*Antes que nada, quisiera hacer homenaje a una valiente chica que llegué a conocer, de nombre Daniela, su suicidio nos marcó a todos, entendemos la fragilidad de la vida, que lastima entenderla de esta forma, Gracias...*
*Tiempo después*
Vivimos en sueño donde la falsedad la controla, la depresión la organiza y el suicidio administra.
-La verdad ya no sé qué hacer con él, yo ya me cansé, primero tener que aceptar su homosexualidad y ahora ¿Su depresión? -Reclamó Polis.
-Solo debe alcanzar a graduarse, no lo tendrás para siempre polis -Dijo Kate en baja voz.
-Tranquila, las cosas pueden cambiar, solo consiste en irme lo más rápido que pueda, no tienes que decir más, lo comprendo muy bien.
-Daniel... -Con cara pálida. ¿Hace cuánto estás escuchando?
-Lo necesario para saber qué debo irme de este lugar.
-Dani, las cosas no son como las intentas asimilar.
-¿No? -Con lágrimas. A ver ¿cómo son? ¿Ustedes creen que no he intentado lo mejor para salir de esto?
-Pues no es suficiente -Con desagrado.
-Yo lo intenté -Con voz baja.
-Si, pero de la forma incorrecta, dime ¿Quién carajos se intenta suicidar a los 7 años?
-¡Polis! -Gritó Kate.
-Este niño, herido, producto de una borrachera, simplemente este error que les habla -Con tono seco.
Salí con rapidez de la casa, el clima combinaba a la perfección con mi humor, se escuchaban los gotear del agua, el frío consumaba tus huesos, el dolor adulaba tu oído, y el camino escrito en medio de charcos de dibujaba.
*Suena el timbre de la casa*
-¿Hola?
-Dani... oh, Nicolás, ¿Sabes algo de Daniel?
-A eso venía, no fue al instituto.
-Mierda, Tengo que buscarlo, esta mañana... pasó algo... "indebido" y Daniel no ha vuelto desde entonces.
-¡Kate no te preocupes yo lo buscaré, quédate quizás él vuelva!
-No sé porque te interesa tanto él.
-Él es diferente...
Nicolás abandona el presionado lugar en busca de lo que la vida intentó arrebatarle, su único y verdadero amor, Daniel.
-Bueno pensemos, seguro algo malo pasó, pero, ¿a dónde iría?
Nicolás empezó a recordar con el fin de encontrar la mínima huella mental de donde podría encontrarse Daniel.
*
-Y dime ¿A dónde vas cuando estás mal? -Teniendo a Daniel sobre su pecho.
-Buena pregunta, diría que, a la estación, es un gran café el de allí, lo mejor es el de caramelo.
-¿Algún día tomaremos uno allí? -Preguntó Nicolás con picardía.
-Si, cuando por fin puedas cargarme hasta allá.
-¿Es un reto? -Preguntó Nicolás entusiasmado.
-Quizá -Riendo.
Como un golpe seco, Nicolás regresa a la realidad.
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Tenue resplandor
RomanceTodas las noches son tormentosas, donde cada dolor te golpea la cabeza y cada prejuicio el corazón. No sé cómo soportar segundos sin sentir el latir de su corazón, la suavidad de sus caricias, la firmeza de sus manos y la perfección de sus labios. E...