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En un hermoso bosque, donde habitaban muchos animales, y habían diversos tipos de flores, se encontraba una mesa larga con cuatro sillitas alrededor. En tres de estas cuatros sillas estaban peluches, y la última estaba vacía, ¿La razón? No había una.
De pronto, hubo como un temblor. Las sillas y la mesa temblaban de manera rápida mientras en el suelo lleno de tierra y pasto, se hacía un gran agujero. De éste salió una pequeña, de cabello rizado rubio y con vestido de color azul algo elegante.
La pequeña comenzó a correr después de haber salido de aquel agujero. Cruzó el bosque hasta llegar a una pradera donde había algunos hogares.-¡Padre, padre!
Comenzó a gritar la chiquilla mientras corría hacia una gran casa de color verde pistacho. Al llegar a esta comenzó a tocar la puerta con una fuerza tremenda.
-¡Padre, abre! Soy yo, Rain.
Continuó tocando hasta que un hombre mayor abrió la puerta, y miró a la pequeña.
-¿Rain?
Preguntó mientras la rubia comenzaba a decir maravillas sobre lugar donde había estado durante 4 meses.
-¡Padre! Estuve en un lugar muy hermoso. Todo comenzó con un conejo blanco y precioso, este me llev....
-Rain, ¿eres tú?
Paró de hablar al notar que su padre había dicho algo.
-¿Quién más podría ser?
Rió la pequeña, y se quedó parada observando el rostro pálido de su padre.
-Pensamos que tú...
Mencionó el señor con la voz quebrada, y la niña hizo una mueca de confusión.
-¿Pensaron que yo, qué?
............
-Sr. Modd, su hija esta loca. Esta delirando. ¿Una oruga que fuma, un conejo blanco, una reina de corazones malvada y que cambia de forma al comer o beber algo? Eso no es normal.
Aseguró el psiquiatra que estaba platicando nerviosamente con el padre de Rain. El señor Modd estaba realmente confundido, su hija nunca mentira, y menos en este tipo de ocasiones.
-Rain nunca mentiría. Pero, no le puedo creer. Sobre paso el límite, esta perdiendo mi cordura.
Mencionó alterado. Por el otro lado, la pequeña tenía su oreja sobre la puerta escuchando cada palabra que decían.
-No estoy loca, y se los probaré.
.........
*10 años después*La joven Rain de tan solo 20 años se hallaba en el asilo para enfermos mentales 'BreatheHeart'. Su padre aún dudaba de ella, creía que aún estaba loca, pero nunca lo estuvo. Cada detalle del lugar donde había estado era realidad.
En ese lugar sólo se escuchaban lamentos de los enfermos y gritos. Ella ya no aguantaba esta ahí, le dolía que su propio padre creyera que era una enferma mental. Mientras se hallaba en su celda durmiendo, se escucho que habrían la puerta de esta.-¡Arriba, Modd!
Gritó el enfermero. La chica de levantó y mordió su labio, caminó fuera de la celda para recorrer los pasillos hasta llegar a la oficina de su psiquiatra.
Al llegar ahí tocó la puerta, se escuchó un 'pase' y la chica entró.-¿Qué quieres ahora?
Preguntó la rubia y se sentó en la silla de madera mientras mostraba seriedad en su rostro.
-Quiero hablar de el país de las maravillas. De ese hermoso lugar del cual hablas desde que eras niña.
Respondió el psiquiatra. La chica apretó su mandíbula, y sus ojos se llenaron de lágrimas.
-¿Qué quieres saber al respecto?
La joven, atormentada, se adentró a sus pensamientos más profundos, así pudiendo recordar a la malvada reina.»-Atrapen a esa chica y ¡Córtenle la cabeza!
Gritó la reina mientras observaba como Rain corría adentrandose al laberinto. Estando ahí, comió un poco de malvavisco y cambió de tamaño. Ahora era mucho más pequeña, en ese instante, se escondió dentro de los arbustos y se quedo ahí por unos minutos mientras veía como la buscaban los guardias.«-----
No me juzguen por esto, soy primeriza :(.
Haré los capítulos por partes ya que mi imaginación esta súper mala estoy días.Voten, comenten y agreguen a su biblioteca, por favor.
Todo el amor, Lallhyduaa.
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❝Rain in Wonderland.❞ ; h.s
Fantasy“Mi cabeza sigue atrapada en el país de las maravillas”. [Historia de mi propiedad. No se aceptan adaptaciones de ningún tipo].