Sexta integrante (One direction y tú).

Capítulo 28.

Me desperté siendo cargada por alguien. Abrí los ojos y lo primero que vi fue la cara de Niall. Me llevaba en brazos hasta nuestra habitación. Wow. Dicho así suena un poco mal... Niall sintió su mirada sobre la mía y me sonrió.

- ¿Cómo ha dormido la princesa de la banda? – Me preguntó mientras abría la puerta de la habitación.

- Bien, demasiado bien. ¿Cuánto hemos tardado en llegar? – dije mientras bostezaba y me acurrucaba en su cuello.

- Unas 3 horas, cielo. Así que a hacer las maletas y a dormir. – dijo mientras me dejaba en la cama.

Él se fue para el armario, sacó dos maletas y las puso en el suelo. Las abrió y me miró.

- Vamos a hacer las maletas, princesa. – dijo mientras se acercaba a la cama y se tumbaba a mi lado.

- No tengo ganas... - le dije mientras hacía pucheros.

Niall se río y me atrajo hasta su pecho. Cabe decir que yo metí la cabeza en el hueco de su cuello y lo abracé. Que bien huele el jodido.

- Vamos peque, hacemos las maletas y después nos vamos a dormir. –dijo mientras me acariciaba el brazo.

- ¡No quiero! –dije mientras hacía un berrinche propio de una niña de 5 años. Y el pobre de Liam pensaba que yo iba a ser más madura. ¡Já! Que se lo cree él.

- ¡Vamos! No seas perezosa y levanta tu bonito culo de la cama.

- ¿¡Me has mirado el culo?! Que inapropiado Sr. Horan.

- Perdone Srta. ______, pero son cosas que uno no puede evitar. Además, obvio que te lo iba a mirar. ¿No me has escuchado antes? Te he dicho que me gustas y mucho, y cuando alguien te gusta le miras el culo. ¿No? Espera, ¿se puede saber cómo hemos llegado hasta este punto de la conversación? Se suponía que deberíamos estar haciendo las maletas, y no hablando de tu culo, nena.

- Espera tú, ¿me acabas de llamar nena? Eso no te pega. Tú eres Niall Horan, el adorable de One Direction, tú no dices nena. ¿Te has convertido en Cristian Grey? – Todo eso era para desviar la atención. Cabe decir que su "nena" me ha dejado un poco parada y con ganas de besarlo y no parar. Y, me había sonrojado a más no poder...

- Ja, ja, ja que graciosa. Que sepas que no siempre soy adorable, cielo. Además puedo apostarme lo que quieras a que te ha encantado que te llamase nena, puedo notar tu sonrojo. – dijo mientras me guiñaba un ojo. Niall Horan también podía ser sexy cuando quería. Bueno, mejor dicho, Niall Horan era un cabronazo sexy. Dios.

- Venga vamos a hacer las maletas. –dije mientras me levantaba.

Escuché a Niall reírse detrás de mí. Cabrón. Abrí el cajón de los tejanos y cogí unos cuantos para mí y otros cuantos para Horan. Los metí en las maletas, dándome cuenta de que él había metido un par de vestidos y faldas en la mía, al igual que había metido una americana y unas camisas en la suya. Me giré y lo encontré buscando entre las sudaderas.

- Niall, ¿tenemos alguna entrevista o algún evento allí en Irlanda?- le dije un poco extrañada por el tipo de ropa que había metido en la maleta.

- Nope. –dijo mientras seguía buscando algunas sudaderas para los dos.

- ¿Y entonces? ¿Para qué son los vestidos, faldas, camisas y tu americana?

- Ah, eso. Es por si salimos todos a cenar a algún restaurante y... - dijo haciendo una pausa dramática mientras se giraba y caminaba hacia mí. – Porque Srta. _____ la voy a llevar a una cita mientras estemos allí.- dijo poniendo un mechón de mi flequillo detrás de mi oreja.