No.6

El puerto fuera de No.6

"-Mama... Mama a donde esta papa? -preguntó inocente un pequeño niño de 6 años, casi 7 dentro de un par de meses, su cabello castaño algo revuelto, su piel blanca y ojos color avellana jalaba ligeramente la falda de aquella mujer, que no aparentaba más allá de los 23 a simple vista, pero por lógica tendría más, era tradición en aquel pueblo llamado No.6 casarse a partir de los 22 o mas, la mujer tenía un hermoso cabello castaño al igual que sus ojos, una figura esbelta y grácil, junto a su piel blanca, su cabello perfectamente trenzado y flequillo hacia un lado combinando perfectamente con su rostro
-mi niño... Papa a salido fuera de la ciudad ya que tiene otro trabajo -decía la mujer tomando a su pequeño niño cargándolo de forma en que este estaba en su espalda pasando los brazos por el cuello de la mujer mientras ella tomaba la piernas de su pequeño para sostenerlo mejor comenzando a caminar hacia su hogar
-papa fue a pescar a otro lugar? -preguntó inocente El Niño, hace mucho no veía a su padre desde que le contó un cuento muy interesante y beso su frente al día siguiente no lo volvió a ver, eso hace ya casi unas dos semanas
-si mi amor, papa fue a pescar a otro lugar -decía la mujer suspirando, no quería mentirle a su hijo, pero tampoco quería involucrarlo en esos asuntos
-volverá para mi cumpleaños mami? -preguntó El Niño con esperanza, su padre siempre lo llevaba de pesca o excursión en su cumpleaños y le contaba todas las aventuras que ah tenido como pescador del pueblo
-no mi niño... Lastimosamente papi estará muy ocupado pero me dijo que tu y yo podríamos ir de excursión, así cuando el pueda volver le contaremos todo lo que has hecho y aprendido con las excursiones que tendremos y que tal te ah ido como el hombre de la casa, si? -preguntó la mujer lo mas dulce y cálida que pudo, tenía ganas de llorar su marido no volvería, y ella deberá irse también en algún momento debería preparar a su hijo para lo que venga
-si mami! Seré el mejor hombre y te protegeré papa estará orgulloso! -sin más la mujer solo sonrió un poco dejándo correr una pequeña lagrima, si su marido estará orgulloso de su pequeño retoño, vio la entrada de su hogar era una pequeña casita de madera de dos pisos no muy grande si bien su pueblo no era muy avanzado tenían lo necesario, su casa era pequeña o al menos esa visión tenía, una ves tomo el pomo de la puerta la empujo levemente y entro junto al pequeño aun en su espalda, una vez entraron el pequeño salto y corrió a la sala donde se tiro en uno de los sillones que tenían en el cual a el le gustaba tirarse a dormir un rato
La mujer solo río un poco al ver a su pequeño correr, cerró la puerta con seguro mientras susurraba unas palabras inentendibles y casi inaudibles
La mujer vio su hogar desde dentro todo cambiaba, no era pequeño el espacio de la sala, era grande eso lo reconocían mucho a aquellos pocos que dejaba pasar a su hogar, había una chimenea encendida donde luego pondría más leños para calentar la casa, su cocina aun que algo rústica era hermosa a simple vista con todo lo necesario, luego estaban unas escaleras que daban al segundo piso, los escalones al igual que el interior de la casa eran de madera, por dentro la casa era de madera ,pero algo cambiaba y es que por dentro de la casa era de madera fuera de esa capa de madera había una capa de concreto sólido y esta capa se forraba de nuevo con madera así dando una ilusión muy modesta para no atraer la atención, miro a su hijo que le hacia señas para que se sentara a su lado y sin mas fue hacia el, El Niño una vez vio a su madre sentarse a su lado apoyo la cabeza en las piernas de su madre cerrando los ojos mientras la mujer daba ligeras caricias en su cabello
-mami... Mami por que no puedo bajar al sótano? -preguntó por décima vez en esa semana, su madre y padre siempre le prohibían bajar pero nunca le decían por que
La mujer se tensó y trato de permanecer lo mas calmada que pudo, no podría dejar a su hijo bajar por ningún motivo
-mi niño por que no, abajo es muy aterrador y podría haber un animal, no quisiera que te pasara nada- decía la mujer en parte si era peligroso que el bajara no quería envolverlo en todo ese asunto
-pero... -intento alegar El Niño pero sólo recibió una seña de silencio de su madre, que le dedico una ligera sonrisa que pudo percibir perfectamente su preocupación, sin más el pequeño abrazo a su madre -perdón mami... No bajare lo prometo -decía arrepentido no solo sintió la preocupación de su madre sino también el miedo reflejado en los ojos de aquella mujer, apretaba fuertemente los ojos y mientras sentía los brazos protectores de su madre en su cuerpo, con cuidado soltó a su madre y bajo las manos una a su short color arena y la otra a su camisa blanca apretándolas con fuerza e impotencia
La mujer solo acariciaba la espalda de su pequeño viendo como este apretaba su propia ropa -mi niño no hagas así tu ropa no queremos que se maltrate verdad? -decía con una sonrisa El Niño soltó rápidamente la ropa apenado era su ropa favorita
-perdon mami -decía mientras veía a la mujer - mami me contarías la historia que papa me enseño antes de irse?
-mmm?... ¿Cual historia pequeño? -preguntó la mujer, su marido siempre le contaba historias a su pequeño retoño así que no sabía exactamente cual era la que pedía
-la historia sobre el barco que va a la ciudad de hechiceros fuera de No.6 -decía emocionado mientras veía palidecer un poco a su madre "