Decirte Adios

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Por tercera ocasión el celular me alertaba de la llamada de mi madre, y por tercera ocasión decidí rechazar la llamada, apagar mi teléfono era lo mas obvio y así tener un pretexto, pero necesitaba estar al pendiente de que Meryl me enviara un SMS para saber donde estaba, ya que seguramente, ella también habría mentido a sus padres ocultándoles que quedamos de vernos en GM; era como la cuarta ocasión que intentábamos quedar para una cita, ya que las veces anteriores siempre pásaba algo que impedía nuestro encuentro, y rogaba porque esta vez no pasara de esa manera, esta vez estaba más nervioso que nunca, debo decir que Meryl y yo solo nos conocemos de hace unos cuantos meses y no es que durante el curso hayamos tenido una excelente amistad, Meryl es una chica muy atractiva de cabello largo y liso colo amarillo y de piel blanca, en fín, me resulta irresistible, estos últimos días de la preparatoria surgió una cosa extraña entre los dos, así que empezé a tratarla más, y me sentía a gusto cuando charlábamos o cuando nos tocaba hacer alguna actividad juntos.

En mi celular ahora sonaba Me Enamora de Juanes, que me alertaba de un nuevo SMS, el que tanto estaba esperando, efectivamente, era de Meryl, fué muy corta mi alegría porque al abrir el mensaje encontré el siguiente texto: "Sebastián, lo siento mucho pero mi hermano a venido a por mi antes de lo que yo esperaba para llevarme a casa, y no he podido negarme, perdóname y espero que otro día podamos quedar, de verdad lo siento, bye"

Ya en mi auto camino a casa estaba pesaroso, no podía creerlo, era la cuarta vez que Meryl me dejaba plantado, a veces dudaba si ella en realidad querría tener una cita conmigo o solo aceptaba para no ser descortés, ya lo averiguaría yo en algún momento, el caso es que a pesar de eso me sigue gustando tanto su sonrisa, su cabello, sus ojos, sus labios y todo, de ella, ciertamente no encuentro ningún defecto en ella, es la mujer perfecta, no se si mis compañeros del curso le ven igual, quizás si, o quizás, como dice mi amigo Arnold yo soy el único que le veo así porque él dice que estoy enamorado, sinceramente no lo sé, pero puedo decir que este sentimiento es muy agradable.

Iba conduciendo por el Pueblo de San Ernesto, que está dos pueblos antes de llegar a donde resido, me desvié hacia un boulevard porque me apetecía alguna golosina de la tienda, me encontré con el mismo Arnold, que iba con una mujer como de 20 años, bajé del auto para ir a la tienda, lo último que quería era hacerles un mal tercio, pero al pasar cerca de mi auto él se percató de mi presencia levantando una mano para saludarme y llamando a la mujer con la que iba para que le siguiera hasta mi sitio.

- Hey Sebastián, ¿que haces por aquí?

- Arndold, yo... vengo del GM, a que estaba un poco estresado, ya sabes, los trabajos finales.

- Ya, mira te presento a Ivón, es una amiga del ISI.

- Hola, es un gusto.

De Arnold nunca se saben sus intenciones, no es la primera vez que en una semana le veo pasear con mas de una chica, él es totalmente impredecible en cuánto a las relaciones que tiene, de todos modos, es solo su amiga, aunque no lo parezca demasiado, realmente se divisan más que eso.

- Igual Sebastián, creo que Arnold y tú han sido buenos amigos del curso.

- Si, es un majo

- Ya, bueno Sebastián, nos ha dado gusto saludarte, te veré mañana en el colegio.

- Vale, que os vaya bien, nos vemos mañana.

Al llegar a casa decidí seguir leyendo "Pero a tu lado", pues no tenía ganas de seguir con los proyectos finales del colegio, me pasé como una hora con la lectura, hasta que mi madre entró por la puerta de la sala, sabía lo que me esperaba, no le cogí el teléfono cuando estaba en el GM.

- Ah, Sebastián, ¿estas aquí?, ¿que pretexto viene ahora que no me has cogido el teléfono?

No supe que decirle, tampoco quería contarle que había quedado con Meryl, no que fuera malo, pero no quería que mis padres supieran acerca de esta situación.

- Lo siento mamá, es que ando demasiado preocupado, ya sabes, los trabajos finales

- Ya, y por eso pierdes tu tiempo leyendo ese libro- dijo con un tono sarcástico

- Perdón mamá, no volverá a pasar

- Esta bien, solo no olvides hacer las camas y lavar los trastes

- Está bien

Esperaba un regaño más fuerte, pero mi madre, en ocasiones es comprensiva, así que dejé mi lectura y me fuí a hacer lo que me había ordenado, Amayrani tuvo que ir a realizar un proyecto con sus amigas, o eso había dicho, probablemente quedaría con René; así que solo estaba yo para hacer los quehaceres. Al terminar me dispuse a abrir mi perfil de Facebook, tenia 2 mensajes nuevos, y me apresure a abrir el último que era de Meryl: "Sebastián, de verdad que lo siento por lo que ha pasado hoy, no creas que no quiero quedar contigo, pero mi madre me ha tenido muy vigilada, no se si sospeche algo, pero te prometo haré lo posible para que nos veamos", ya se había desconectado hace 30 minutos, así que solo le dije que no se preocupara y que le vería mañana en el colegio, el otro mensaje era de Mary insistiendo con charlar conmigo pero ignoré su "Hola" por enésima ocasión ya que no quería tener nada más que ver con ella. Navegué un momento más por la página de inicio y miré una foto publicada por Arnold, en ella estaba abrazando a Ivón y mirando a la cámara, y solo le dí un "me gusta" ya me contaría Arnold lo que había pasado entre ellos, a pesar de que ya pudiera imaginármelo.

Cuando ya era de noche, me metí a duchar escuchando a Demon Hunter, por ahora no quería saber de amor, y mucho menos de citas.