25. Killian

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Oficialmente soy el peor amigo del mundo. En cuanto digo las palabras quiero retractarme pero al ver la expresión de Audrey, lo único que quiero hacer es abrazarla y nunca apartarla de mi. En este momento, realmente no se que hacer.

¿Qué se supone que debo hacer en estos momentos? ¿Cómo puedo decidir entre mi mejor amigo y mi novia? Odio que la respuesta sé me venga tan fácilmente a la cabeza. Obviamente a Audrey pero es una acusación muy seria y Willow dice que no es así ¿Que significaría para ella y para mí, si escojo a Audrey? De por si no se lo que significó lo de ayer para mí cuando Audrey...

Niego con la cabeza. No es el momento de pensar en lo que sucedió ayer entre ella y yo. Recuerdo lo que sucedió hace unos minutos y mi pecho duele al recordar el rostro de Audrey al haberle dicho que no podemos ser amigos. Mi lengua se trabo al intentar decirle eso, mi garganta se secó, no podía respirar. Mi cuerpo entero estaba en contra de esa oración. Me detengo al pensar en lo idiota que soy.

Audrey significa todo para mí. Lo que sucedió ayer, no se lo que siento, realmente estoy confundido pero ¿Perder a Audrey para siempre? No puedo vivir ni tres segundos lejos de ella y mucho menos por algo tan estúpido como una chica a la que ni siquiera se si todavía amo como creí hacerlo.

-Aguarden-les digo a Willow y a Chuck-Sé me ha olvidado un cuaderno, entren al auto-me doy la vuelta, corriendo al lugar en donde lastime a mí mejor amiga ¿Audrey me perdonará? ¿Qué significará para nosotros? Ella sigue con Jude, y yo con Willow. A ninguno nos gusta pero no puedo obligarla a terminar con Jude ¿Me escogerá a mí después de todo el daño que le he hecho?

Me detengo abruptamente al ver la escena que está frente a mí. Doy un paso atrás he ignoro la punzada que siento en mi pecho. Jude besa a Audrey con tanta pasión y ella no se separa de él.

Retrocedo lentamente olvidando todo lo que tengo en mi mente. Es lo mejor. A veces, es mejor dejar ir a alguien para que sea feliz, aunque ya no forme parte de tú vida. Si ella es feliz con él, entonces, yo debo ser feliz aunque me sienta totalmente vacío por dentro.

***

Willow

Al entrar a casa, lo único que quiero es llorar. He ganado pero ¿De qué sirve si perdí a Jude en el proceso? El no me ama.

Me detengo al ver a papá observándome. Sus ojos están rojos y suelto un suspiro. De nuevo borracho.
Lágrimas salen de mis ojos sin poder evitarlo y contengo los sollozos que están por salir.

Odio mi vida. Mi madre murió por el estúpido cáncer. Me quedé sola con un alcohólico como padre. Prácticamente me tuve que criar sola. Las únicas personas que han estado a mi lado son tío Parker y Jude pero ahora...ni siquiera tengo a Jude ¿Por qué esta tiene que ser mi vida?

-Willy-murmura papá al ver mis lágrimas y se acerca a mí tratando de abrazarme

-Aléjate papá-digo con asco al oler su aliento a cerveza-No quiero hablar con nadie en este momento.

-Willy...-murmura viéndome con tristeza. Odio ese apodo. Me recuerda a la vida que tenía antes. Una mejor vida. No la porquería que tengo ahora. Me recuerda a mamá. Me recuerda que no todo fue difícil.

-¡Basta, papá!-le grito molesta-¡No quiero hablar con nadie! ¡Y menos con un patético alcohólico como tú!-suelto un sollozo-¡Eres tan patético! ¡Me da pena ser tu hija!

-Willow-dice él furioso, viéndose un poco sobrio.

-Mamá murió papá, debes superarlo. Sucedió hace mucho tiempo. Ella no está aquí, pero yo si y es como si no te importara-le espeto-¡Mamá estaría avergonzada de ti!-le grito-Me dejaste sola, me tratas como si no fuera tu hija, como si fuera solo tú sirvienta ¡Te odio!-él retrocede un paso-Y en cuanto me gradúe ¡Me iré lejos de esta maldita casa y de este maldito infierno!-no lo veía venir. Si mano se levanta y vuela tan rápido a mí cara que cuando choca con mi mejilla, siento al instante el agudo dolor. Me tambaleo hacia atrás y caigo contra el suelo golpeando fuerte mi cabeza. Mi visión se vuelve negra por unos segundos pero parpadeo rápidamente para que se aclare mi visión.

Me levanto, ignorando el dolor en mi mejilla y lo veo.

-Willow-dice papá llorando con fuerzas. Trata de acercaste a mí pero me alejo-Lo siento, yo no...lo siento tanto, hija-suelta un sollozo mientras se arrodilla frente a mí, yendo hacia mis pies, abrazando mis piernas mientras llora descontrolado. Me repite una y otra vez cuanto lo siente hasta que no puedo soportarlo.

Me aparto de él corriendo a mí habitación y cierro la puerta con llave. Comienzo a llorar furiosa frente a mí espejo. Papá nunca me había golpeado, ni siquiera cuando mamá estaba viva. Sé que no fue su intención, sé que todo lo que dije no debí decirlo. Estaba molesta y amo a mi padre pero ya no puedo. Ya no puedo seguir viviendo aquí, siendo miserable.

Me veo en el espejo y frunzo el ceño cuando noto que un gran moretón está naciendo en mi mejilla y mi frente. Suelto un suspiro calmándome y de pronto sonrío a mí reflejo al tener la idea perfecta para pedirle el dinero a Killian.

Una Elección Inesperada ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora