Capitulo 1: Nueva "Vida"

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Amber
Bueno, les diré la verdad. Yo no quería mudarme y menos cambiarme de instituto después de lo que paso en mi ex secundaria , no quiero dar detalles pero destruí toda la escuela en la clase de química. Miren, no tengo ningún problema con las ranas, el problema es abrirlas por la mitad y sacarles el corazón ¿Acaso los profesores de Química tienen algún problema con ellas?

Sin embargo hay estaba yo ( con un desgano total ) en el auto de mi tía Elizabeth rezando porque el instituto Greenwood haya tenido que ser cerrado por casualidad. No quería volver a complicarle la vida al nuevo instituto, pero mi tía Elizabeth no me dejo otra opción. Le rogué por más de 3 meses, hasta le ofrecí trabajos para no ir al instituto pero se negó rotundamente. Además ella estudiaba en aquel instituto así que no había forma la de salir del aprieto en el que me acababa de meter.

Gire a ver por la ventana del carro con un desgano infinito.

Greenwood era realmente grande. Adolescentes con guardaespaldas caminaban por los pabellones y chicas muy guapas, nada comparadas a mi, desfilaban por el estacionamiento. Mientras lo contemplaba me pregunte si habría gente buena hay, en mi ex instituto digamos que la gente no era amigable en lo absoluto.

Me daba la sensación de que Elizabeth no estaba del todo segura de haberme llevado. Cogía tensa el volante y susurraba palabras apenas inaudibles.

-Tú, tranquila Amber- me recomendó Elizabeth, pero no parecía muy convencida- Todo va a ir bien, harás nuevos amigos y aprenderás cosas nuevas... además este colegio esta mas cerca de casa y podrás venir sola- concluyó tomando una bocanada de aire, mas parecía que se intentaba relajarse a ella misma.

-Claro- balbucee con nerviosismo- Tan solo espero que no haya química- bromee.

Elizabeth me miro amenazadora mente, ella no se lo tomaba a broma pero yo sabia que m iría mal de todos modos... nunca tengo suerte.

Recorrimos todo el trayecto ( del estacionamiento ) en silencio. Intentaba lucir tranquila pero al adentrarme mas al estacionamiento la tranquilidad se esfumo y al parecer la de Elizabeth también.
Todos iban vestidos con elegante y sacos de diseñador con hermosos collares caros. Me aterre, yo en cambio llevaba unos vaqueros sueltos y un polo de dibujos animados: Hora de Aventura.
Me gire a ver a Elizabeth pidiendo ayuda con la mirada.

-Ves, parecen buenos chicos- me dijo no muy convencida- Recuerda no acercarte al salón de química al de computo... por favor Amber. Tomate esto enserio.
-Lo intentare- no prometí nada, sabia que ni lo lograría.
-No te podré recoger en la tarde así que tendrás que volver sola. Tu almuerzo esta en la mochila, tus cuadernos también... ¿Trajiste tu pase?
-Si, tranquila todo ira bien- dije
-Eso espero, cuídate. Hazlo por tus padres, no los decepciones- me dijo coloco do un mechón de mi pelo detrás de mi oreja.
Salí del auto a duras penas. "Genial, el primer día de clases ¿Que podría ir mal?" Pensé.

Levante la mano en señal de despedida hacia Elizabeth y entre a Greenwood. Los pabellones estaban llenos de estudiantes corriendo de una lado a otro buscando su clase. Pensé que eran mucho más calmados pero parecían escaparse de algo o mejor dicho de alguien. En ese momento no quería enredarme con mis supersticiones así que he seguí mi rumbo intentando lucir invisible. Lo que siempre hacia.

Me puse a pensar en Elizabeth, sabia que esta era la ultima oportunidad que ella tenía para meterme en un colegio como estos antes de que yo no empiece a estudiar en casa y me sentía culpable porque sabia que tarde o temprano me sacarían por mi mal comportamiento.
Desde la desaparición de mis padres Elizabeth me estuvo cuidando como si yo fuera su hija con su novio Fred, ese tipo me caía supero bien.
Vivíamos cerca a un prado lleno de árboles . No me gustaba el hecho de vivir ahí pero el presupuesto que teníamos era muy pequeño para darnos el capricho de buscarnos algo mejor para vivir. Elizabeth se dedicaba al modelaje y Fred a la carpintería. Desde muy pequeña Fred me enseñaba a fabricar juguetes y armas con madera.

Seguí caminando por los pasillos topándome con profesores en terno que me miraban con desprecio, hasta llegar al salón 5B.
-¡Bingo!- murmure

Entre al salón y estaba totalmente vacío. Era grande y daba la sensación de hospital abandonado por lo blanco que era, los pupitres se encontraban perfectamente alineados con una carta respectiva en cada uno de ellos: Bienvenidos a Greenwood.
Pase por cada uno de los asientos para encontrar mi nombre en la carta, el pupitre se encontraba en la última fila del salón, no tendría problemas para lucir invisible. Me senté ridículamente y abrí la carta.

"Bienvenido al colegio Greenwood, unos de los mejores colegios del país.
Esperamos que el colegio sea de tu agrado que pases el mejor años escolar en el centro educativo.
Si hay alguna duda sobre la organización del dentro educativo, por favor acercarse a secretaria a partir de las 12:30 para que podamos asesorarlos.
Atte: Director

La carta era bastante formal para mi agrado. Pensé que sería más informal el tema de entrar al instituto.
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Imagínense un grupo de militares entrar a un salón de clases con la mirada en alto y la espalda recta ¿no?... pues así se veían los estudiantes de Greenwood. Caminaban derechos con la cabeza alta como si fueran los mejores y ni hablar de su ropa... unos auténticos militares. Los primeros alumnos que pasaron fueron unas chicas bastante monas, a excepción de los otros estudiantes ellas llevaban el uniforme de porristas, sus ojos eran grises y miraban con odio a los demás simulando que ellas eran las jefas del lugar , y al parecer si lo eran por el comportamiento de los demás cuando ellas los miraban: bajar la cabeza y revise cuantas rayas tienen la yema de sus dedos ( si es que me entienden ). Luego entraron unos 3 chicos bastante altos y guapos, eran los típicos tipos musculoso con dientes que te pueden dejar ciego, no les tome mucha importancia.

Baje la mirada para que no me vean.

Me pase toda la clase jugando con mi lapicero. Digamos que los primeros días de clase no me agradaban. Pensaba que todo saldría bien y que el colegio era diferente pero me equivoque, era el mismo estilo de colegio que los demás; aburridos y estrictos. Lo único que me llamo la atención fue un muchacho...¡Y no me enamore!
Su forma de actuar era diferente y mas normal. Miraba inquieto a todas partes como si buscara a alguien y de vez en cuando olisqueaba el aire, se paso la mayor parte de la clase mirando a la ventana y mirándome a mi. Pensé que me veía por lo ridícula que debía lucir pero no, su miraba irradiaba confusión y por momentos desagrado, me analizaba y luego con aire escéptico meneaba la cabeza susurrando la palabra: Imposible.

La ultima hora de clase había acabado y yo había sobrevivido.

Me encaminaba al comedor, era hora del almuerzo y no podía esperar a comer lo que me mando Elizabeth: Tallarines. Cuando lo abrí no pude imaginarme con lo que encontraría; unos tallarines totalmente mal olientes de un color verde. Di horcajadas aguantando el vomito.
-Pero mira que tenemos aquí. Amber, la niña nueva- me dijo una de las porristas que vi en el salón antes.
- Yo...- Balbucee nerviosa. me atemorizaban de una manera inquietante.
-No te asustes ,no te vamos a hacer nada-me dijo- Me llamo Katy.
-Y yo Estefania- dijo la chica que estaba a su lado ( al igual que compañera porrista )
-A-Amber- le dije a Katy bajando la mirada, al parecer Katy era el líder de su "manadita".
-Ya lo sabemos tontuela... veníamos a decirte que en esta escuela no se comen cosas tan asquerosas como eso- me dijo Estefania refiriéndose a mi "almuerzo" o lo que quedaba de el.
-Son tallarines y no es asqueroso, bueno, al menos cuando no está podrido- alce la voz.
-Ay querida ¿Que acaso no sabes quienes somos?- me dijo Katy con una sonrisa cínica.
-Pues, yo... no- admití.
-Aquí no se nos alza la voz niñita, si te atreves a hacerlo ¡Te las veras conmigo!- me dijo Katy retadora.
-Pues al parecer ya hay quien te alce la voz Katy - dije parándome de la silla en al que me encontraba y empujándola hacia atrás.
-No te bajes a su nivel- le dijo Estefania q su amiga.
-Tienes razón Estefania. No me bajare así nivel de una granjera como esta...- me dijo con asco.
-¡No te atrevas a llamarme así!- le dije a Katy con mirada fría.

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Holaaaaaa!!!....hay casi me atoro XD
Espero que les guste la novela y perdonen mis errores ortográficos. (Soy muy vaga como para corregirlos).
Voten si les gusto.

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⏰ Última actualización: Oct 14, 2015 ⏰

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