AndrewxSucrette (+18)

Capitulo 3

—N-no es eso... Es sólo que tú nunca me habías llamado así... —comentó Su con algo de tristeza en la voz. Andrew sintió como algo se revolvió en su interior al escuchar a Sucrette así.

Era completamente diferente a la sensación de satisfacción que sentía cuando la molestaba, porque adoraba verla molesta o haciendo un lindo puchero mientras se iba refunfuñando. Pero definitivamente no le gustaba verla de ese modo.

Su mano se levantó sola y acarició levemente la mejilla de Su haciendo que ella lo mirara sorprendida, ¿La estaba consolando? Andrew , a pesar de que la estaba acariciando, miraba hacia la pared. No podía mirarla a los ojos cuando estaba haciendo algo tan cursi y vergonzoso.

Sucrette seguía sorprendida pero no iba a negar que no le gustaba que Andrew la tocara o que estuviera encima de ella como si fuera a...

—Andrew... —el rubio bajó su mano y giró su rostro para encontrarse con la mirada curiosa de Su—. ¿Por qué me besaste?

Andrew se sorprendió por la pregunta. Aunque era obvio que en algún momento ella se lo iba a preguntar pero él esperaba que lo hiciera después de... Bueno, después de lo que planeaba hacer.
Sin decir nada, Andrew, con un ligero sonrojo muy masculino (según él), sujetó la barbilla de Sucrette y la besó. Fue un beso muy diferente al anterior, él sujetaba el rostro de Su mientras que con la otra mano intentaba levantarle la camiseta blanca que llevaba.

En un descuido por parte de Andrew, Sucrette pudo separarse de él sujetándolo por su hombro mientras que se cubría la boca con el dorso de su mano.

Le parecía tan irreal que Andrew la haya besado pero sus labios aún estaban calientes y sentía el ligero dolor en su labio inferior por su mordida.

—¿Q-qué estás haciendo? —balbuceó Su, con evidente dificultad por su respiración algo agitada.

—¿Qué no es obvio? —Andrew se veía algo impaciente y tenía una mirada tan lasciva que Sucrette pensó que en cualquier momento se le iba a lanzar encima otra vez—. Voy a hacerte mía. —El rubio se había acercado a su oído para susurrarle eso con una voz ronca y excitada para luego separarse y quitarse esa rara camisa marrón que solía llevar dejando a la vista de Sucrette su cuerpo bien formado y su abdomen marcado ligeramente.

Los colores se le subieron a la cara de Su, es decir, estaba el chico que le gustaba desde hace mucho tiempo susurrándole cosas pervertidas y desvistiéndose frente a ella. Sucrette volteó su rostro tratando de no ver el cuerpo de Andrew, todavía tenía muchas cosas para procesar como para que él y su cuerpo vengan a ponerla nerviosa. Andrew se rió levemente por la reacción de Su, quizás él no era el único virgen ahí. Y eso de cierta manera le reconfortaba. Saber que iba a ser el primero para Su era "lindo".

*

Dios, se estaba volviendo cursi.

Andrew se acercó lentamente a Sucrette y ella, con el ceño ligeramente fruncido y un sonrojo más que evidente, no podía evitar mirar de reojo el cuerpo del rubio. Al estar casi a menos de 20 cm del cuerpo de Su, tomó delicadamente una de sus manos y a dirigió a su abdomen. Sucrette se sorprendió al sentir algo suave y caliente; sabía lo que era y eso mismo era lo que la había dejado sin habla, su voz parecía no querer hacerle caso. Intentó quitar su mano pero Andrew la tenía presionada con la suya.

El rubio subió su mano junto con la de Su, por su abdomen, sus pectorales, su cuello, posó su mano en su mandíbula hasta llegar a sus labios, los cuales besaron el dorso de la mano de Sucrette. Se sorprendió pero ya ni siquiera intentó apartar su mano de la boca de Andrew.

Sucrette sintió a Andrew acariciar su mejilla y obligarla a mirarlo de frente.
Su mirada era tan profunda que no hizo nada cuando la besó.Fue un beso lento, sin forzamiento (aunque nunca lo hubo en realidad) y ya ninguno de los dos tenía ninguna duda sobre lo que quería hacer.

Poco a poco Andrew fue recostándola sobre la colchoneta, acorralándola entre la colchoneta y su cuerpo. Sus manos sujetaron las piernas de Sucrette y las colocó alrededor de su cintura.