Cuando me desperté por la mañana vi que Harry no estaba en la cama pero me daba mucha pereza levantarme a buscarlo. Me parece que todo esto es un sueño y que no es real. Es difícil creer que el chico al que siempre has querido en silencio te quiera también, es como un cuento con un final feliz. La puerta se abrió y vi a Harry en calzoncillos con una bandeja en las manos.
- Buenos días preciosa- dejó la bandeja en la cama y se acercó a darme un beso.
- Hola- sonreí- ¿has hecho el desayuno?
- Sí.
- Muchas gracias- cogí una taza de café.
- Estabas dormida cuando me desperté así que aproveché para hacértelo- se veía tan mono. Tenía el pelo alborotado y una sonrisa que hacía que se le marcase ese ojuelo en la mejilla.
- ¿Y ahora qué?
- No entiendo- dejó su taza y me miró preocupado.
- ¿Qué pasa ahora? Con nosotros.
- ______, yo quiero estar contigo, pensé que ya lo habías entendido.
- Sí, sí pero no te puedes olvidar de quien eres y de lo que va a causar esto y tus fans...- me calló con un beso.
- ______, eso no cambia nada.
- Tengo miedo.
- Pues no lo tengas, yo estaré contigo y no te voy a dejar.
- Vale.
- Ahora acábate el desayuno.
Yo seguía preocupada, soy así. Le dije que tenía cosas que hacer para clases, que no era mentira solo que no me apetecía hacerlo ahora mismo. Me vestí lo más rápido que pude y me fui. El frio que hacía en la calle me devolvió un poco a la realidad, me abroché bien en abrigo y cogí un taxi. Quería llegar a casa lo más rápido posible.
Todo lo que había pasado anoche... debería estar contenta, ¿por qué no lo estoy? No me entiendo ni yo. Me había dicho que me quería y yo a él pero tengo mucho miedo, es algo en lo que no me había parado a pensar antes. Ya me he enamorado de él una vez sin recibir nada a cambio, ¿qué pasa si ahora se cansa de mí en unos días? No sé si podré recomponerme una segunda vez, no después de lo de anoche. ¿Y sus fans? Me van a odiar, lo sé. No estoy preparada para que me acribillen por las redes sociales o que me sigan por la calle.
Al llegar a casa me metí en la cama y me eché a llorar, no sé ni el por qué, solo tenía ganas de llorar. El sonido de mi móvil me sacó de mis pensamientos.
- Hola.
- ____, ¿Estás bien? Me quedé preocupado cuando te fuiste.
- Estoy bien, no te preocupes.
- No escúchame, no quiero que te agobies porque yo sea Harry Styles, solo los chicos te conocen así que si quieres, podemos mantenerlo así durante un tiempo. Puedo seguir siendo el soltero más deseado de toda Inglaterra- escuché como se reía.
- Harry, yo...
- ___, lo digo muy en serio, cuando estés preparada lo haremos público, antes no.
- No sé cómo agradecértelo.
- Ven conmigo hoy a cenar.
- Está bien.
- Paso a las siete por ti, te quiero.
- Yo también te quiero- dejé el móvil encima de la cama y me fui a duchar.
Me siento la mujer más afortunada del mundo, no sé si me merezco a un hombre así pero mientras lo tenga lo voy a hacer lo más feliz que pueda.
