The inside Darck of Alice

Chapter 2: El comienzo de una nueva Vida

Poco después de eso desperté y pude ver los tubos y el suero que me habían colocado en ese momento supe que estaba en el hospital, pude ver a mi lado a mi padre sujetando mi mano entonces saque un leve gemido lo cual lo despertó.

-¿eh?, Alice mi querida Alice, despertaste-

Después de escuchar eso le sonreí y el empezó a llorar, me abrazo tan cálidamente, entonces recordé lo que paso y le pregunte.

-Padre, ¿Dónde está mi madre?, ¿está bien?-

Al escucharme decir aquellas palabras me vio melancólicamente.

-Tu madre murió en el accidente...fue un milagro que sobrevivieras...tuvieron que operarte de los ojos y reacomodar tus huesos tenías las costillas rotas, una pierna rota en tres partes y un brazo...así que...estas un poco cambiada amor, solamente tus ojos tuvieron que hacer unos cambios no pudieron salvarlos ya que parecía que alguien quería extirparlos, según esto los doctores era posible que algún animal o algo con garras quería sacarlos-

Me puse a pensar (entonces, nada de esto fue un sueño.)Entonces empecé a llorar.

-¡Fue mi culpa!, si no hubiera discutido con mi madre en el auto no hubiera pasado nada de esto, ¡Mierda por que no fui yo la que murió, ¿por qué?!-

Mi padre al verme de un modo tan agitado, me tomo del rostro y limpio mis lágrimas.

-Tranquila cariño nada de esto fue tu culpa, fue un accidente no te mortifiques, a tu madre no le hubiera gustado que estuvieras a si-

Entonces él se detuvo y me abrazo, seguí sollozando un poco y lo abrace con la poca fuerza que tuve. Entonces le hice una pregunta

-Padre, ¿cuánto tiempo llevo aquí?-

El me soltó poco a poco y se sentó a mi lado mientras decía con una voz un poco más tranquilizante.

-Has estado internada 3 meses amor fue un milagro que despertaras y me alegro que lo hayas hecho-

Me sonrió mientras tomaba mi mano y la acariciaba, por lo cual le devolví la sonrisa. Ya había pasado más tiempo por el cual me dieron de alta para poder irme, me senté en una silla de ruedas y mi padre la llevo a andar hasta la camioneta, entonces me cargo y me monto en el asiento, le sonreí y empezamos el trayecto hacia la casa de mi padre. Mi padre y yo éramos típicamente como dos gotas de agua en el cual nos entendíamos mucho y casi nunca peleábamos, lo visitaba muy pocas veces ya que él vivía en nueva Orleans y mi madre y yo en Londres, llegamos a casa de mi padre y me bajo en la silla de ruedas me encamino hacia la entrada y dijo.

-ah...bienvenida a nuestro Dulce y vieja casa jeje-

Dirigió su mano hacia su cabeza y empezó a sobarse en forma de nerviosismo por el cual yo sonreí.

-Ya tiene mucho tiempo que no venía a este lugar -

Entonces nos adentramos hacia la casa y me dirigió a mi cuarto donde ya estaban mis cosas y un peluche que mi madre me había dado en mi cumpleaños número dieciséis antes de morir era un lobo de ojos azules como eran los míos de un color grisáceo y blanco en las patas.

(Aun después de poco tiempo sigo culpándome por lo que sucedió) mi padre me acostó y agarre aquel peluche y lo abrace con todas mis fuerzas, luego me dijo.

-Bueno señorita...como usted sabe necesita descanso, pero...eso no significa que dejaras tus estudios así que empezaras la próxima semana, ¿entendido?-

Puso su mano en mi cabeza y empezó a alborotarme el cabello, por el cual sonreí y trate de quitar su mano de mi cabeza.