Demons | Wigetta | Fanfic

Capítulo 1.

"Cuando nos preguntamos qué son los demonios, lo primero que
pensamos es que son ángeles caídos; sin embargo, otros han
respondido de forma diferente: espíritus desencarnados de
gente malvada; símbolos de nuestro lado oscuro; entidades
siniestras creadas por nuestras mentes; personificaciones de
fuerzas misteriosas; etcétera..."

-Los ángeles..
-Los ángeles no existen, Alex -comenté furioso. Ya estaba cansado de haber escuchado todo el año escolar charlas dementes sobre demonios y ángeles.
No era creyente de ello. Pero Alex, él sobrepasaba los límites.

-Bueno, calmate Guille, solo era un tema de conversación.
-Ha sido tema de conversación durante todo el año -lo fulminé con la mirada, a la siguiente palabra que dijera le rompería los dientes.
-Ya, ya, hay que disfrutar que es el último día de clases -dijo Frank cambiando repentinamente de tema al notar lo duro de la situación -¿ya tienen pensado a dónde iremos en las vacaciones?, ¿playa?, ¿fuera de la ciudad?, ¿con chicas guapas?.
-¿Pero qué chicas guapas?, ¿qué dices? -dije sonando un completo aguafiestas - yo me quedaré en casa.
-¿En casa?, pero Guille, son vacaciones, anda hombre, por lo menos ve a mi casa, será mejor a que lo pases solo.

Pensé en su propuesta unos segundos. Conociendo a Frank seguramente invitaría a varias chicas y haría una fiesta en grande, cosa que no me apetecía en lo absoluto.

Antes de poder decir cualquier cosa, sonó el timbre de la última hora.
Lo que significaba que eran vacaciones.

-¡Ya era hora! -gritó Frank saltando de la mesa en donde se encontraba. Tomó su mochila y corrió a la puerta. - Los espero en la entrada - dijo antes de salir.

Alex tomó su mochila y me miró.
-¿No vienes?.
- Solo si prometes no hablar de tus temas extraños -rió tras lo mencionado y asintió.

Tomé mi mochila y fuimos tras Frank.
Por fin eran vacaciones. En mi mente las palabras vacaciones se basaban en dormir, cosa que me desanimaba. Normalmente un chico de 19 años pensaría en fiesta y alcohol, pero no podía permitirme esas cosas.

Vivir solo no es nada fácil, tienes libertad, pero es aburrido. Llega un punto en el que te das cuenta de que necesitas de alguien a tu lado.
Tengo a mis mejores amigos, Frank y Alex. Pero no son personas que vea todos los días.

-¡Guille!, ¡vamos, sube! -gritó Alex al notarme perdido.
Me dirigí hacia él y miré el coche en donde se encontraba.
-¿Y ese coche? -pregunté.
-Es mío - respondió Frank saliendo de la parte del conductor - está chulo, ¿a qué si?.
-Muy chulo, ¿y si damos una vuelta?.
- Me encanta la idea -mencionó Frank señalandome de forma divertida.
Los 3 subimos al coche. Yo era el copiloto y Alex por ser el pequeño iría en la parte de atrás.

-Y bien, ¿a dónde quieren ir?.
-Yo quiero alcohol, un año ya sin alcohol me ha dañado -propuso Alex.
Frank me miró y preguntó:
-¿Qué te parece Guille?.

Tenía que dar la respuesta definitiva. Pensándolo bien, yo no era de tener un gran amor hacia el alcohol. Pero ¿qué diablos?, son vacaciones, tengo 19 años y me permitiré una vez divertirme.
No hace mal a nadie.

Asentí y Frank pegó un gritó de emoción.
-¡Así se habla! -gritó divertido y pisó el acelerador.

**
Llegamos a un bar llamado "Las Vegas".
Bajamos del auto y entramos aquel lugar.

-¡Mesero, traiga 3 margaritas, por favor! - gritó Frank entrando al lugar a lo que el mesero asintió.
Nos dirigimos a la barra donde nos entregaron nuestras bebidas.