Solo una misión más...

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Episodio 6:

Jake no dejaba de golpear la puerta de Sherry, sabía que había metido la pata hasta el fondo pero jamás imagino causar tal efecto en la rubia. Demonios, la culpa se lo comía vivo. Sabía del daño que le había causado, le hiso trizas el corazón y ahora bromeaba respecto a cuando estuvieron juntos ¿Acaso le pagaban por ser idiota? ¡No!

-Sherry, ábreme por favor... -pidió con sutileza-

-Déjame, ya pasó.

-Abre Sherry, no quiero romper la puerta. -habló molesto-

Entonces vio como la pequeña silueta de ella se asomaba, tenía sus ojos un poco hinchados y rojos. Ella sonrió, entonces el se perdió en ella, tan perfecta, tan ella. Su Sherry, suya, diablos, había sido un completo imbécil.

Suspiro volviendo a la realidad y de un impulso, abrió la puerta y la atrajo hacía el, abrazándola, envolviéndola en sus brazos. Su cuerpo se sentía tan frágil, tan pequeño ante él.

-Perdóname super chica... -murmuró causando que ella se sorprendiera- Perdóname por todo.

Sherry quiso decirle que todo estaba bien pero parecía que su cuerpo no quería obedecer-le por lo cuál no pudo pronunciar ni una palabra. Sintió ganas de llorar, estar así nuevamente en los brazos de el, le producía daño, felicidad. Demasiadas cosas juntas.

Se armó de valor y se separó de el. Acaricio la mejilla de Jake y se alejó. Jake solo suspiro desganado, finalmente se había decidido, iba a recuperar a Sherry a toda costa. Sabía que sería una misión difícil pero haría de todo por ella.

Notó cuanto lo había necesitado, cuanto ella le había extrañado. Le dolía el pecho de imaginar lo que ella había sufrido por su culpa. Fue tras Sherry y la encontró en la cocina por cocinar algo.

-¿Sucede algo? -preguntó ella notando su presencia-

-No, quería ver que hacías.

-Pues tengo hambre ¿tu? -respondió ella-

-También. ¿Qué harás? -se atrevió a preguntar Jake-

-Pensaba hacer una tarta de verduras. ¿Gustas? -el asintió, Sherry cocinaba muy bien-

-Te ayudare.

Así ambos cocinaron mientras hablaron. Jake le contó de toda su aventura desde que la dejó y ella también le contó algunas cosas, como que tenía una gran amistad con Piers Nivans. Así Jake se entero que era el hermano del chico que murió en China. También sintió celos de ella.

-¿Osea que es como tu pareja? -preguntó Jake, ya en la mesa-

-No, solo salimos. Somos mejores amigos. -dijo ella como si nada- Piers es muy atento conmigo.

- Que bien, traes a todos detrás de ti. -gruño Jake- Primero Trevor, ahora el tal Nivans... ¿falta alguien Sher? -preguntó con sarcasmo, claramente molesto-

-Jake no te entiendo. ¿Me estás celando? Tu me dejaste... -respondió molesta- Me abandonaste, igual que mis padres.

-¡Tenía trabajo que hacer! Te quejabas que era un vago, pues conseguí trabajo. -reprochó el-

-Una nota Jake, al menos hubieras dejado una nota. No tengo nada con nadie ¿va? Esta visto que no puedo ser feliz con nadie, mi destino es quedarme sola ¡Ya lo entendí! -dicho esto ella se levantó- Con permiso.

Jake nuevamente había quedado sin palabras, no podía decir nada. Sherry tenía razón, el no se tomo la molestia de siquiera despedirse, simplemente se fue, olvidando que tenía una hermosa relación con la rubia. No continuo comiendo y tiro las sobras a la basura, apenas y llevaban unas horas conviviendo y ya era todo un desastre. Suspiro desganado, si quería reconquistar o al menos mejorar las cosas con Sherry debía mejorar las cosas y evitar sus comentarios estúpidos. Sin más, el pelirrojo lavo los trastos y se fue a lo que era su habitación.

Sonrió con nostalgia al ver que esa habitación era la que compartían anteriormente con Sherry, por lo visto la rubia había decidido ocupar ahora la habitación de huéspedes evitando permanecer en esa.

"Sherry... aún te amo."

Con ese pensamiento en su mente, el joven de ojos grises se durmió. Sherry en su habitación observaba detenidamente el techo de las cuatro paredes donde se encontraba, se sentía mal, derrotada. No sabía cuanto tiempo iba a poder aceptar el estar tan cerca de el, sonrió con nostalgia al pensar que el la heria pero el también era el único que podía consolarla.

Al otro día, Sherry despertó y se dirigió al trabajo dejando-le el desayuno hecho a su inquilino. Tuvo que tomar un taxi hasta la sede, había dejado su auto en el estacionamiento privado de la DSO. Al pasar las puertas del gran edificio se topo con la nueva.

-Hola Sherry. -saludó la pelirroja-

-Hola Genesis. -dijo mirándola-  ¿Qué haces tan temprano aquí? 

-Entrenamiento. -contesto la colorada- ¿Tu?

-Trabajo.

Sin más la rubia emprendió rumbo a la oficina de Leon, al entrar lo saludo con un cálido abrazo.

-Tienes ojeras mi niña. ¿Qué ha sucedido? -pregunto preocupado-

-Es difícil vivir con Jake. ¿Por qué no se me aviso de esto?

-Fue una decisión de ultimo momento. Yo no estaba de acuerdo, pero que más da. -suspiró- Lamento que tengas que pasar por esto.

-No, esta bien. Es solo una misión más. -respondió sonriente la rubia- ¿Ya están los informes?

-Sí, es una sepa nueva de las plagas. Son por así decir un tipo de plaga 4, más poderosa y agresiva. 

-Valla, agradezco el que hayamos actuado a tiempo. -dijo Sherry.

-Espero que haya sido así y se acabe esto.

Continuara :3 

Otra vez tu... (JyS) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora