Capítulo 08

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Lo abracé con fuerza, sus manos me sostenían fuerte la cabeza mientras que nuestros labios se movían con pasión. Mi corazón latía fuerte, me sentía como niña de secundaria que besa al chico que le gusta, él me gusta y mucho, no hizo nada mas que mirarme y sonreírme de esa forma. Y ahora que lo conozco un poco, sé que es un gran chico. Solo quisiera saber lo que él siente por mi y lo que piensa de mi. Su mano derecha bajó hasta mi cintura, me abrazó y me aferró a su cuerpo; sentí su lengua buscar la mía, empezamos un jugueteo mientras que su mano derecha bajaba hacia mis piernas. Acarició, luego me tomó del muslo y la llevó a su cadera. 

Podía sentir su erección crecer, calentarse y palpitar, fue imposible no sentirlo y que no me afectara, estaba jadeando, deseando más, sentirlo dentro de mí esta vez. Lo abracé por la nuca, acariciando con mis dedos su cabello y disfrutando de aquél beso apasionado y excitante que me estaba dando. Sus manos subieron mi falda hasta la cintura, me alzó y yo lo abracé con mis piernas. Caminó hacia su escritorio y me sentó sobre el, escuché su respiración, estaba agitado y me besaba con desesperación. Sus labios bajaron hasta mi cuello, hice mi cabeza a un lado para permitirle más acceso, una de sus manos sacó mi blusa de la falda, se introdujo debajo y me desabrochó el sostén hábilmente. Me quitó ambas prendas dejándome desnuda, se mordió el labio y me sonrió pícaramente. 

Puse mis pequeñas manos en su torso, lo miré a los ojos notando que él me miraba igual, hicimos contacto visual, se acercó y me besó los labios, sus manos acariciaban suavemente mis piernas, entonces, quise tomar el control desabrochándole cada botón de su camisa, y una vez terminando, acaricié su piel, me separé de sus labios acercándome a su torso, empecé a darle besos y a jugar con su cinturón. Michael rió apartándome de él, ¿por qué siempre me aparta cuando voy por esa parte? Lo miré a los ojos preguntándole muchas cosas, él entendió, suspiró y abrió la boca para decir algo.

— Aún no es tiempo... — Susurró. Vaya experiencia sexual, decidí acostarme sobre el escritorio cerrando los ojos. ¿Se avergonzará de su tamaño? No creo, tiene tanta seguridad en sí mismo que dudo que sea esa la razón.Además, si insisto pensará que estoy urgida o algo así, pero joder... muero por conocer cómo es tener sexo con este excelente bailarín.

Mi piel se erizó cuando sentí sus suaves labios presionar mi piel, abrí los ojos notando a Michael dejando rastros en todo mi cuerpo, sus manos abrieron mis piernas y comenzó a acariciar mi clítoris.

— Estás tan mojada... — Cerré los ojos disfrutando de la fantástica sensación, empecé a arquearme, a gemir y a gritar con fuerza...

— Vamos, grita, quiero oírte preciosa — Susurró, bajó mis bragas antes de besar mis labios inferiores, su lengua estaba acariciando mi clítoris, se sentí tan bien, puse mis manos en su cabeza y presioné un poco.

— Mike... — Gemí — Joder... ¡ah! — Introdujo dos dedos dentro de mí, estaba matándome, quería explotar, no podía respirar... Sus labios se movían gloriosamente, su lengua estaba haciendo un trabajo increíble y sus dedos, oh, sus dedos... ¡sensacional!

Estaba atrapada en ese momento, estaba fantaseando, estaba hechizada, estaba alucinando, estaba loca... tanto que no me di cuenta cuando dejó de hacerlo, el sonido de su cinturón y su bragueta me hicieron abrir los ojos de golpe, dios ¿va a suceder? Lo miré, él estaba sonriendo, se puso entre mis piernas, su rostro estaba frente al mío y mirándome a los ojos me preguntó.

— ¿Estás lista? — Su voz era grave, ronca, su aliento estaba caliente, su respiración estaba agitada y lucía realmente excitado. Asentí atónita, iba a sentirlo... — Quiero oírlo...

— Si... — Dije jadeando, él sonrió y me besó duramente en los labios, sentí la punta de su pene en mi entrada, dejé de respirar, dejé de pensar, dejé de dar señales de vida. Empujó lentamente, sentí cómo me iba llenando, me estaba preguntando en qué momento dejaría de entrar, era tan largo, y cuando se detuvo, su cabeza estaba tocando mis paredes, hasta el fondo. Dejó que me adaptara a su longitud.

#1 Mi Cuerpo en tus LabiosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora