Todo comenzó al final

Lenvantadome con más fuerza

Como todo empezó al final, así me llegó el aliento, el ánimo, la vida al cuerpo, me llené de emoción y me dije a mi mismo ya no más, no me lamentaré por mi suceso, por el desprecio de los demás, por lo de la high, entenderé de que en cada capítulo de mi vida hay una oportunidad para ver la vida de una forma diferente, de que me puedo llenar de ánimo de que puedo ser el motor que impulse a otros hacia su destino, llevaré la cruz que se ha puesto en mi hombro, me están entrenando, están sacando lo mejor de mi, ya no más lagrimas aunque no es malo llorar, no mas NO PUEDO, pues todo lo puedo en Cristo que me fortalece.

El haber conocido a Liz Rose, mi panorama dió un giro, cuando pensé que no podia más, ella fue el instrumento, fue la razon, por eso pude entender que no fueron mis padres que eligieron mi carrera y ni siquiera la universidad a la cual asistí.

Mi vida se fue alineando, fue cambiando de dirección, fue cambiando de color, fue entonces cuando entendí que todo obra para bien, como pude ver la mano de Dios en un mundo tan torcido como lo es el que hoy en día enfrento.

Creer que todo está perdido, fue lo que me enseñaron, nunca pense encontrar una oportunidad en este laberinto, hasta que todo cambió de color, hasta que me llené de fe, vi a Dios obrando a mi favor.

Diciéndome atraves de quienes me ayudan, yo soy tu ayudador, quién te esfuerza y te hace ver de una forma distinta de que estoy en control, y así me dijo, te estoy formando con cada situación en tu vida, los procesos, las lagrimas lo desventurado que has sido hasta el momento, ha acontecido para formar mi caracter en ti, pues quiero que seas las huellas de los que no tienen dirección,  de quienes no tienen camino, de quienes andan en oscuridad, quiero que los traigas a mi luz.

Todas esas palabras me ayudaron a recobrar ánimo,  me levantaron como un hombre lleno de valor, sin temor a nada, a las palabras hirientes, denigrantes, a las falsas acusaciones, a los desvalido de la vida, cada herida forjando un hombre nuevo, no negare que hubieron heridas sangrantes y con tanto tiempos para sanar, pero eso también fue parte del crecimiento.

No lo entendía, me preguntaba tanto, que pasa, que hice, porque me agolpean con sus desprecio,  porque me echan a la basura como sino sirviera, estaban las preguntas día a día,  buscando respuesta como el que pierde la única moneda que posee, así estaba, lloré si lloré,  esperando un paño o un pana que se acercará para acompañar me en mi dolor, no sabía que pasaba, que me envuelve.

Quedo las lagrimas, quedo el dolor hasta un día,  no fue siempre, aunque así lo pensé, hahahahha, si lo pensé,  pensé que era para siempre, de que no iba a tener un  respiro, de que había nacido para vivir continuamente en el dolor.

Y ese día, cuando no  pensaba me dijo un viejo amigo llamado Frank, Dios escogió lo vil, lo menospreciado, lo que no es, para deshacer lo que es, siiiiiii, grité de emoción,  me motive tanto que wow no sabía que cuando deseaba ser visto, reconocido y aceptado por los demás,  ya Dios me había señalado como su hijo.