capítulo 9

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- quiero hablar contigo - me aclara mirandome.

Me mete dentro de la habitación donde perdi mi virginidad y me sienta en el sillón. ¡cuanta fuerza tiene! Ella toma asiento a lado mio y las dos nos quedamos mirandonos.

-¿sobre que quieres hablar? - pregunto nerviosa.

-esperaba que a pesar de ser humana, seas más perspicaz - comenta pasando la lengua por sus colmillos.

-no te entiendo. Y además me gustaria saber con quien hablo.

-Madison. - dice en tono seco y bastante cortante.

Sus ojos rojos me penetran los huesos. Jamás vi una mirada igual. En verdad me intimida.

- lamento que hayas visto lo que haciamos Adrien y yo - digo para evitar ese momento incómodo. Creo que eso es sobre lo que quiere hablar.

- tranquila. No es la primera vez que lo veo haciendo esas cosas.

Su respuesta me sorprende. A que se refiere con que lo ha visto haciendo esas cosas varias veces? ¿acaso Adrien es un mujeriego que se la pasa de mortal en mortal? Y entonces yo soy una mortal más en su larga lista de amantes?

- no quise asustarte - se perdona - solo lo dije para que no te sientas culpable. Adrien no tiene filtros, ni tampoco límites.

-¿límites? - pregunto extrañada. Esta conversación es muy rara.

- si limites. En sus 376 años de vida, Adrien ha tenido infinidad de chicas pero todas terminan igual.

¿estoy saliendo con alguien 360 años mayor que yo? ¿estamos saliendo? Nono. Entonces no me ama. Y tuvo muchas mortales. ¿Como terminaron esas mujeres?

-¿como terminaron esas chicas? - digo en un susurro muy timidamente.

- ¿cómo crees? - me explica - las mordio a todas, absorbio toda la sangre de su cuerpo. Las relaciones amorosas con vampiros son complicadas. Con cada beso, pierdes 5% de la sangre de tu cuerpo.

¡voy a morir! Si Adrien sigue conmigo y yo sigo con él no duraré mucho mas con vida. Hoy me chupo la sangre del labio. ¿cuanta sangre habré perdido hoy? Debo dejarlo. Pero cómo? Si lo abandono, me hipnotizará para que me quede con él. Si sigo con él, moriré. Si me distanceo un poco, leera mi mente para saber que me pasa. No hay forma de escapar de él.

Antes me sentia feliz con él. Antes lo consideraba mi protector. Pero ahora... ahora es una amenaza, es mi perdición, mi final.

Rodeada de colmillos (RDC#1)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora