[K Project] Con Espada en Mano [SaruMi]

[Parte 2] Capítulo 22: Sorpresas Por Todos Lados.

¡Hallo! Actualicé rápido, pidan un deseo. Quizás este capítulo no sea muy SaruMi que digamos, pero bueno, valdrá la pena. Sin decir mucho más ahora, ¡Disfruten!

----------------------------------------------------------------------

Llegaron a aquel bar Yata, Awashima y Neko. Esta última hasta se escondía detrás de Yata, por primera vez se sentía como... ¿Avergonzada? Ella no era así, y tampoco tenía por qué estarlo. Llevaba un vestidito blanco con mangas largas, pero corto hasta un poco arriba de las rodillas, y llevaba también unos lindos zapatos negros. Hacía frío, pero la strain parecía no sentirlo aunque estuviese así vestida. Simplemente, estaba preciosa. Mucho más arreglada que Yata, incluso que la teniente. Pero fue esta última quien la había vestido a Neko, así que sólo estaba feliz por ella.

Mientras todos saludaban a los clansmen rojos -Yata casi a los lindos golpes de bienvenida con sus ex compañeros de clan y Awashima siendo una "persona normal"- Neko seguía bastante incómoda. Ya no tenía la espalda de Yata para apoyarse y se sentía en un vacío, saludaba a los demás sólo moviendo las manos. Porque no le nacía otra cosa.

—Neko, estás rara, ¿Te sucede algo? —Preguntó Yata agobiado por su actitud, ¿Dónde estaba la Neko hiperactiva que él conocía, la que siempre estaba feliz y teniendo confianza con el mundo?

—Yata-kun... ¿No es raro esto? —Dijo moviendo un poco la falda de su vestido. Era obvio que le era raro, para ella habían sólo dos opciones: 1. Desnuda en la habitación, 2. Con el uniforme azul. Nunca había salido, y se sentía extraña con eso puesto.

Yata suspiró y se sonrojó un poco, comenzó a reír por la actitud tan inocentona de la pelirrosa.

—Estás bien Neko, no te preocupes. —Le revolvió el pelo a la strain, ésta volvió a acomodarlo.

También tenía el pelo "extraño" a su gusto. Awashima se lo había planchado, parece que la teniente tenía a Neko como si fuera su muñeca Barbie. La strain habría estado irreconocible, de no ser porque lo único que estaba igual que siempre era su rostro. No llevaba maquillaje, tampoco le hacía falta. Era hermosa, no se podía hacer nada más con ese rostro tan angelical.

Sin embargo ella seguía con su vergüenza, Yata no pudo hacerle cambiar de parecer sobre como ella se sentía. Sintió como alguien le daba una palmadita sobre su hombro, así que se dio vuelta algo confundida.

—¡Eric-kun! —Lo abrazó con, prácticamente, todas sus fuerzas. Pues era la única persona que conocía formalmente de HOMRA, así que estaba muy bien con él.

—Oh, Neko... Qué bueno que hayas venido. —Le devolvió el abrazo, le dio muchísima confianza que ella actuase así.

Yata se quedó mirando al rubio un rato, con una mirada indiferente. No lo odiaba, pero tampoco le caía muy bien, así que se mantenía bastante alejado de él... Así que también lejos de Neko. Decidió ir a la barra, allí estaban la teniente y Kusanagi. Como éste último fue el que los había invitado, pretendía quedarse bastante con él.

Se sentó junto a Awashima y comenzaron a hablar de cosas triviales. Se sumó Totsuka a la conversación, hasta después de un rato se unieron Eric y Neko a ella.

—Ey Eric, ¿No tenías algo en mente? —Preguntó Kusanagi a Eric que recién se había acercado a la barra. Los demás se giraron a ver de qué hablaba.

Eric se limitó a suspirar, sonrió y subió al piso de arriba del bar. Allí vivían algunos miembros de los rojos, y él no era la excepción. Neko se lo quedó mirando mientras subía, algo desconcertada.

—¿A dónde fue Eric-kun? —Se preocupó ella.

—Es una pequeña sorpresa. —Añadió Totsuka, con esa sonrisa de siempre tan reconfortante.