Filofobia- Miedo a enamorarse

Capítulo 45

Navidad Navidad dulce Nadivad alegría en este día hay que celebrar. Por fin llegó el día de Navidad, lo estaba deseando. Veré a mi familia ya que no lo hice desde que me pelee con Eldon pero hoy nadie me arruina este día.

Salgo de la cama, me pongo las zapatillas de estar por casa y salgo al pasillo. Un olor a galleta llega a mis fosas nasales. Abro un poco la boca y se me cae la baba. Bajo las escaleras con la misma cara de cuando me vino el olor y voy a la cocina.

-Quiero comerme todas esas galletas- digo y Dulce se gira.

-Todas no pero unas cuantas sí que también deben comer los demás.

Me preparo una taza de leche y me siento delante de la bandeja de las galletas. Tienen formas de navidad como por ejemplo estrella, árbol, galleta de jengibre... Cojo una y la mojo en la leche. Que mejor forma de empezar el día que desayunando esto.

-¿Por qué cocinas tan bien y mi madre no?- le pregunto a Dulce y ella ríe.

-Adeline también cocina bien pero gracias de todas formas. Sofi.

-Dime- digo mordiendo una galleta.

-¿Me puedes acompañar al centro comercial para comprar los regalos?

-Claro me encantaría, además quiero comprarle algo también a mi familia.

Termino de desayunar y subo a la habitación. Me visto con unos pantalones negros, camiseta blanca, jersey de rayas blancas y rosas y los deportivos de paseo. Voy al baño, me lavo los dientes, la cara y me peino. Vuelvo a la habitación, cojo el móvil y le dejo una nota a Mike.

He ido al centro comercial con tu madre. Cuida de tu hermana y de Fia. Nos vemos luego, te quiere Sofi.

Bajo y en el salón me espera Dulce. Coge las llaves del coche y salimos de la casa. La madre de Mike pone la radio y chillo al darme cuenta que está sonando mi canción favorita, Human de Christina Perri.

Llegamos al centro comercial y Dulce aparca el coche en el parking. Primero vamos a la tienda de juguetes y le compra a Nicoletta un crucero de barbie y yo le compro una barbie por separado. Entramos en una tienda de ropa masculina, Dulce le compra a su hijo una camisa azul marino y unos pantalones vaqueros. Aprovecho y le compro a mi padre una camisa con rayas verticales finas en color azul y una corbata del mismo color de las rayas; y a mi abuelo una corbata verde. Arrastro a Dulce hasta una tienda de deporte y le compro a Eldon, aun que no se lo merezca, unas deportivas para jugar al fútbol. Y por último, vamos a una joyería. A mi madre le compro un juego de pendientes y collar de oro fino, a mi abuela una pulsera con la figurita de una niña colgada que tiene mi nombre grabado y a Mike un reloj de su marca favorita.

-Yo ya he terminado de comprar, podemos irnos si quieres- le aviso a Dulce.

-¿No se te olvida ninguno?

-Oh sí, toma lleva esto al coche y ahora voy- le digo dándole todas las bolsas.

Corro por todo el centro comercial hasta llegar de nuevo a la joyería. Voy directa hacia una pulsera que había visto anteriormente y la compro, este será el regalo de Dulce. Voy al parking y busco el coche. Camino hacia él y me monto.

-Ahora si podemos irnos- le digo con una sonrisa.

Llegamos y ambas dejamos las bolsas en el coche. Entramos en casa y esta todo en completo silencio. Fia viene corriendo con sus pequeñas patitas hasta mí y la cojo.

-¿Dónde están mis hijos?- pregunta Dulce. Miro a la cocina y hay una nota en la nevera.

Mamá, Sofi he salido con Nicoletta. Regresaremos pronto. Hasta luego, Mike.

-Según esta nota de Mike, han salido. Habrán ido a comprar regalos igual que nosotras- digo y reímos.

-¿Qué te apetece comer hoy?- me pregunta la madre de mi novio. Pongo postura pensativa mientras me decido por lo que comer.

-Patatas asadas, hace mucho que no las como.

-Está bien, ¿me ayudas?

-Claro.

Mientras preparamos la comida, la televisión suena de fondo. En las noticias solo dicen que hay mucha nieve y que la gente está comprando todo a última hora. Con permiso de Dulce, cambio de canal a uno de música. Mientras cocino, me muevo al ritmo de la canción.

-Ya estamos aquí- dice Nicoletta entrando por la puerta de la cocina- ¿Qué hacéis?

-Patatas asadas cariño. Ve a cambiarte de ropa corriendo y vienes que ya se están terminando de hacer. Y tú también Mike, ve y cámbiate de ropa- dice Dulce.

Entre Dulce y yo ponemos la mesa y servimos a cada uno su comida. Por las escaleras se escuchan las risas de Mike y de Nicoletta. Mis labios se curvan hacia arriba formando una sonrisa.

-¿Estará bueno lo que han preparado mis chicas favoritas?- dice Mike sentándose en la mesa.

-¿Y yo?- pregunta Nicoletta cruzada de brazos fingiendo enfado.

-Tú eres la primera pequeña- le dice y le da un beso en la frente.

Son más bonitos juntos. Me encanta ver a Nicoletta así de contenta.

Comemos y cuando terminamos recogemos la mesa. Cojo las llaves del coche y voy a por los regalos que he comprado. Vuelvo a entrar en la casa y dejo las llaves en su sitio.

-Como esta noche no estaré os daré los regalos ahora- digo sacando primero el de Nicoletta y se lo entrego.

-Me encanta- dice y me abraza.

-Dulce, seguro que dirás que no hacía falta que te comprara nada y todo ese rollo que decís las madres pero toma- digo entregándole una caja.

-Sofi, es preciosa. Muchas gracias.

-De nada- le sonrío- Y por último, toma tonto.

-No puede ser verdad, esto es una broma.

-¿Qué pasa? ¿No te gusta?- pregunto preocupada por su reacción.

-Me encanta, estaba deseando tener este reloj desde que lo vi anunciado.

-Pues ahora es todo tuyo- digo y me besa.

-Qué asco- exclama Nicoletta.

-Ya te tocará a ti enana- le dice Mike.

-Voy a descansar un poco, necesito estar despejada para lo que me toca esta noche.

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