Siempre igual. No quiero existir. Siempre dije, digo y diré que hubiera sido mejor que no me hubieran metido en la incubadora aquellas dos semanas por nacer muerta. Si yo no estubiera aquí, el mundo sería exactamente el mismo o quizá mejor. Todo el mundo me viene de buenas a la cara pero a la miníma que me giro ya me estan insultando, vacilando o criticando.
Llegué al instituto por primera vez y todos me miraban con caras raras. Me daba miedo cagarla ya que era el primer año. El primer trimestre me fue muy bien pero al volver de las vacaciones de navidad...
Empezemos el instituto de nuevo (después de navidad) y me cree una red social llamada ''ask'' y todo el mundo por anónimo me decían cosas muy feas. Yo intentaba ser fuerte y estube un tiempo pasando de todo lo que me decían hasta que llegó ese día... el día en que me hundi. Me dolía mucho todo lo que me decían porque era sobre un tema muy delicado... era sobre mi madre.
Yo no conocí a mi madre nunca y tampoco quiero conocerla. Mi padre me contó que ella me había abandonado por culpa de las drogas, pero yo no me lo creí hasta que vi una carta sobre el juzgado donde lo explicaba todo. Sin que se enterara mi padre, cogí el sobre y me puse a leerlo. Me derrumbe. No quería verla nunca en mi vida, pero es que nunca.
Pasó un tiempo y las criticas por el ''ask'' seguian y yo cada día me hundia más. No sabía que hacer, me quería morir así que estube por cortarme las venas. Cogí un cuchillo y cuando me lo puse en la muñeca entró mi hermano pequeño de 6 años, cosa que tenía 3 años cuando pasó eso. Me miró llorando y me empezó a decir que no me hiciera ''pupita'' así que le miré, me puse a llorar y solté el cuchillo. Aquel día no pensaba en nada más que en morirme.