Un ángel de Victoria Secret.

Capitulo 8. Ángel.

ANDREA'S POV.

Me tumbe en la cómoda hamaca y continué con mi lectura mientras comía dulces que habia cocinado Anastasia.

Hacia ya dos semanas desde que me quede a dormir en casa de Brooklyn, para ser sincera, había sido una fantastica noche y un fantástico medio día, y me enfade mucho cuando Cesar me dijo que tenia que hacer una sesion ¿La gente no entiende lo que significa vacaciones? Parece que no.

El caso,es que desde ese día, no lo he vuelto a ver ni he hablado con él, es como si hubiera desparecido. No ha subido ninguna foto a instagram, no ha publicado ningún tweet ni nada parecido. Es como si se hubiera ido del país y no se lo hubiera dicho a nadie. Me asusta.

He llegado a pensar que esta evitándome porque no quiere saber nada de mi, que ya no le intereso, y de hecho lo sigo pensando. ¿Por que si no desapereceria después de aquel día? No le encuentro otra explicación. Tengo miedo e que mi teoría sea cierta, porque eso significa que realmente yo no le gustaba y solo fui una rollo mas, una chica mas para la lista de conquistas. Y tal vez este exagerando porque si es verdad que no estoy enamorada ni nada por el estilo, pero he de admitir que me gustaba, y me gusta Brooklyn Beckham.

Pare de leer cuando escuche como Anastasia abría la puerta y dejaba entrar a alguien desconocido para mi. Desconocido hasta que lo vi entrar por la puerta del jardín.

-Hola Ángel.- James se acerco a donde yo estaba y me dio un cariñoso beso en la mejilla. Hacia mucho tiempo que no lo veía, desde la fiesta de gala a la que fui con Cesar, y al cual después no vi en toda la noche.

-James.- me senté en la hamaca dejandole un sitio, así que él se sentó a mi lado y cogió mi libro para comenzar a leerlo. - ¿Que haces aquí?

-No es difícil saber donde vive una modelo de Victoria Secret conocida mundialmte.- su mirada se aparto del libro y me miro con una enorme sonrisa.- He pensado que podríamos hacer algo.- sus ojos se achinaron cuando hizo su sonrisa aun mas grande. ¿Como puede sonreír tanto? Increíble.

-¿Podríamos? ¿Los dos juntos?- lo mire divertida, intentando jugar un poco con
él. Tal vez sea divertido pasar un tiempo con alguien y olvidarme durante unas horas de ese chico que ha desaparecido.

-Si, los dos.- se tumbo mejor en la hamaca, provocando que casi cayera al recién mojado césped. - Tiene que ser divertido salir con una modelo de Victoria Secret, digo, te siguen fotógrafos a todas horas y tienes hasta fans, tiene que ser realmente fantástico.- lo mire incrédula, sin poder creer lo que acaba de decir. Se equivocaba completamente. Al principio piensas que esta bien, que no pasa nada cuando un puñado de personas se te acerca y te hace diferentes preguntas o cuando ves una cámara seguirte desde tu casa al estudio. Pero cuando pasa el tiempo, te agobias, no quieres que te hagan mas preguntas, te cansas de que siempre te estén hacinado fotos, y sin ninguna duda, te frustra que se creen falsos rumores sobre noviazgos. Definitivamente, James no tiene ni idea de lo que dice.

-No, no es divertido.- me levante, indignada, de la hamaca, y entre en el comedor tirándome en el enorme y cómodo sofá. La televisión proyectaba una película en blanco y negro, donde dos enamorados se daban un apasionado beso bajo la lluvia. Típico.

-Pues a mi me parece divertido.- hice caso omiso a su comentario e intente concentrarme en la película, pero fue complicado ya que hacia tiempo que había comenzado, así que me fue imposible encontrarle pleno sentido.- ¿Quieres ir a un parque de atracciones?- lo iré confundida, con mi ceño ligeramente fruncido ¿A un parque de atracciones?

-¿En serio?- rápidamente, él asiento y una gran sonrisa se dibujo en su rostro. -¡SI!- le di un abrazo rápido y corrí a mi habitación para vestirme con un top negro impermeable, una camiseta de tirantes encima, unos shorts y unas zapatillas viejas. Me hice una coleta rápida y me pinte lo justo. En diez minutos ya estábamos en la puerta de un gran parque de atracciones, el cual estaba lleno de gente haciendo cola, pero nosotras no tuvimos que esperar mucho.

-Quiero montar en todas las montañas rusas.- di pequeños saltos de alegría, lo que provoco una adorable risa por parte de James.

-Subiremos en todas.- paso un brazo por encima de mis hombros mientras caminábamos a la primera atracción.

Era raro, pero me sentía cómoda con James. Me sentía protegida y querida. Me gustaba.