La leyenda del colgante

La elegida

Hola, mi nombre es Isabella, os describiré un poco cómo soy, soy una chica normal de pelo rubio y ojos azules verdosos, vivo en Madrid con mi padre aunque nunca está en casa, me encanta leer y soy bastante bajita.

Nunca he sido una persona muy sociable y siempre acababa sola. Nunca expresaba mi opinión por el miedo de lo que dirían y al final hacia lo que ellos querían. Eso hacía sentirme triste, pero no perdí la esperanza.

Cuando empecé el instituto, me lancé y hablé con una chica de mi clase.

Esa chica era Sofía, mi actual mejor amiga. Desde ese momento, nos volvimos muy cercanas hasta tal punto de ser inseparables.

Ella siempre está ahí para mí y me defendía de los que me acosaban.

Sofía es una persona muy abierta, que hace siempre sacarte una sonrisa. Ella es más alta que yo y tiene el pelo largo de color castaño y unos ojos de color miel.

Ella era muy popular en el instituto ya que se llevaba bien con todos y además era muy hermosa.

Ella hizo que consiguiera más amigos y que me volviera más popular.
Hizo que dejará de esconder mi verdadero yo para poder ser yo misma y expresar mi opinión.

Sofía y yo quedábamos todas las tardes para hablar de nuestros sueños, a veces de chicos, aunque nunca hemos tenido novio y también hacíamos muchas tonterías.

Nos lo pasamos muy bien juntas.

Recién he terminado el instituto y mi mejor amiga y yo estamos intentando cumplir nuestro sueño de estudiar en Londres. Hemos estado planeando esto por años.

El día que tanto habíamos esperado había llegado.

-Hola, Isabella ¿te ha llegado la carta? -dijo Sofía

-Sí, pero aún no la he abierto ¿a ti te ha llegado?

-Sí y tampoco la he abierto. Estoy tan nerviosa que podría crear un terremoto con mis temblores- dijo

-Yo también estoy muy nerviosa ¡Vamos a abrirla juntas! - exclamé

-Vale

-Ojalá que nos hayan aceptado- dije con voz temblorosa

Empezamos a abrir el sobre.

Mis manos temblaban tanto que me costó abrirlo.

Saqué la carta y leí su contenido.

Enhorabuena ha sido aceptada en nuestra Universidad...

Cuando lo leí me emocioné tanto que de mis ojos se escaparon algunas lágrimas.

Miré a Sofía y estaba llorando al igual que yo.

Le enseñé mi carta y ella me enseñó la suya.

-¡Nos vamos a Londres! - exclamó Sofía

-Nuestro sueño se va a cumplir. Llevamos tanto tiempo deseándolo que aún no me creo que sea verdad- dije emocionada

-Estoy igual. Tengo que irme a casa a preparar las maletas y tú deberías hacer lo mismo. Adiós

-Eso haré. Adiós - dije

Estuve dos horas pensando que me iba a llevar, de lo emocionada que estaba no podía pensar bien y estuve 1 hora más colocando la ropa en la maleta. En la maleta metí mi ropa favorita y lo necesario para el viaje.

El vuelo salía mañana por la noche.

Estaba tan nerviosa que no podía dormir.

Al día siguiente fui a despedirme de mis amigos del instituto y después fui a ver a Sofía.