Hospital

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Y allì estaba yo, en el Centro de Salud más cercano a mi casa por un dolor de estomago terrible, con quien? simple, con mi mamá, la que siempre me ha apoyado, porque para el padre mío más importante es el trabajo.

-Mamá, tengo miedo, y si me tienen que operar, y si tengo algo malo?-Decía mientras trataba de no desmayarme del dolor.

-Tranquila hija, respira, todo va a estar bien, trata de no pensar en cosas malas, mira, ya nos vienen a atender-Dijo mientras veíamos a una enfermera y una doctora acercarse a nosotras.

-Buenas noches, soy la Doctora Amanda Oliver, y ella es la enfermera Vanessa Pardo, cuentenme, qué es lo que tienen, o tiene?-Dijo la Doctora con entusiasmo.

-Mi hija, se ha estado quejando toda la noche de un dolor de estomago, y decidio que habia que venir, porque el dolor estaba en aumento-Decia mi mamá con profunda serenidad, mientras que yo respiraba entrecortadamente y trataba de no quejarme.

-Ok, vamos a revisarte y después tomamos todos tus datos, te parece?

-Ok-Fue la única respuesta que pude dar mientras me quitaba los zapatos y me acostaba en la camilla. La doctora apenas me puso, y apretó la mano en la boca de mi estómago logro hacerme gritar- Ahi, ahi me duele, por favor no aprietes, hasta siento que voy a vomitar.

-Esta bien, creo tener una idea de que es lo que tienes, Vanessa por favor busca, suero, y un protector gástrico-Dijo la Dra mientras volvía a revisarme.

-Ella es muy necia Dra, todos los días le decía Isabella vas a agarrar una enfermedad en el estómago, y la niña decía "relájate mamá, esas cosas solo le pasan a otras personas, no a mi"-Dijo mi mamá citandome.

-Ahora que terminé de revisarte, Nombre, Apellido, y cuantos años tienes?-Esa vez ya estaba seria.

-Isabella Amparán, 19 años.-Dije con pereza mientras veía llegar a la enfermera con las cosas que le pidió Amanda.

-Muy bien Isabella, por lo que pude notar tienes una gastritis aguda, y el colon está inflamado, has vomitado, tenido náuseas, o diarrea?

-No, los vómitos la semana pasada, pero desde que comenzó la noche si he tenido nauseas, solo que me calmo y trato de no vomitar-Dije un poco asustada.

-Esta bien, te vamos a administrar un suero para mantenerte hidratada, te voy a poner un protector gástrico, ahora por favor date la vuelta y bajate el pantalon para inyectarte.

-¿Qué por qué en la nalga? o sea, por qué no puede ser en el mismo sitio de la via? o en la barriga?-Dije alterada, no es que me den miedo las inyecciones, solo que odio que me tengan que poner inyecciones en las nalgas, vamos, es un poco incomodo mostrarle una parte tan intima de ti a una completa extraña.

-Dejate de tonterias Isabella, volteate-Intervino mi mamá sabiendo que podía pasar toda la noche discutiendo el sitio de la inyección.

-Con mucha pereza me di la vuelta para que me puyaran, pero dios nadie me dijo que iba a sentir que me prendian en fuego por donde iba pasando el medicamento-Arde! Arde! ¿Qué es eso? siento como si me estuviera quemando-Hablé desesperadamente.

-Es un medicamento contra el vómito y las nauseas, no te preocupes que yo se que arde, imaginate si te lo hubiera puesto en el brazo, fuera peor la sensación de ardor, ahora te pondré la vía con el protector gástrico y se podrán ir cuando este se acabe-Dijo Vanessa muy amablemente, y en ese momento agradecia el sitio donde me habían colocado la otra medicina- Ah, no se les olvide pedirle la dieta que vas a tener que cumplir de ahora en adelante a la Dra antes de irse, que pasen buenas noches-Y sin más se retiró.

-Te lo dije Isabella, pero tu noo, eso no me va a pasar a mi y bla bla bla-Cuando iba a abrir la boca me interrumpió.-Y no me vengas con relájate mamá, de ahora en adelante vas a comer a las horas, y las tres comidas.

-Esta bien mamá, tenías razón con todo lo que me decías, te prometo que voy a comer y me voy a curar-Hablé con mucho pesar-Ah por cierto, le avisaste a mi papá que estabamos aqui? Yo no le escribí porque me iba a decir que estaba en el trabajo, ya sabes, lo de siempre-Mi voz sonó un poco decepcionada y mi mamá lo notó.

-Escúchame bien, si él no está estoy yo, y sabes que esta que está aquí no te va a fallar como él siempre lo ha hecho.Lo llamé y no me atendió -Como cada vez que alguna de nosotras lo llama, me refiero a mi mamá, mi hermana o yo- así que le mandé un mensaje, pero adivina, todavía espero que responda.

-No te preocupes ma, ya de ese señor nada me sorprende-Dije dando por cerrado el tema. Empezamos a hablar de cosas variadas mientras esperábamos que se acabara el suero para poder irnos, justo cuando se acabó llegó la Dra.

-Aquí les dejo la dieta que vas a tener que seguir, junto con los medicamentos que vas a tener que tomarte, te recomendaria que fueras con un gastroenterólogo, que el es mas experto que yo-mientras le entregaba las hojas a mi mamá.

-Me levanté, le di un abrazo a Amanda y le di las gracias por todo, tomamos nuestras cosas y nos fuimos a casa, sintiéndome muchisimo mejor en comparación al estado en que llegué.

Distinta al restoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora