Te Soñe Por Siempre (Segunda Parte De "Esa Bonita Pesadilla")

20: Me Siento Utilizado...

Había visto por primera vez a mi bebé y no podía creerlo, por más asustada que hubiera estado, ya no lo estaba. Nos habían dado una foto de el bebe y yo no paraba de mirarla. Elay lo había tomado bien, estaba feliz y pude comprobarlo cuando nos enseñaron al bebé.

Podía empezar a imaginarlo siendo un buen padre, protector y sobre todo amoroso.

- ¿hey, que piensas? - pregunto el, mientras sabíamos en el elevador.

- nada, cosas, sólo cosas - sonreí.

- ummm... ¿puedo saber que cosas?.

- ¿puedo guardarme esas cosas?.

- lo pensaré - llegamos a nuestro piso y mi teléfono empezó a sonar, lo saque para ver quien era y contesté.

- hola chica guapa, ¿cómo estas? - dijo la voz de Mark.

- bien gracias - respondí mientras Elay me abría la puerta.

- me dijeron que te sentias mal, ¿ya estás mejor?.

- si, fui al médico - contesté, pero no dije porque fui al médico, quería guardarme eso por un tiempo - nada grave, algún virus.

- malditos virus del ambiente - se quejó el chico - Cooper te ha estado extrañando y te manda saludos - se escuchó una voz de Cooper en el fondo - ¡búscate un maldito bosque y piérdete idiota!.

- vaya, el siempre tan... amable.

- si, amo a ese chico, bueno mejor me voy antes de que en serio le de un ataque, espero que te mejores.

- gracias Mark - sonreí - hasta mañana.

- chaito - dijo y colgó.

- era Mark - le conté a Elay.

- ¿un virus? - el alzó una ceja.

- un virus - me encogí de hombros - es... estoy feliz, estamos felices - comencé a explicar - pero... no quiero decírselo a nadie hasta que hayan pasado unos meses más, quiero... que todo vaya bien.

- y todo irá bien - se sentó a mi lado - ¿ni siquiera le vamos a decir a nuestras familias?.

- no aún, vamos a decirles, pero no todavía.

- ¿Roy y Fuzz? - negué - ¿a quién le contaré lo feliz que estoy? - me sentí un poco mal por eso, creo que el tenía razón - esta bien, sólo espero que ellos no lo descubran.

- ¿estarás bien con eso?.

- puedo manejarlo - asintió.

- gracias.

- no hay porque - se acercó más a mi y me robó un beso.

- aún sigo enojada contigo - me levanté de ahí y fui por un vaso de agua.

- ni siquiera entiendo por qué sigues molesta conmigo - dijo mientras caminaba detrás de mi. Me miro esperando una respuesta.

- me mentiste - volví a la sala y me senté en el sillón.

- ¿lo hice?.

- no seas idiota - le lance un almohadón.

- wow - lo atrapó - de acuerdo - fue a donde yo estaba y se sentó a mi lado - ¿me perdonas?.