar analizando cada parte de mi rostro. Su mano salió de mi boca. Sus agarres se soltaron.

Negué con la cabeza.

-No puedes hacerme esto. -Una lágrima calló por mi mejilla.

Sus labios se acercaron a los mios uniéndonos en un violento beso. Lo peor fue que sentí mariposas en mi estómago, cuando sabía que el no sentía nada. Lo disfruté, por mas grotesco que suene, lo disfruté. Sabía que el me estaba besando pero no lo estaba sintiendo. El beso cesó y su cuerpo cayó a mi lado rodeándome con sus brazos. Su respiración comenzó a ser mas calmada a medida que el tiempo pasaba. Las lágrimas no tardaron en llegar. Me sentía inútil. No me esperaba esto de él y fue el peor error que pude cometer. Pensar que por un momento lo quise y pensé que quizás los tipos como él tienen corazón.