Capitulo 2

639 30 0
                                    

Las olas chocaban con tranquilan en la arena de la playa, al igual que la pequeña isla estaba tranquila alguna pequeñas embarcaciones anclaban solo para buscar provisiones aunque no era un paraíso de isla era por lo menos para algunos hombre donde encontrar comida y agua en grand line un tesoro para muchos.

En lo mas adentro de la isla una joven de unos 15 años cabellera roja amarrada en una coleta alta caminaba tranquilamente por un pequeño sendero, su vestimenta constaba de una especia de pantalones anchos de color beige en cintura estaba amarrado un abrigo y en la parte de arriba una pequeño top negro. Su camino siguio un buen rato hasta llegar a una especie de cabaña abandonada pero a su alrededor algunos hombres armados y con apariencia algo misteriosa reguardaba el lugar.La chica seguio caminando aun asi teniendo la atención de algunos hombres que posaban su ojos en el cuerpo de la joven aunque solo tenia 15 ya su cuerpo ya empezaba a tener cierto volumen en la parte de arriba.

Llego a la puerta y al abrirla otro hombre como de unos 28 a 30 años estaba con una especie de carpeta en sus manos. Su cuerpo era atlético se mantenía en forma por así decirlo, su cabello gris y aquellos ojos rojos le daban un aspecto misterio pero aun así tenia facciones que le daban algo de ser amable

-Ohh... Ya llegaste- Dijo aquel hombre al ver la joven de cabellos rojizo

-Ellenabeth-san esta?- Pregunto

-Mmmm.. como veras aquí ya no esta.Ya se escapo- Se quejaba aquel hombre

-Ok.. entonces ire a buscarla- dijo dando así la medie vuelta para regresar por donde vino.

-Espera-

-Ehh?-

-Entregale esto acaba de llegar.- Hablo aquel hombre mientras le entrega una carta a la joven

-Vale adiós- Se despidió tomando lo que el hombre le había dado al igual esta empezaba a caminar por donde había llegado.

En lo mas alto de una montaña en donde se podía ver toda la isla se encontraba una mujer de una figura curbilinia su largo cabello castaño se movía al compás de la brisa al igual que este le daba suaves caricias en su tercia piel de nieve, su vestimenta costaba de un shorts color negro y una camisa con capucha que se moldeaba a su cuerpo y para culminar su estilo llevaba una botas altas que llegaban un poco mas abajo de la rodilla.

Sus ojos cerrados solo disfrutando de la brisa, recordando y divagando en su mente aquellos días en que podía sentir el fuerte viento del mar sobre su mejillas sentir que su piel blanca se tomaba un leve bronceado por estar todo el día en la cubierta del barco extrañaba eso.Lo que la así sentir libre y sin limitaciones, pero, eso cambio abriendo sus ojos para así poder observar lo que tenia al frente de ella el mar. Sus ojos café se posaban en las olas que chocaban con suavidad en la arena, haber recodado todo aquello solo pudo posar su mano derecha a la parte interna de su antebrazo izquierdo solo apretó con fuerte su antebrazo que era cubierto por un guante que llegaba un poco mas arriba de codo pues lo que ella deseaba esta lejos.

-¡Ellenabeth-san!-

Aquel llamado del ella la hizo volver a la realidad nuevamente olvidando por completo su pasado. La joven se voltio para reconocer a la persona que gritaba su nombre, solo pudo dar una leve sonrisa sabia quien se acercaba.

-Ellenabeth-san así que estas aquí!- Dijo alegremente una joven de cabellos rojizos mientras reía con alegría al encontrar a la persona que buscaba ya hace rato.

-Daria-chan!- Solo se mantuvo a decir su nombre aun manteniendo la leve sonrisa en sus labios.

-Ya esta listo!- Hablo la joven al acercase hacia en donde se encontraba Ellenabeth y así observar el panorama.

-Vaya....... así que ya listo-

-Si solo falta que usted haga las pruebas y listo por completo- Decía emocionada la joven de solo quien años pues sabia que la única que confiaba en su habilidades era ella, mientras la chica llevaba sus manos a los bolsillo siento algo extraño en unos de ellos y recordó aquella carta que le había entregado ese hombre de la cabaña abandona.

-Por cierto esto es para usted Ellenabeth-san- empezó a decir mientras sacaba aquello importante para ella.

-Te lo entrego Zero?- Pregunto al tomar la carta.

-Si dijo que era impor....-Pero antes de terminar su frase vio como la joven abría la carta y comenzaba a leerla.Al igual que un simple instante vio como su compañera cambiaba su sonrisa por una cara de asombro.

-Es..to... sii...-

La joven no entendía lo que pasaba esto era extraño jamas habia visto a Ellenabeth tan asombrada por una simple carta siempre que la veías solo mostraba fastidio pero esta vez era diferente.

-Oye ese tipo esta allá verdad?- Pregunto Ellenabeth a Daria con rapidez.

-Si..au... - Pero otra vez había interrumpido sus frase ya que Ellenabeth empezaba a correr así hacia una piedra para así tomar una espada que reposaba en ella.

-Daria-chan.... prepara todo pronto partiré- Grito mientras corría y se alejaba mas y mas de la joven muchacha al igual que colocaba en su espalda aquella espada pero en una extraña posición el mango esta en la parte baja de su espalda y la punta sobresalía de su espalda la llevaba al revés.

Daria solo pudo dar un suspiro sabia bien que esa mujer era un total desastre siempre hacia lo que ella quería, ella era así.

-Muy a seguir trabajando-

***

Anclando su medio de transporte un hombre de una barba corta y patillas, de altura. aproximada de 1,98 caminaba lentamente su vestimenta eran ropas adornadas de negro y rojo, en su pecho posaba un colgante en forma de crucifijo, en su cabeza tenia un un sombrero de ala ancha adornado con una gran pluma al igual que en su espalda posaba una gran espada en forma de cruz.

Con solo verlo mostraba poder y una seriedad que determinaba sus ojos aquellos ojos penetrante solo se diria a verse con ella sabia que ya tenia que saber lo que ya había pasado con su otra contratarte.

Lo IndeclinableDonde viven las historias. Descúbrelo ahora