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11 • ∆Déjame∆

Michael sintió el alivio sentarle por completo, ¿al fin Luke había ido a salvarlo?

Mierda.

"Más vale que te quedes calladito." le besó en los labios y se levantó para abrir la puerta, Michael se tocó los labios, le dolían.

Escuchó voces jóvenes de la puerta y sintió una punzada de pánico, no era Luke.

Nick regresó, riéndose.

Ahora ya verás lo que te espera, Michael Clifford.

Mike se levantó de la cama donde estaba y trató de alejarse lo más posible del agresor, se sentía fatal, quería que fuera una pesadilla y que despertara para ir a la escuela.

"Mantente alejado de mí, Nick." le dijo enfurecido.

No será muy fácil.

El chico se volvió a abalanzar sobre Michael y lo tocó de un modo brusco, haciendo que éste soltara un grito ahogado.

"¡Michael! ¿Dónde estás?" se oyó al fin la voz del rubio; quien tocó la puerta fuertemente.

Vamos, debe de ser una broma.

"Michael lindo, ésto no se quedará así." se quitó de encima de él y se puso rápidamente la camisa mientras los gritos de Luke se hacían más fuertes cada vez más.

Vio al chico abrir la ventana y saltar a través de ella, maldito cobarde. Apretó las sábanas de la cama donde estaba y quiso morirse en aquél momento, vio su camisa en un rincón y se la puso.

La puerta se abrió y entró Luke desesperado, gritando el nombre de Michael al verlo parado de espaldas a él.

"¿Estás bien? ¡Te estaba buscando y no aparecías!...¿Qué tienes? ¿Michael, estás bien?...¿Por qué estás llorando?" se acercó a él y lo abrazó preocupado.

¿Por qué está así? ¿Qué tiene Michael?

"Quiero ir a casa." fue lo único que pudo musitar el chico.

"Pero ¿por qué? Dime qué tienes." insistió.

El teñido se limpió las lágrimas, tomó del brazo a Luke y salió lo más posible de allí.

Toda la casa seguía oliendo raro y nadie los veía, estaban perdidos en su mundo de bebida y música.

Cuando ya estaban afuera el rubio le dio su chaqueta y subieron al auto.

Pero qué tiene ¿por qué se comporta de esta manera?

"Michael..."

"Sólo llévame a casa." susurró con los ojos húmedos.

Luke se limitó a asentir y a manejar hacia la casa del chico.

Traía los pensamientos revueltos y el tan simple hecho de oírlos hacía que Michael sintiera deseos de abrir la puerta y salirse.

Cuando llegaron el teñido se sorprendió de que su madre aún no estuviera en casa.

"¿Me vas a decir de una vez por todas qué tienes?" dijo Luke con toda la seriedad del mundo.

Él no podía ocultar lo que sentía en ese momento, se sentía tan impotente por no haber sido capaz de detener a Nick por sí mismo, tuvo que esperar a que el gran héroe Luke llegara y lo salvara.

"Fue él, ese maldito hijo de puta." cerró los ojos dolido.

¿Quién? ¡¿De qué me está hablando?!

"¿Alguien te hizo algo?"

"Nick; amigo de John, de tu equipo."

Maldita sea.