Nat y yo estamos esperando a que empiecen las clases. Hemos llegado media hora antes, como siempre.
-Entonces...¿no vas a hablar con Cameron?-pregunta haciéndose la inocente.
La fulmino con la mirada.
-Vale, mejor me callo.
-Sabes que es idiota.-digo apartando la mirada.-Y que me hizo daño. No sé porqué sigues empeñada con eso.
Ella suspira y baja la mirada.
-Bueno...Sé que te parecerá raro,-hace una pequeña pausa.-pero creo que sí siente algo por ti. Tal vez me lo imaginé o fue por culpa del calor,-se rie nerviosamente.-pero cuando te dijo que no...Me pareció ver...algo en su mirada.
La miro seria y ella me mira a los ojos.
-Sé que para ti no significa nada, pero, al contrario que tú, yo soy una experta en "temas del amor"-dice haciendo comillas con los dedos.-Y sé que había algo...
Me quedo pensando un rato.
Sería genial que lo estuviese diciendo fuera verdad. Pero, aunque me duela admitirlo, es imposible.
Abro la boca para decirle que no la creo, qué seguramente ese día olvidó tomar sus pastillas. Pero, como siempre tan oportuno, suena el timbre y Nat tira de mí. Entramos a clase y nos sentamos una al lado de la otra.
Los alumnos terminan de llegar y el profesor empieza con la clase...lo normal.
Todo es tan aburrido...
Estoy casi dormida cuando alguien llama a la puerta. Esta se abre y entra...Oh, Dios. Le entrega una nota al profesor, me mira, sonríe y luego se sienta a mi lado.
Miro a Nat quien sonríe maliciosamente y hace un corazón con las manos.
La fulmino con la mirada.
-Cállate.-susurro.
Si, chicas. Habéis adivinado. El gran Cameron Boyce, probablemente el chico más popular y deseado que pueda existir, acaba de sentarse a mi lado. Probablemente la chica menos deseada y menos popular del mundo. Raro, ¿eh?
Nat levanta los brazos y me mira inocentemente. Luego se ríe en mi cara y vuelve su atención hacia el profesor.
Hago lo mismo y miro hacia la pizarra, pero no consigo concentrarme. ¿Alguna vez habéis tenido la sensación de que alguien os está mirando? Pues justo eso me está pasando y me dan ganas de estrangular a esa persona.
Por suerte para él o ella, no sé quien es.
Paso así el resto de la clase hasta que suena el timbre. Empiezo a recoger mis cosas y entonces noto como alguien me toca el hombro.
Me giro y abro mucho la boca.
-Perdona, ¿eres nueva?-pregunta Cameron.
No me ha reconocido.
Noto como se me encoge el corazón.
-Algo así.-respondo sin mirarle, con un nudo en la garganta.
-¿Cómo?-pregunta otra vez.-No tiene sent...
-Tengo que irme.-le corto.
Agarro mi mochila y salgo corriendo de ahí.
Sip...no se me da bien hablar con chicos...Al menos Nat me dejará de dar la lata con el tema de hablar con Cameron...Acabamos de hablar, eso cuenta, ¿no?...Nop...no va a colar.
Odio mi vida.
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¿Ahora si me amas? (Cameron Boyce y tu)
Fanfiction-Pero yo te amo. -¿En serio? Eso tiene mucha gracia, ¿sabes por qué? ¡Pues porque antes no decías eso! Antes yo no era para ti más que un estorbo; una chica pesada que no hacia más que estupideces. -Pero has cambiado...y sabes perfectamente como era...
