Bonnie despertó en su cama, esta estaba fría como cada noche. Le costaba mantener el calor mientras duerme por lo que siempre acaba de esa forma.
El conejo encendió la calefacción y se acurrucó en las sabanas intentando recuperar el sueño sin embargo el sonido del timbre lo sacó de los brazos de morfeo.
Bonnie se levantó haciendo una mueca y maldiciendo por lo bajo a quien quiera que haya decidido molestarle.
Su visitante inesperado resultó ser freddy, uno de sus compañeros de clase. Eso sorprendió a bonnie, nunca habían hablado antes excepto por algunas palabras cuando caían en grupo o cuando se encontraban en la biblioteca.
Aún siendo poco más de las 11:00 bonnie puso su mejor cara posible para no ser grosero aunque no sabía que le había traído allí.
- ¿freddy? ¿que... Haces aquí? ¿buscas a alguien?
- a tí ¿debería buscar a otro?
- no... Solo que me ha sorprendido que vinieras a verme y...
- solo quería hablar... En privado -dijo mirando a su alrededor-.
- em... Sí, claro... Pasa.
- Gracias.
Bonnie se apartó de la puerta dejando hueco a freddy para que pudiera pasar luego cerró la puerta.
- ¿como sabes que vivo aquí?
- digamos que hay pocas hermandades masculinas, no me costó mucho encontrarte.
- ¿y... Que es lo que querías decirme?
- vayamos a tu cuarto mejor.
- vale.
Los dos subieron las grandes escaleras y giraron a la derecha donde se encontraba el cuarto de bonnie. Por el camino se encontraron a varios de los estudiantes que también vivían allí a los que saludaron.
Ambos entraron en el cuarto de bonnie y cerraron la puerta.
- hace frío aquí...
- sí... -dijo bonnie rascandose la nuca- el aislamiento de esta habitación es pésimo.
- ya veo.
- ¿de que querías hablar?
- ¿te han tocado?
- ¿eh?
- no me malinterpretes... Quiero decir que si te han tocado pero... Bueno... ¿eres un hell-touched?
- ¿que? ¡no!
- ¿bonnie?
- ¿solo has venido a acusarme de eso?
- te ví.
- ¿eh?
- Hace unos meses estabas en el comedor del campus y congelaste tu bebida por accidente aunque nadie le dió importancia por ser invierno.
- fue un descenso rapido de la temperatura...
- ¿solo en tu mesa?
- ...
- no te preocupes -dijo mostrando una marca en la parte trasera de su hombro- estamos en el mismo barco.
- ... No sabía eso.
- claro que no... ¿me enseñas la tuya?
Bonnie, después de un tiempo pensándolo decidió quitarse la camiseta decajando a la vista una marca con forma de copo de nieve. Esta estaba situada en su pecho, justo en la posición del corazón. El pelaje alrededor de la marca estaba congelado y cubierto de escarcha. Después de unos segundos Bonnue volvió a ponerse la camiseta.
- ¿cual es el punto de todo esto? -dijo cruzado de brazos-.
- pues ayudarnos el uno al otro.
- no creo que sea buena idea, si nos descubren nos ejecutaran a los dos.
- pero podemos defendernos si somos 2.
- al menos se que debo tener mas cuidado -se acuesta en la cama-.
- ¿como te ocurrió?
- ¿eh?
- ¿como te tocaron?
- no me "tocaron" como tu dices... Es innato.
- ¿en serio?
- si, mi madre tuvo que apañarselas para ocultar el toque.
- ...
- ¿y tu que? -dijo mirandole- ¿como recibiste el toque?
- tormenta... Fui estúpido como para salir a fuera con un paraguas. Me cayó un rayo y morí... Luego desperté a los 3 días pudiendo lanzar descargas por las manos.
- infamous.
- algo así.
- nunca había conocido a un hell-touched... En persona quiero decir.
- eso nunca lo sabes... Tu y yo pasamos desapercibidos ¿quien sabe cuantos de los que vemos diariamente han sido tocados.
- da igual, no me importa saberlo -mira al techo-.
- oye... ¿quieres ir a tomar algo?
- ¿hmmm?
- ya sabes...
- ¿me estas pidiendo una cita?
- solo digo que...
- no hace falta que te expliques -se baja de la cama- será mejor que finjas ser mi novio, o los demas sospecharán de tu visita.
- no quiero que crean que soy gay...
- solo seras bisexual un momento, tomame de la mano y ya esta.
- ... Vale.
Los dos salieron de la habitación de bonnie agarrados de la mano. Juntos recorrieron el edificio hasta que salieron de allí, entonces se soltaron.
- ¿ves? No ha sido tan dificil.
- casi muero de vergüenza.
- da gracias a no morir en la silla eléctrica.
- -suspira- ¿a donde vamos?
- hay un café al que suelo ir.
- esto me da mala espina.
- no es un sitio de quedada para follar si temes eso.
- yo no... Bueno.
- tan solo sigueme.
- si...
