Volví a girar la mirada; aún estaba algo sorprendida con la situación de Harry y Alice. Respiré hondo y volví la mirada hacia ellos que me observaban confundidos. Hablé:
-Vámonos de aquí.
-Conozco una cafetería linda y en una zona segura-murmuró Harry-. Vamos a buscar el auto.Asentí. Seguí su paso; aquel par no demostraba en lo más mínimo el afecto que unos momentos antes derrochaban. Al detenernos frente a un auto poco lujoso, modesto y pequeño, supe que era el de Harry. Abrió la puerta del copiloto, la del pasajero izquierdo y por último la del piloto. Encendió el auto y lo echó a andar; durante media hora condujo hacia una zona "segura". Luego aparcó el auto frente a una cafetería pequeña.
-¡Buenas noches! Bienvenidos-saludó una mesera después de haber entrado al lugar-. ¡Por aquí!
Le seguimos. Al llegar a la mesa, la mesera nos otorgó el menú y espero a que eligiéramos. Sacó una pequeña libreta de la bolsa de su delantal.
-¿Lo de siempre, joven Styles?
-Por favor, Mary.
-¿Y ustedes, muchachas?
-Que sean tres órdenes iguales-habló nuevamente el ojiverde-. Deben probar la especialidad de la casa.Miré a cada uno de los presentes en el diálogo. Deje el menú sobre la mesa y suspiré.
(...)
La mañana era demasiado calurosa. La temperatura se volvía insoportable a cada minuto; era la última semana de vacaciones, estaba poco lista para el regreso a clases; incluso me negaba a creer que nuevamente tenía que asistir a la escuela.
-¿Irás a tu clase de pintura?-cuestionó mamá.
-Sí, supongo que sí.Terminé mi desayuno y fui en busca de mi material. Todo estaba disperso, incluso creía que me había vuelto más desordenada.
"Mensaje nuevo de Niall: Buen día, princesa. Sabes que te amo demasiado... Pasaré a tu casa alrededor de las cinco de la tarde."
"Yo: Lo siento, cariño. Tendré clase de pintura, te parece sí nos vemos mañana? Sabes que te amo /u\"
"Niall: Entonces pasaré por ti a tu clase de pintura."
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Cuando por fin terminó la clase de pintura, coloqué todo mi material dentro de la mochila y la eché al hombro. Salí del lugar y busqué a Niall; bien sabía dónde lo esperaba, no era la primera vez que iba por mí, otras tantas veces se le ocurría pasar a recogerme. Miré de hito a hito la calle, no había visto rastro de Niall. Miré el móvil y no había notificaciones. Deslicé la pantalla y marqué su número; sonó una, dos, tres veces, luego me mandó a buzón. Esperé diez minutos más, quizás quince y me eché a caminar. El calor que hacía en ese momento me irritaba, jamás ha sido de mi agrado.Veinte minutos después llegué a casa. En la sala se encontraba papá, quien veía la Tv. En la cocina estaba mamá y Alice, esta última actuaba raro; cuando me vio, corrió hacia mí y me lanzó una mirada que más tarde comprendí. Fuimos al comedor y entonces ella respiró hondo para decirme algo.
-Le quiero decir a mi mamá de Harry.
-¿Qué?-cuestioné asustada-. Dile, pero él es mucho más grande que tú. ¿Si comprendes? Es de mi edad. Sería como abuso a menores o algo así.
-Sí, por eso lo estoy pensando. Pero realmente necesito contarle.Enarqué las cejas y moví la cabeza de lado a lado. Luego mamá nos llamó para comer.
(...)
"Niall, ¿por qué no fuiste por mí? (22:33)"
El mensaje se envió. Y leí que su última conexión había sido un minuto antes; se puso en línea, las palomas se tornaron en azul y luego se desconectó. Y es que no soy el tipo de chica que se ahoga en un vaso con agua porque la dejan en visto, al contrario... siempre creí que lo hacían porque les había surgido algo.
Coloqué el móvil en la gaveta de mi mesita de noche y cerré los ojos....
Los días pasaron casi como una estrella fugaz. No me di cuenta cuando llegó mi último fin de semana de vacaciones.
Aquella mañana del lunes me levanté temprano, más de lo normal; no entendía cómo logré despertar más temprano de lo normal. Estaba lista para iniciar el tercer semestre de la carrera. Me sentía plena y muy emocionada; estaba segura de que hoy vería a mi mejor amiga Beth, quién estaba inscrita en los mismos grupos que yo; tal como lo acordamos.
La rutina volvía a ser la misma, salía de casa más tarde de lo normal y es que este semestre iniciábamos con las prácticas; por fin tendríamos pacientes.
Muy a pesar de la emoción, la angustia me invadía. Apenas había recibido un mensaje de Niall después de que no fue por mi a mi clase de pintura. Sin embargo, prefería pensar de forma a positiva, así que iría con todo a la escuela. Tomé el camión como siempre y me dirigí a la escuela.-¡Beth!-dije a encontrarme con mi amiga en las palapas de siempre-. Te extrañe.
-Yo también te extrañé. Y ahora debemos ir a clases, sé nos hará tarde.Le dedique una sonrisa y caminé a su lado; subimos juntas las escaleras hasta llegar al último piso. Entramos al salón donde se suponía que nos tocaba y buscamos donde sentarnos.
Esperamos más de media hora y el profesor no aparecía, finalmente, hizo acto de presencia y se presentó; también pidió que nos presentáramos nosotros y así fue. Posteriormente, dio fin a la clase y salimos para dirigirnos a una palapa donde conversar lo sucedido en nuestras vacaciones. Mientras nosotras desalojábamos, otros compañeros entraban a salones contiguos, pues tendrían clase.-¿Y que tal las vacaciones?
-Normal. Lo de siempre-contestó Beth-. Ya sabes, me tenían de sirvienta y mis hermanos no dejan de hacer o decir tonterías. Pero los quiero.
-Ya veo-contesté.
-¿Y qué tal el novio?
-Pues...-hice un sonrisa torcida-. Sinceramente no sé, realmente algo pasa con él. Quizás es mi paranoia; pero hace días que no habla conmigo.
-Suena raro amiga.Enarqué las cejas y seguimos con otro tema. Cuando menos lo imaginamos, ya se había hecho tarde para nuestra siguiente y última clase.
"20:05"
Entramos al salón y el mismo profesor que nos impartió nuestra primera clase, sería el mismo que ahora estaba frente a nosotros.
Miré de hito a hito el salón, todas las sillas estaban ocupadas. Cuando por fin encontré un par de asientos juntos noté que Mark, el chico de camisa a cuadros, estaba dos asientos detrás de mi. Los nervios me invadieron y puse atención a los criterios de evaluación que calificaría el profesor. Al final, seguí con la rutina del semestre pasado: me despedí de Beth, marqué el número de papá y subí al auto cuando lo encontré en un punto de reunión."Mensaje de Niall: Realmente lamento todo lo que hemos pasado. No he sido bueno contigo. Te veo a las dos de la mañana, estaré esperando en tu balcón."
...
02:03am
Dejé la puerta del balcón entre abierta. Y esperé impaciente al rubio. Por fin vi una silueta que tocó y notó que la puerta estaba abierta. Cerró detrás de él y me miró perplejo.
-Ellie-dijo en un susurro-. Hace mucho que tuve que decirte esto, pero no estaba preparado. No quiero hacerlo, me hace sentir mal.
-¿Decirme qué?
-Promete una cosa-musitó nervioso-. Pero prometelo. Pase lo que pase, no olvides que te amo.
-Niall, me estás asustando-dije y él insistió-. Prometido.El rubio sonrió y plantó un beso enternecedor sobre mis labios. El beso era diferente, no sentía esa magia de siempre; algo había cambiado esa noche: su voz, su semblante, sus expresiones... Él.
Giró y decidió salir nuevamente por donde entró.-Te amo-murmuré por fin.
-Y yo a ti, bombón.Cerré la puerta cuando él se marchó. Volví a recostarme y cerré los ojos; pensé en todas sus palabras expresadas. Temía lo que pudiera pasar entre él y yo.
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Sé que pasó mucho tiempo para que terminara la temporada. Y a pesar de que ya la termine, seguro que voy a seguir con lo capítulos como sí no hubiera pasado.Besos. Y gracias por sus lecturas.
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Barman |N.H.| Terminada (En edición)
Romance-La casa invita-musitó el rubio de ojos azules que estaba detrás de la barra. (...) Es mitad de semana y no tengo que hacer. La universidad parece más complicada a cada paso que doy. -Tienes algo que hacer ahora?-cuestionó mi mejor amiga, Cath. -No...