Al terminar la tarea

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--¿Necesitas ayuda?-- cuestionó el mayor de la habitación a su hermana.

--¡No! Yo sola puedo-- se quejó la niña de tres años al ver que su hermano se acercaba a ella.

--Vale, yo ya termine-- dijo Zeus orgulloso de sí mismo al ver su tarea finalizada.

--Necesito el...-- la pequeña niña olvido el nombre de ese color y lo apuntó desesperada --¡Verde!

--Es amarillo Estefanía-- corrigió su hermano y se lo entregó antes de levantarse de la pequeña mesa.

Estaban en el cuarto que compartían desde que llegaron a la casa. Sus padres les habían comprado desde hace tiempo una mesa para que hicieran sus tareas, al menos Zeus ya que la menor aún no asistía a clases.

--¿Ya?-- el niño castaño estaba impaciente, ya quería ir a jugar o a ver televisión --te ayudo si quieres.

--¡No!-- chilló la pequeña niña antes de empujar a su hermano lejos de ella. Estefanía quería acabar por sí misma.

Su hermano soltó un bufido y se tiró en su cama. La habitación era grande y de color verde con detalles morados. Su cama tenía un endredón azul con varios dibujos y su hermana uno amarillo con una princesa. Los juguetes de ambos estaban regados por la habitación, los compartían y no se peleaban por cual era de cada uno.

La pequeña niña sacó ligeramente la lengua en seña de concentración, cuando su hermano hacía su tarea ella dibujaba, en esta ocasión dibujo un pony en el campo bajo el sol. Le agregó los últimos detalles al sol, que consistían en unas líneas a su alrededor, y saltó emocionada de su lugar.

--¡Listo!-- Estefanía tomó su dibujo y fue hasta su hermano para jalar de su brazo --ven.

Él se levantó y tomó su cuaderno para, junto con su hermana, salir del cuarto en busca de su padre.

--¡Papá!-- lo llamó Zeus una vez fuera de la habitación, escucharón como él al parecer hablaba con alguien desde la cocina y corrieron hacía allá.

Al entrar Guillermo los miró confundido pero al notar lo que traían en manos sonrió.

--Espera un segundo-- dejó el teléfono en la mesa en una posición donde quien estuviera del otro lado del teléfono escuchará lo que decían --¿Ya terminaron con sus tareas?

--Ya, me tarde un poco pero acabe-- dijo Zeus entregándole a su padre su cuaderno.

Guillermo se agachó para estar a la altura de sus pequeños y estaba apunto de tomar el cuaderno cuando un bufido de parte de su querida niña lo detuvó.

--¡Primero las niñas!-- Guillermo rió y tomó la hoja del dibujo de su princesa.

--¡Es hermoso cariño!-- dijo Guillermo exajerando un poco su reacción, aunque realmente le sorprendía que a tan corta edad Estefanía dibujara de esa manera y hablara tan fluido.

--Gracias papi, ¿Lo puedes guardar para enseñarselo a papá Samu cuando vuelva del trabajo?-- Guillermo asintió al escuchar la propuesta de su hija y se enderezó para colocarlo en el refrigerador, sujetándolo con un imán de forma de frutita --¡Gracias!

--Por nada cariño-- susurró y besó la mejilla de la pequeña antes de hacercarse a su hijo --¿Y tu tarea Zeus?

--Aquí esta-- le ofreció de nuevo el cuaderno, Guillermo lo tomó emocionado y observó las diferentes planas del abecedario --me costó un poco pero ya termine.

--Bien hecho-- lo felicitó con una sonrisa en el rostro --pronto sabrás escribir.

--¡Halá!, ¿De verdad?-- preguntó esperanzado.

One Shot - Al terminar la tarea - WIGETTADonde viven las historias. Descúbrelo ahora