El año nuevo estaba mejorando cada día más, era como una luz después de todo lo que había pasado ya antes, en mis clases me iba bien y todo era por así decirlo "perfecto".
Sin duda alguna ese año sería un año prometedor, pues era ya el último año de secundaria, el último año en que vería a la mujer que me traía enamorado desde ya un buen tiempo, todos estábamos alegres y un poco tristes y tratábamos de reunirnos diario para charlar y divertirnos un poco después de las clases.
Por otra parte empezaba ya en las clases de español a hablarse de la obra que realizan todos los años los alumnos de duodécimo y todos estábamos alegres, pues era una tradición del colegio muy popular, en la cual se actuaba, bailaba y cantaba.
Nuestro festival se llamaría "fiesta de mi tierra" practicamos tres meses y recibimos clases de bailes, pues la maestra nos divido a todos en grupos de bailes diferentes, ahí hice unos cuantos amigos nuevos de los otros duodécimos y nos llevábamos muy bien.
La euforia por que el día tan esperado llegase, era muy grande.
Un día antes de nuestro evento era el cumpleaños una vez más de esa chica que tanto amaba y yo una vez más no sabia que regalarle y pues le compre un anillo de plata, una tarjeta y rosas rojas, imagino que a ella le gusto, pues sus amigas estaban encantadas.
Cuando el día de nuestro festival finalmente llegó todos estábamos nerviosos, pues nuestra obra, era la primer obra que se realizaba diferente a los años anteriores en el colegio.
Todos estábamos nerviosos y a la vez muy alegres por que por fin el día había llegado, grabamos videos, nos tomábamos fotos y no sabíamos cuantas personas estarían esperándonos ahí para vernos bailar y actuar.
Todos dimos lo mejor de nosotros ese día y fue algo estupendo, algo que jamás olvidaremos, las personas que nos llegaron a ver se fueron muy contentas, pues nuestros bailes y obras les gustaron muchísimo y fue todo un éxito.
Pasados tres días después del festival las clases tomaban su curso normal todos hablamos de nuestros bailes, era algo que no podíamos superar.
Pasado un tiempo como un mes aproximadamente mi corazón volvía a latir muy fuerte por esa chica y lo único que hacía era mirarle, miras sus fotos en su pagina de Facebook, escuchar canciones de enamorados y hacerme en mi mente una historia de amor, en la cual ella me correspondía y me amaba igual que yo a ella.
Pero la realidad es que ella nunca se iba a fijar en mi como un hombre, recuerdo que un día lloré y me preguntaba que era lo que me faltaba... que necesitaba yo para que ella se fijase en mi, que más podía yo hacer si ya le había confesado todo mi amor y ya Hasta había cantado para ella.
Recuerdo que una semana ella no llego a clases por que le operaron de una enfermedad y yo me sentía triste por que ella por que no podía verle hasta que se recuperara, yo lo único que quería era visitarle, pero entre ella y yo no existía tanta confianza.
Al pasar el tiempo de su recuperación ella volvió a clases y se veía más hermosa que nunca y yo como un bobo solo podía verle, pero solo con verla me conformaba, pues si ella estaba feliz yo también lo estaba.
Otros chicas me enamoraban, pero en mi mente y corazón sólo existía ella y yo no hacía caso a ninguna, pues sentía que si yo prestaba atención a las demás mujeres, era como una infidelidad para con ella.
Realmente pensaba el amor es genial, pero por que tiene que doler tanto, por que tiene que ser como un rosal lleno de rosas con espinas cuando no es correspondido.
