Mi hermano siempre quizo seguir los pasos de mi padre por ello hizo el examen de admisión a la escuela naval militar que se ubica en el estado de Veracruz, pero para esos días mi padre nos informó que debíamos mudarnos a un estado al norte del país ya que la armada le había dado la orden de laborar allá, así que para que Diego no se quedara solo en el D.F decidió ir con nosotros y de ahí ir a Veracruz para su examen de admisión.
Como familia de un marino estamos acostumbrados a mudarnos, cada año, aveces cada seis meses, vamos de aquí para allá "como el judio errante" diría mi abuela, así que junto con mi padre y sus maletas nos fuimos mi hermano mi madre y yo.
Al fin de todo llegamos, la casa estaba en un fraccionamiento, se veía muy tranquilo, algunos vecinos llegaron a presentarse; ese día fue un día muy cansado, en lo que acomodamos nuestras cosas y la cena, la noche nos alcanzo y caímos rendidos.
Al otro día después de desayunar Diego y yo salimos a caminar por el fraccionamiento para conocerlo mejor, cuando de repente vimos bajar de un auto a una chica muy peculiar; no media más de 1.58 cm, tenía el cabello un poco arriba de la cintura, ondulado y color caramelo (castaño casi llegándole al rubio) con la piel extremadamente blanca con buen cuerpo y facciones delicadas, ojos cafés muy oscuros. Diego y yo nos quedamos pasmados observándola, yo por el cabello que siempre he deseado tenerlo largo y la verdad porque jamás en mi vida había visto una persona tan blanca y Diego pues obvio por su belleza porque le había gustado supongo.
Apenas nos vio se acercó a saludar, con un acento raro nos dijo, hola mucho gusto me llamo Paloma, ustedes son nuevos, no son de aquí ¿verdad? (Tanto se notaba que éramos del D.F, si bueno debí suponerlo la gente del norte es muy diferente) si, somos nuevos respondí, somos del D.F pero por el trabajo de mi papa tuvimos que mudarnos, que grosera no me presente, me llamo Itzel y el es mi hermano Diego; mucho gusto Diego, el gusto es mío.
¿Tu vives aquí? Le pregunte, si, si; aquí vivo así que es seguro que por aquí nos estaremos mirando, debo irme mucho gusto en conocerlos.
El gusto es nuestro paloma dijimos Diego y yo.
Al llegar a la casa mi madre estaba preparando la comida y comencé a contarle que habíamos conocido a una chica que se llamaba paloma la cual vivía casi justo en frente de nosotros, y creo que a Dieguito no le desagrado dije riéndome y mirando a mi hermano que todavía traía cara de borrego a medio morir.
¿Así y como es ella? Dijo mi madre, debe ser muy guapa por la cara que trae tu hermano.
Pues si es muy linda y se llama Paloma, tiene el cabello largo y ondulado como el color del caramelo, exclamó Diego.
Jajaja así que te gusta una chica con rizos de caramelo dijo mi madre.
Así pasaron los días y nos empezamos a hacer amigos de paloma salíamos todos los fines de semana y nos iba enseñando la ciudad, sus costumbres y sus modismos.
Diego y ella se hicieron muy cercanos en muy poco tiempo, el solía decir que era como si se hubieran conocido en otra vida, Diego le contaba todos sus sueños y Paloma siempre lo apoyaba diciéndole que sería un gran elemento de la armada.
Diego se fue a Veracruz por una semana a su examen de admisión y volvió, en un mes le darían resultados para saber si cumplía con el perfil para ser cadete de la escuela naval militar o no.
El mes se paso volando ya solo quedaba un día antes que Diego se fuera y quisimos hacerle una comida para despedirlo, seria mi madre, Diego, paloma y yo.
Llego paloma a la casa, mientras mi madre y yo platicábamos de que se sentía muy curiosa por conocerla, te va a caer muy bien le dije, su acento es muy gracioso.
Buenas tardes, con permiso dijo al entrar, mamá ella es Paloma amiga mía y de Itzel, es nuestra vecina y vive casi en frente. Así que tu eres la famosa chica de los rizos de caramelo, paloma puso cara de extrañada; no lo tomes a mal dijo mi madre, así te puse yo desde que mis hijos me dijeron que tenias el cabello muy bonito y vaya que no se equivocaron en decir que eres muy bella paloma siéntate, vamos a comer. Terminamos de comer y platicamos un buen rato. La
verdad es que espero que cuando Diego termine la carrera aun te encuentres soltera paloma, podrían hacerse novios, casarse y darme nietos muy hermosos; ¡mamá por favor! Bueno, yo solo digo, dijo mi
madre, disculpa paloma le dijo Diego, si claro serían unos marineritos preciosos, exclamó paloma sonriendo, vez Diego te lo dije, Diego miro a paloma como si fuera su futura esposa, madre de sus hijos, el amor de su existencia.
Mientras se despedían Diego me contó que le hizo prometer que no lo olvidaría ni lo cambiaría por nadie mas; ella le respondió que no, qué dos almas no se encuentran por accidente, que haría todo lo posible por esperarlo, pero que había un hombre que llevaba mucho tiempo acosándola y que quería que se casara con el, que era un señor al que le apodaban el "tigre" un narco conocido y con muchas influencias como para poder llevársela y que nadie le dijera nada; que si el volvía y no la encontraba ya sabia lo que había ocurrido con ella, pero que siempre lo iba a llevar en su corazón y que no perdieran comunicación.
Esa ultima noche se besaron, Diego en ese beso dice haber sentido mil cosas, tristeza, miedo, amor pero mas que nada "como si dos almas hubieran sido puestas en cuerpos que encajan a la perfección"
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Entre bazucas y rosas
Non-FictionCuenta la historia de Paloma, una chica que vivía en un estado al norte de México, a la cual le cambia la vida tras ser raptada y violada por el "tigre" un poderoso narcotraficante que después la convierte en su esposa, Paloma termina siendo igual o...