CAPITULO VI. DECISIONES Y ACERCAMIENTO
Al quedarse solo en la habitación Severus recordó la conversación con Hermione. Se puso bastante celoso cuando la escucho decir de forma encubierta que tuvo un encuentro muy cercano con su novio. No le había dicho hasta donde llegaron, y la verdad no quería saber. Trato de controlar su expresión lo mejor que pudo, y al parecer fue suficiente, ya que ella no se cerró y siguió conversando con confianza. Era demasiado inocente todavía para entender todas las repercusiones de sus actos, demasiado inconsciente en ese sentido; y como se le pudo ocurrir permitir tanta intimidad para descubrir sus verdaderos sentimientos y aclarar sus ideas, es que estaba loca. Hacer eso con un novio adolescente y hormonal era tan similar como jugar a la ruleta rusa, pudo salir muy lastimada. Esperaba que el susto que se había llevado, porque se notaba y lo demostró con su huida, fuera suficiente escarmiento para que no se le ocurriera volver a hacerlo jamás. También estaba el otro asunto del misterioso hombre que ahora la atraía y causaba o quizás aumentaba sus dudas; no le confirmo abiertamente que existía, pero su cara al preguntarle lo dijo todo.
No pudo evitar imaginarse a Weasley tocando el cuerpo virginal de la mujer que quería, y a ella correspondiendo sus caricias, hasta que algo la asusto lo suficiente para detenerlo. Pero que la había aterrado; quizás fue el darse cuenta que sus sentimientos no eran lo que creía; quizás la inminencia de su primera vez (porque estaba seguro que era virgen) en una situación inadecuada, y con el hombre equivocado; quizás el idiota fue tan torpe que no pudo provocar su deseo y placer, el suficiente para ser más fuerte que el miedo normal que estaba sintiendo, llevándola a entregarse, incapaz de negarse al pedido de su cuerpo sin importar el amor que sintiera o no por él. Pudo ser una mezcla de todos. Al menos, para su alivio, no llegaron a consumar la relación; si estaba arrepentida con el inicio del sexo, ahora estaría devastada de no haberse detenido. Y sin embargo había algo más.
Habían intimado. Que tanto del inicio o del final se encontraban cuando pararon, no lo sabía, pero su cara de repulsión al decir que lo permitió y luego negar llegar al final, solo podía indicar que lo que fuera que su novio le hizo, no le gusto. Imbécil mocoso, era su primera experiencia, estaba seguro, y se la había arruinado. La introducción al placer debía ser cuidadosa; el hombre debe priorizar las necesidades de la mujer por encima de las suyas, siempre, pero especialmente cuando ella no tiene experiencia y no sabe que esperar o que va a sentir. Dudaba que no hubiese estado desesperado por llegar a la meta, y se mostrara dulce y paciente, dejándola encontrar el ritmo para que todo fluyera naturalmente. Y sentía curiosidad por saber cómo pudo detenerlo; un hombre adulto se puede controlar si le dan el alto, pero un chico era otra cosa, no sabían hacerlo usualmente; lo que se traducía en que o bien había sido decente conteniéndose contra todo pronóstico dejándola marchar, ó, realizo algún tipo de acto para satisfacerse con ella; lo cual podría ser otra explicación a su expresión de asco.
"Si ese infeliz la forzó a permitir algo solo por su necesidad, recibirá un duro escarmiento. Tengo que hablar con ella. Si solo puedo tener su amistad, no la voy a rechazar y arruinarlo como hice con Lily, no la voy a apartar de mi lado".
Aunque apartarla de su vida fue lo primero que pensó cuando vio la foto en el periódico, cuando fue a verlo ese día no pudo hacerlo. Había decidido que en el hipotético caso de que fuera, la correría de la habitación dejando muy claro que no quería ser molestado por ella en el futuro, y si no sucedía, se encargaría en el colegio de poner suficiente distancia entre ambos. Era lo que pensaba hacer cuando ella entro, pero sus planes se desmoronaron al oír su voz. Primero lo detuvo su semblante contrariado y lleno de culpa; lo segundo la sinceridad de sus respuestas cuando la confronto por su ausencia; y lo tercero, el descubrimiento de sus actividades de pareja con sus desastrosas consecuencias, sus dudas, el dolor por la desaparición de sus padres, y sobre todo el saber que le importaba y le interesaba lo suficiente como para pedirle su amistad.
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El Cielo Tras el Infierno
FanfictionPareja: Hermione Granger, Severus Snape (Sevmione) Ambientada en el mundo Harry Potter, con el uso de sus personajes. Inicia tras la última batalla. Solo me pertenece la historia Género: Romance, Drama, Tragedia. Categoría: R18+. Alto contenido sex...