|Capítulo 7|Sofía
Estoy en el colegio en busca de Luck, espero poder explicarle todo lo que había pasado, hacerle entender que no es lo que cree, pero no lo encuentro – ya he recorrido casi todo el colegio - ¿Dónde está? Realmente me afecta demasiado, se me hizo muy raro que él se vaya así, que reaccione de esa manera sin oírme, en el trascurso del día de ayer, desde que se fue de mi casa, literalmente me he sentido fatal. Preferí no salir de mi habitación, estaba oyendo música, especialmente a Pearl Jam, acompañaba perfectamente a la situación y la manera en cómo me sentía. Está bien, puede que sea a causa de mis actos y la broma pesada que le jugué a Matías, pero aun así no tiene porque meterse en mi vida, más aún si es alguien que realmente me importa.
- Hola Sofía – escucho preguntar muy cerca de mi - ¿Qué tal tu fin de semana con el guapo de tu niñero sobreprotector? - dice Payton al acercarse a más a mí.
- En primer lugar, no es mi niñero, la que me cuida es su madre – digo renegando - y, en segundo lugar, no quiero hablar de ese imbécil – la miro un poco incomoda y suspiro profundo - Ahora ayúdame a buscar a Luck - Payton me mira frunciendo el ceño - ¿me vas a ayudar? - digo un poco molesta, todo lo que ha pasado a causa de las idioteces de Matías y bueno también mías.
- Está bien – dice finalmente - vamos creo que lo vi por allá – menciona señalando el patio.
Recorremos el patio entero, hasta le he preguntado a sus amigos y nadie lo ha visto, ya me estoy a punto de rendirme, así que le digo a Payton para ir por otro lado para llegar a nuestra siguiente clase más rápido, ya que estamos tarde, pasamos por un rincón estrecho y es ahí donde mi mundo se detiene completamente, siento como mis piernas tiemblan y mi cuerpo se estremece completamente, lo que veo me destruye, veo a Luck con Fiorella una chica muy guapa, él la está besando como si no hubiera un mañana, y eso me desespera completamente no sé qué hacer, mi cuerpo quiere derrumbarse y tirarse a llorar, me siento herida. Sé que no somos nada, pero él me gusta demasiado y siento como si fuera una traición. Mis lágrimas no pueden más, mi interior me pide a gritos que corra y llore en otro lugar menos aquí, no soporto lo que veo y prefiero alejarme tan pronto como pueda.
Llorar es bueno Sofía, eso nos va a ayudar, hazlo, pero no aquí el ni nadie puede verte así.
Corro como nunca en mi vida lo había hecho, no sé por dónde voy ni con quien estoy chocando, eso no me importa ahora, realmente estoy muy herida.
- ¡Sofía! - grita muy fuerte Payton para que pare y me detenga, pero yo no le hago caso, en absoluto y sigo corriendo hasta salir del colegio, y llegar a un parque que está muy cerca del colegio.
Matías
Me he levantado temprano, pero no quiero salir de la habitación porque sé que a esta hora Sofía se está alistando para que ir al colegio, después de suponer que Sofía no está en casa, decido tomar un paseo, necesito tomar aire fresco y olvidarme de todo.
Camino y camino sin rumbo alguno para ver hasta donde me llevan mis pies. Resulta que ellos me llevan a un parque, que en realidad no conozco, pero es muy bonito, decido recórrelo y andar quizá así logre un poco de tranquilidad mental.
En eso de estar caminando, veo a una chica que está sentada bajo un árbol con los brazos alrededor de sus piernas, me acerco un poco más hacia ella y me doy cuenta de que es Sofía. ¿No debería estar en el colegio ahora? ¿Qué hace aquí? Finalmente me siento junto a ella, y es ahí cuando me doy cuenta de que está llorando.
- ¿Estas llorando de verdad? - digo confundido y ella se da cuenta de mi presencia y voltea a mirarme. Sus ojos de color marrón tan tiernos pero cristalizados, están rojos y están votando muchas lágrimas muchas realmente.
¿Ahora estará llorando de verdad?
- ¿Qué quieres? – pregunta exaltada - Vete - la miro y niego con la cabeza, no puedo dejarla así, se le ve fatal. Aunque no sé qué le esté pasando y porqué está aquí, debería estar en clase.
- No me voy, uno por que ahora deberías estar en el colegio y dos porque estas llorando y está vez CREO – recalco la palabra – creo que no estas fingiendo.
- Uno, tú no eres mi niñero deja de actuar como si tú lo fueras – Sofía me dice como si estuviera regañándome - dos, a ti no te importa mi vida – pausa para respirar profundo - aunque tú eres el causante de todo esto - ¿Yo? ¿Cómo qué yo? ¿Ahora qué hice?
- Espera – levanto mi mano - ya no bromees más, por favor, no sé lo que te está pasando, pero...- me interrumpió.
- Me refiero a que tú le dijiste a Luck sobre la broma que te hice - Sofía lo dice aun sollozando - y el un completo imbécil se largó con... - no pudo seguir porque los sollozos se apoderan de ella.
- No es mi culpa – me encojo de hombros - yo no sabía que era una broma, te vi tan triste que es obvio que te iba a creer, porque no me acordaba absolutamente nada.
- ¡¿Me crees tan tonta como para creer en un borracho y más cuando eres tú?! – me pregunta obvia - ¡Un total desconocido para mí! – dice señalándose a ella misma con su dedo índice.
- No pensé en ese momento, estabas llorando de verdad o al menos eso creí – le repito, pero esta vez más calmado, para que ella pueda calmarse también - ¿Cómo piensas que no te iba a creer?- digo un poco molesto, porque ella me está echando la culpa a mí cuando la culpa fue de ella - incluso me sentí mal pensando que te había lastimado.
Sofía
Cuando Matías me encontró y empezó a hablar, yo solo quiero que se valla que no me mire así, está vez estoy llorando de verdad y no me gusta que me vean de esta manera. Por algo salí corriendo del colegio para que nadie me vea y luego la vida tan cruelmente pendeja para mí, hace que Matías me encuentre aquí.
- ¡No pensé en ese momento, estabas llorando de verdad! O al menos eso creí. ¿Cómo piensas que no te iba a creer? - al parecer está molesto, pero eso no me importa yo solo quiero que se vaya y me deje sola - incluso me sentí mal pensando que te había lastimado – en este momento me quedo paralizada, al parecer es un buen chico y realmente hice que se preocupara e incluso se sintió mal por ello, lo miro directamente a los ojos y vi en ellos totalmente sinceridad, eso me causa un poco de tranquilidad, realmente no es algo que esperaba, pero sí, está pasando.
- Pues no lo hiciste - digo fríamente – a pesar de que lo siento sincero, pero aun no me voy a lanzar a la piscina.
- Lo sé y eso me alegra, pero aun no me queda claro de ¿Qué paso por tu cabeza? ¿Qué querías conseguir con esa broma? – pregunta algo insistente.
- No quiero hablar de eso ahora -lo digo obvia, es que acaso este chico no ve que hace menos de tres minutos no paraba de llorar.
- Oh cierto lo siento - Matías bajo la mirada - ¿Puedo saber qué te pasa? me pregunta de manera tierna a lo que yo a penas logro sonreír a medias.

ESTÁS LEYENDO
El Hijo de mi Niñera
Teen Fiction- No necesito niñera madre, soy una adolescente - pauso - casi una mujer adulta - hago puchero - puedo atenderme sola - menciono casi derrotada, mi madre me mira, y niega con la cabeza. - Sabes que no es por eso Sofía, es por tu seguridad - me repr...