1

183 12 3
                                    

Tan solo era una bebé, empezando a experimentar lo que se llama vida. Mis padres y yo vivíamos en un pueblito de las montañas muy alejado de lo que se llamaría la vida urbana .

Éramos "humildes" por así decirlo ya que el escaso sueldo que nos mantenía era del trabajo duro de mi padre , mi madre insistía en ayudarlo para que nuestras cuentas no fuesen tan difíciles de pagar, más él se negaba porque ella tenía que cuidarme y el haría el trabajo duro y aparte no conseguiría trabajo tan fácilmente porque lo que ella gastó años estudiando no era un trabajo bien remunerado en la actualidad . Esa idea a mi nunca me ha gustado y me refiero es a que el hombre debe afrontar solo el trabajo duro para mantener en pié y con vida a su familia. Pasó un año y mi padre consiguió una oferta de trabajo muy buena según él, pero de mala suerte no podíamos acompañarlo ,mas no perdió la oportunidad . Pasaron semanas y como él nos prometió la paga si era mucho mejor y nos mandaba el dinero por correo, mientras yo me acostumbraba al vacío tanto en la casa  como en mi vida .

Años tras años, todo se mantenía en la misma rutina , visitábamos más seguido a mis abuelos que vivían a 5 horas de lejanía y aveces nos quedábamos allá porque se nos hacia muy tarde y no es seguro salir de las casas siquiera , vivíamos en un lugar muy peligroso . Un día llegando del viaje nos conseguimos con una sorpresa no muy grata , mi mamá apenas abrió la puerta vio que había llegado una carta con el mismo sobre que usaba mi padre al mandar el dinero , al principio no se veía fuera de lo común mas cuando abrimos la carta no salieron billetes si no una hoja de papel gris como si estuviera muy sucia . No sabia lo que pasaba pero logro extrañarme ,soltando la carta y poniéndose repentinamente de rodillas golpeándolas contra el piso mi mamá cayo en llanto , en eso lo único que hice fue ver la carta.

- ¿ mamá que paso con papá ?...¿ Por qué lloras ?

Tan solo subió la mirada y me miro con la vista vacía , me sujeto de la mano y me sentó en sus piernas , acariciando mi liso cabello me miro a los ojos, los suyos seguían derramando lagrimas pero tenía una sonrisa que a simple vista era falsa.

- esta muerto...-respondió con la voz quebrada y volviendo al llanto me abrazo con fuerza.

Después de esas palabras solo recuerdo como las luces se apagaron y los colores se opacaron. Aunque era un sentimiento no muy fuerte igual me dolía ,porque no logre conocerlo muy bien , apenas recordaba su rostro y era gracias a las fotos de los porta retratos que habían en la casa , tenia años sin saber de él , siempre que preguntaba las respuestas que obtenía eran "esta bien" , pero era mi padre. Pasé consolando la triste alma de mi madre durante toda una semana ya que la ceremonia seria cuando llegaría el circo a mi cuidad y suena tétrico ya que ellos llevarían el cadáver , pero fue petición de mi madre, quería verlo por ultima vez.

...

Ya siendo el día , me levante y empece a alistarme , me di una ducha y salí a mi habitación directo al armario , no tenia nada de color negro que fuese decente así que amarré mejor mi toalla y pensé en ir a preguntarle a mi única compañera de casa ( mi mamá ) si podría prestarme algo. Abrí la puerta y ya cruzando el pasillo escuche la voz gruesa de un hombre , mi curiosidad no pudo conmigo y quise ver de quien se trataba aunque no reconociera la voz.Baje las escaleras y vi a un hombre en la entrada hablando con mi madre, tenía pinta de tener entre 40 años , su cabello negro brillaba mucho como si estuviera engrasado y por como estaba vestido se notaba también iba al cementerio , me dio una mala vibra y no supe por qué si se veía tan bondadoso pero como me habían dicho "no hay que guiarse por las apariencias".

-¿Querrá una taza de té ?

-No me la perdería por nada en el mundo,tengo tiempo sin probar algo digno de llamarse té , gracias.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Dec 04, 2015 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

The CircusDonde viven las historias. Descúbrelo ahora