Tiempo juntos

Capítulo único

Oneshot sarumi de cuando eran lindos adolescentes, espero que les guste~

Notas preliminares:

Categoría: Yaoi~

Pareja: Fushimi x Yata.

Disclaimer: Los personajes de K-Project no me pertenecen (¡qué más quisiera yo! xD), sino a sus respectivas creadores GoRa y GoHands. Yo sólo los tomo prestado para escribir este fanfic sin fines de lucro, sino más bien para hacer lo que me gusta y compartirlo con ustedes.

"Tiempo juntos"

by

Fatima Winner

Saruhiko y Misaki se conocieron en la escuela media y aunque ambos poseían personalidades complicadas, pero en formas completamente diferentes, lograron hacerse amigos. Posiblemente la razón de porqué llegaron a llevarse tan bien fue porque compartían un sentimiento de soledad muy profundo y que se negaban a exponer delante de otras personas. En especial el muchacho de lentes, quien solía mostrarse callado y desinteresado en todo lo que le rodeaba. Hasta que conoció a ese pequeño chico castaño...

«Es algo tonto y torpe, pero...»

-¿Saruhiko?

Sus pensamientos fueron interrumpidos por el repentino llamado de esa persona. El chico nombrado giró a verlo en silencio.

-¿Qué haces ahí? Ya sonó la alarma de la salida, vámonos.

Saruhiko simplemente se levantó y lo siguió a la salida. En realidad él siempre estaba siguiéndolo a todos lados. Ni si quiera se había detenido en algún momento a preguntarse por qué y tampoco le importaba saberlo.

Antes de terminar de salir de la escuela se dieron cuenta de que había comenzado a llover.

-¡Tsk y tenía que llover ahora!- se quejó el castaño fastidiado.

-Es porque estamos en época de lluvia- comentó el otro.

-Estúpida época de lluvia...

-...¿No trajiste paraguas, verdad?

-Pues no.

«Tan descuidado como siempre».

El chico de cabellos oscuros cogió el paraguas que había dejado dentro de su casillero y se lo extendió a Misaki, quien lo miró sin entender.

-Puedes usarlo si quieres, después de todo mi casa queda cerca a diferencia de la tuya.

-No, gracias. No es como si pudiera usar el paraguas de otra persona.

-¿Entonces qué? ¿Quieres compartirlo?

-Claro que no, no soy una chica- se quejó sonrojado -Además, ¿no íbamos a ir a tu casa hoy también?

-Sí, pero estuviste estornudando hace rato y conociendo lo debilucho que eres de seguro que quieres enfermarte.

-No soy ningún debilucho...

-Será mejor que vayas a casa, Misaki- insistió serio.

«Si te expones a la lluvia, podrías enfermar de verdad».

-¡No me trates como a un niño!- exclamó fastidiado -Si te digo que no necesito el paraguas es porque no lo necesito y ya, ¿ok? ¡Me largo!

Y sin decir nada más se fue. Saruhiko se quedó con el paraguas en la mano mientras lo veía irse.