♡~Un amor inesperado~♡

La boda ♡

Silvia: Yo también te amo Jorge, muchísimo muchísimo mi guapo.- nos abrazamos y nos besamos profundamente conciliando el sueño en poco tiempo.

Por la mañana, despertamos muy temprano, nos arreglamos e hicimos algo de desayunar. Cuando terminamos, nos pasaron a buscar nuevamente nuestros amigos.

Llegamos al departamento de Candy. En el vestidor, se encontraban, mi mamá Silvia, Eliz, Paulina, Génesis, y Ana. Y una chica que me iba a maquillar.
Tomé mi vestido y todas salieron para que me lo pusiera. Después me empezó a maquillar Tara, la joyería me la iban pasando las chicas, el peinado me lo hacía otra chava.

Pov Jorge.

Para mí era más rápido, sólo me puse el traje, la loción, mi cabello lo arreglé a la perfección, me puse los zapatos y nos fuimos a la iglesia.

Fin pov Jorge.

Cuando por fin terminaron de arreglarme, la limusina llegó, mamá y yo entramos y las chicas se fueron en los coches.

Narradora.

Jorge ya se encontraba afuera de la iglesia con todos los invitados y su padre a su lado esperando a su amada. La prensa estaba detrás de unas rejas, como las que se ponen en los conciertos para que no pasaran, de igual manera, la seguridad los controlaba.

A lo lejos vieron llegar una limusina.

***

Pov Jorge.

Vi que el chofer que manejaba la limusina bajó a abrir la puerta de Silvia, la vi pisar la acera con unos tacones blancos. Me resistí a no verla y volteé, aún no la podía ver. Mi padre se dirigió hasta donde ella, porque entrarían juntos. Le avisé al padre que ya podíamos comenzar y todos pasamos, excepto, obviamente, Silvia y mi papá.

Reproducir el vídeo y seguir leyendo por favor.

Ahí estaba ella, desfilando por aquella pasarela tomada del brazo de mi padre. Con ese hermoso vestido blanco hasta el suelo, con un escote en forma corazón sin mangas, la larga cola, el hermoso peinado, esos ojos tan brillosos especiales.
Cargaba un ramo de rosas blancas, mientras le tiraba besos a los niños, a el hijo de Flor. Sus damas de honor ya estaban en el altar esperando. Se veía hermosísima, con ese maquillaje tan natural que usaba, ese brillito en los labios. Toda ella estaba hermosa. La miraba fijamente a los ojos, y ella de igual manera; no lo podía ver, pero sentía la sonrisa dibujada en mi rostro. Venía susurrando con mi papá, no sabía de qué, sólo sabía que la amaba a cada segundo más y más.
Sentí como mis piernas temblaban y mis manos todo sudorososas, estaba muy nervioso. No podía pensar en ningún otra cosa que no fuera verla llegando a mi lado. La seguí observando, su forma de caminar, sus muecas, sus risitas, esa inocencia que aparentaba. Esa lentitud de su caminar, esa forma tan bonita de sonreír. Por fin estaba llegando sólo unos pasitos más y ya. Traté de calmarme para no temblar, cosa que duró unos segundos.

Señor Salinas: Jorge, te entrego a Silvia, a quién quiero como una hija. Cuídala, protegela, y haz de mi nieto, una persona de bien. Les doy mi bendición, y espero que este matrimonio, nunca se rompa...-
Silvia: Gracias don Salinas, muchas gracias.-
Jorge: Papá, yo te prometo cuidarlos con mi vida, amarlos por siempre.-
Mamá Silvia: Yo les doy mi bendición, y toda la confianza que requieran.-

***

Narradora.

Jorge tomó la mano de ella y la misa comenzó.

Las alianzas las llevó Manuel. Las arras las portó Pablo.
El lazo lo pusieron los padrinos de boda, finalmente, eligieron a Flor y Santi.

Padre: Lo que Dios a unido, que no lo separe el hombre. Jorge Salinas Pérez y Silvia Angélica Navarro Barva, los declaro, marido y mujer. En el nombre del padre, hijo y espíritu Santo, amén. Jorge, ya puedes besar a la novia.-

Jorge se acercó y ella también muy lentamente, hasta que lograron juntar sus labios. El beso era lento, dulce, tierno. Al separarse, volvieron a desfilar por la alfombra roja. Cuando cruzaron las puertas, el arroz voló por doquier. Se detuvieron en el medio, volviendo a besarse tiernamente. Los flashes estaban en todos lados, los paparazzis se volvían locos.

***

Caminamos hasta la limusina, y antes de subir, tiré el ramo hacia atrás, la suertuda fue ¿Ana?, o sea, ¿Ana?. La mujer que había dicho que no quería sentar cabeza, se podría llegar a casar.
Subimos a la limusina.

Recorrimos muchas partes hermosas de la ciudad. Las veíamos a través de la ventana del techo ya que nos habíamos parado.
Llegamos al salón donde nos esperaban todos, nos dirigimos hacia la pista de baile, y bailamos el bals.
Agradecimos a todos por ir, y nos sentamos. Sirvieron las comidas y demás.

La seguridad estaba muy estricta ya que la prensa estaba en la puerta.

La fiesta siguió hasta las ocho de la noche; en ese tiempo, decidimos dar una corta entrevista así se calmarían. Bailamos mucho, partimos el pastel, hicimos una sesión de fotos.

Llegamos al hotel cinco estrellas que habíamos ordenado para las diez de la noche. Jorge me cargó hasta la habitación.

Silvia: Al fin, finalmente, somos marido, y mujer.- nos abrazamos fuerte.-
Jorge: Finalmente no amor, y para todo lo que resta de nuestras vidas.-
Silvia: Te amo Jorge.- viéndolo a los ojos.-
Jorge: Y yo te amo Silvia, finalmente, de Salinas.-
Silvia: Y tú, mi Jorge de Navarro.-

Comencé a besarle el cuello lentamente, mientras que con una mano acariciaba su nuca y con la otra su pecho por encima de su traje. Él pasaba sus manos por mi espalda, a través del vestido. Subí los besos hacia su oreja mordiéndole el lóbulo, Jorge soltó un leve gruñido. Siguió pasando sus manos, mientras las bajaba a mi cintura, posicionándose allí. Seguí por besar sus labios.
Pasé mis manos por sus hombros quitándole el saco muy lentamente; Jorge volvió a subir sus manos hasta donde estaba el lazo de mi vestido, abajo de él, estaba el cierre. Lo soltó, y las cintas, quedaron colgadas, estaban hechas con la prenda. Sin dejar de besarnos, caminamos hasta el costado de la cama; desabotoné su camisa lentamente, mientras él bajaba el cierre de mi vestido.

Aquí el capítulo más esperado y soñado por nosotras: La boda NavarroSalinas. Perdonen la tardanza, es que tardé cañón en encontrar un Ave María que me gustara, y qué mejor que el de Lali . Después en cuidar cada detalle, que todo quedara justo como lo había imaginado, en fin, éste es el resultado.
Prometo que pronto se viene el drama, no vale enojarse, así lo pidieron. Jajajaja.
Saben que las amo.
Bendiciones :* Sean felices

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