Sobrevivir.

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- Ten hijo, come algo, por favor.

El menor solo agitó la cabeza en negación, su padre ya no estaba, una día antes habían recibido -su madre y él- una carta de las fuerzas militares Inglesas "Muerto en acción", tres simples palabras que tenían el poder de derrumbar a una familia entera.

-¿Por qué papá tuvo que ir a la guerra, mamá? Él siempre me dijo que la guerra era algo terrible.

¿Cómo explicarle algo así a un niño de tan solo 7 años? Para su madre, era muy difícil encontrar las palabras adecuadas para explicarlo. A su esposo le habían obligado a luchar en aquella guerra, ¿cómo decirle eso a su pequeño?, quizá debía decirlo tal cual, después de todo, Zayn de una u otra manera lo averiguaría, el mundo ya no era como lo habían conocido, él no tendría una infancia como ella la tuvo, tendría que madurar antes de lo debido, ahora su vida sería bastante dura.

- Zayn, en este mundo hay dos tipos de personas, las que hacen el bien y las que hacen el mal; en nuestro mundo hay pocas personas buenas, y tu padre fue una gran persona, él nunca decidió dejarnos hijo, nunca decidió ir a esa guerra, nunca quiso matar a nadie, es solo que... - La voz de la pobre madre se había quebrado - las personas malas se lo llevaron.

El llanto de la pobre mujer fue inevitable, un recuerdo demasiado doloroso había inundado su mente, el recuerdo de los policías entrando a su casa sin permiso alguno, los gritos de un niño asustado sin tener la menor idea de lo que pasaba y aquella madre tratando de calmar a su hijo mientras estos se llevaban a su esposo.

Yaser fue elegido en un sorteo que se realizó secretamente tras las puertas del gobierno de Inglaterra, él y otros 100 000 hombres y mujeres fueron elegidos para defender a su patria en la Tercera guerra mundial. Ninguna de las familias de estas personas estaba lista para esta decisión ¿Quién lo estaría, en realidad?

Después de unos minutos de silencio y lágrimas, el pequeño comenzó cuestionar a su madre.

- Mamá ¿Quiénes son las personas malas?

Trisha secó su rostro y decidió evadir esta pregunta, no podía responderle, no quería que su hijo tenga una idea de enfrentarse ante la Nueva Orden por la muerte de su padre cuando crezca.

- Vamos hijo, termina tu comida, debemos terminar de empacar. - Se dedicó a terminar su almuerzo, Zayn no insistió más, luego de esta respuesta.

El gobierno único, se encontraba ya reorganizando a la población, dividiéndola de acuerdo a sus clases sociales. Ese era el último día que Trisha y su hijo pasarían en la casa dónde habían vivido todos esos años.

- ¿Qué debo empacar, mamá?. - Preguntó el pequeño.

- Solo las cosas importantes cariño, tus recuerdos. - Dijo la mujer.

- No entrará toda mi ropa en mi mochila. - Comentó, preocupado.

- Ropa no, allá nos darán todo eso, sólo guarda las fotografía hijo y las cosas que te vayan a traer buenos recuerdos en un futuro. - Le dio una pequeña y cálida sonrisa, para después salir de la habitación.

Zayn entendió, ¿qué cosas querría llevar por siempre? Las fotografías de su papá, de sus abuelos, de sus amigos, su libreta de dibujo, sus colores, el collar que su mejor amiga le regaló un año atrás y su muñeco de acción con el que siempre hablaba cuando se sentía sólo. Un día antes, un militar les informó a toda la población que solamente debían empacar objetos sentimentalmente valiosos. No necesitarían nada más, la ropa representaba la diversidad en el ser humano y eso no se podía permitir en esos tiempos, la vestimenta igual para todos, eso era lo apropiado.

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⏰ Última actualización: Sep 24, 2015 ⏰

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