RUN AWAY.

Capítulo 5.

-¿A qué no sabes de lo que me he enterado?-dice Abby emocionada, y niego con la cabeza. Pero, no responde.-¿No me vas a preguntar?
-Oh, venga dímelo.-digo con la boca llena.
-No te lo quería contar, pero creo que tienes que saberlo para que no te pille por sorpresa.-la miro confundida, se acerca a mi oído y me susurra.-Noah va a pedirte una cita.
Abro los ojos, y las dos miramos hacia Noah, que nos ve, frunce el ceño. Y tanto que me ha pillado por sorpresa, sabía que le caía bien y eso, pero no pensaba que le gustase. Nunca me habían pedido una cita, y tampoco sabía cómo actuar.
Noah, se levanta y se acerca a nosotras.
-¿Puedo hablar un segundo contigo Kat?-se rasca la nuca nervioso.
-Claro.-habla Abby por mí.
-A solas.-asiento levantándome de mi sitio para acercarme a él.
-Suerte, campeona.-dice Abby dándome una palmada en el culo.
Recorremos la cafetería, y ninguno de los dos dice ni una sola palabra. Cuando salimos de la cafetería se me cae la mochila y me giro para cogerla, pero alguien se adelanta. Devon. Coge la mochila, y extiende el brazo para que la coja. La agarro, y por primera vez nuestras pieles se rozan y siento un escalofrío. Su mano está congelada, y cuando siente mi tacto sobre ella la aparta. Voy a agradecerle lo de la mochila, pero ya se ha dado media vuelta para irse.
-Mmm, raro.-dice Noah colocándose a mi lado y yo asiento.-Bueno, quería preguntarte algo,-vuelvo a asentir, va a pensar que soy tonta.- ¿querrías salir conmigo este viernes? Es que, fuiste a la primera persona que conocí aquí y me pareces genial, linda, divertida...
Le abrazo por los hombros, interrumpiéndole y el me rodea por la cintura.
-Me encantaría salir contigo, Noah.

-Dime, por favor que le has dicho que si.-me mira Abby esperando una respuesta y yo asiento.
Suelta un pequeño grito, y Matt y ella me abrazan. De verdad que no les entiendo.
-Nuestra pequeña, Katty va a tener su primera cita.-grita emocionado Matt, haciendo que varios a nuestro alrededor se giren a vernos.
-Oh, soltadme ya. El entrenamiento va a empezar, y como llegue tarde me harán nadar más y sabéis lo vaga que soy.-digo deshaciéndome de sus brazos.
Entro al vestuario, me cambio lo antes posible y aún así voy tarde. Salgo al recinto de la piscina y veo que los demás ya están nadando.
-Cinco minutos tarde, señorita Evans.-dice el entrenador Garret.
-Lo siento, es que...-voy a comenzar a contarle una excusa pero me interrumpe.
-Me da igual. Los nuevos están en las dos primeras calles. Los demás en sus calles habituales, y le hemos reservado, como siempre la calle del final. Ahora a nadar.-dice señalándome el ultimo carril. Me pongo las gafas y el gorro y me tiro al agua.
Es raro que me guarden un carril, solo para mi, sí. Pero, soy la capitana del equipo y la única que suele llegar a las finales de los campeonatos. Suelo estar en la piscina dos horas al día, menos en verano. Después de terminar mi entrenamiento, ayudo a los novatos a corregir errores y con su preparación.
Llevo nadando desde que tengo uso de la memoria, y es la única manera que tengo de pensar, de evadirme de mis problemas, por eso me gusta tanto.

El silbato del entrenador suena por toda la piscina, dando por acabado el entrenamiento de hoy. Salgo de la piscina, me quito el gorro las gafas y me dirijo a los vestuarios. Pero el silbato vuelve a sonar, haciendo que todos nos giremos hacia el entrenador.
-Chicos, el sábado hay un pequeño trofeo en el pueblo y vendrán los equipos de otros institutos. Solo pueden presentar 8 personas cada equipo. Así que durante esta semana, haremos varias competiciones para elegir a los que participarán.
Cuando termina, todos volvemos a encaminarnos hacia los vestuarios. Yo, voy hablando con Tiffany, una de las amigas de Barbara. Es la única que me cae bien, es bastante amable y llevamos nadando juntas desde que llegue a Crawford.

Justo cuando salgo del vestuario alguien me agarra del brazo y me giro a ver quien es.
-Hola, soy Caleb.-dice el chico que tengo enfrente. Tiene el pelo moreno, los ojos marrones y su piel es bastante morena. Tiene un cuerpo trabajado y es muy atractivo.
-Yo soy Kat.-digo extendiendo mi mano.
-La capitana del equipo.-asiento y me estrecha la mano.-Soy nuevo aquí, como ya sabrás y seria genial que pudiera participar en el trofeo del sábado. He oído que ayudas a los novatos y si pudieras ayudarme ayudarme con algunas cosas, te lo agradecería un montón.
-Claro, ningún problema.-digo y andamos hacia el aparcamiento.- ¿Empezamos mañana?
-Oh, si, muchas gracias, no te arrepentirás.-me mira ilusionado y y el claxon de un coche negro suena. El lo mira y sigue diciendo.-Ahora me tengo que ir, mañana hablamos.- dice y se dirige hacia el coche negro.-¡No podías esperar un segundo, Devon!
Oh, así que acababa de conocer a Caleb, el único amigo de Devon.
Esto va a ser interesante.