11° Si te tengo a ti no necesito orgullo

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-----miércoles 2 de septiembre del 2015 Hora: 20:26pm-----

-oye, Munakata despierta- decía el rojo con un tono de desesperacion moviendo un poco al otro.

Mikoto se levantó de la cama y fue por un poco de agua, y unas vendas, cuando volvió le quitó parte del uniforme haciendo que el azul sólo tuviera puestos sus pantalones, un escalofrío recorrió el cuerpo del rojo al ver todas las heridas que habían quedado en el cuerpo de Munakata, saco una cajita y la abrió adentro habían algunos algodones y alcohol.

-este idiota...-dijo el pelirrojo enojado.

Puso un poco de alcohol en el algodón y paso el algodón por las heridas de el azul pero este ni se quejaba.

-¿porque no dice nada?-pregunto preocupado.

Mikoto acercó su oreja al pecho de Munakata para verificar si su corazón latía, el rojo suspiro satisfecho al escuchar los latidos del otro, y siguió sanando las heridas de Munakata, después vendo la mayor parte del cuerpo de munakata.

Una hora después Munakata empezó a abrir sus ojos observando a su alrededor, no recordaba mucho, acomodo sus lentes y al tocar los lentes recordó que ese lugar era la habitación del pelirrojo, recordó el beso que le había robado al rojo y un leve sonrojo se hizo presente.

-¿suoh?....-miraba la habitación intentado encontrar a mikoto.

Munakata se levantó de la cama un poco dolorido intentando mantenerse en pie pero no lo logró y cayó al suelo de una manera violenta golpeando su cabeza contra el suelo.

Mikoto estaba sentado en una silla pensando en el beso que Munakata te había robado y se preguntaba: ¿porque de un momento a otro me besó y me volvió a llamar por mi nombre?, un sonido interrumpió sus pensamientos.

-¿que fue eso?- pregunto el pelirrojo.

Mikoto se levantó de su silla con pereza como siempre y se dirigió al cuarto y al abrir la puerta encontró al azul tirado en el suelo, estaba preocupado pero no quería desperdiciar más su orgullo así que sólo pregunto de una manera burlesca:

-¿te caiste?- fingió una risa un poco cruel.

El azul utilizó sus fuerzas para sacar su PDA de su bolsillo y marco a awashima para que viniera a buscarlo, mikoto pudo ver lo que hacia el azul y se acercó a paso lento cuando estuvo cerca de el sonrió de manera psicópata y le quitó el PDA.

- s-suoh....¡damelo!- dijo el azul un poco enojado.

Mikoto corto la llamada y guardo el PDA en su bolsillo.

-No quiero-dijo con frialdad de nuevo

Munakata se arrastró hasta donde estaba mikoto e intentó escalar la pierna del rojo pero le fue imposible le faltaban fuerzas.

-¿que haces?-dijo el pelirrojo viendo como Munakata hacia esfuerzos en vano.

-Devuelve....devuelvemelo...-dijo este entre leves jadeos.

-¿y si no quiero?-pregunto mikoto ya un poco enojado.-¿quieres irte?, pues vete pero sale por esa puerta con tu propia fuerza-

Como ya no tenía fuerzas para sostenerse mordió la parte baja de la pierna de mikoto para luego caer al suelo.

En la cara de mikoto se podía ver una mueca de dolor pero no se quejó, se sentó en el suelo al lado de Munakata y lo miro.

-damelo....-dijo cansado el azul.

Munakata seguía intentando levantarse pero era imposible.

-¿porque ibas a llamar a esa put*?-pregunto mikoto con un tono cruel.

project k [SaruMi]El verdadero traidorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora