Dicen que siempre hay que dejar las cuentas pagadas antes de marchar, así que;
Hagamos como si no existieran las horas, ni las calles, ni la gente,
ni la ropa.
Hagamos como que podemos alejarnos, evadirnos.Ahora guarda el aire hasta que estemos lejos.
Hagámoslo.
Y si no lo hacemos, por lo menos, conservemos las ganas.